La izquierda planta cara a Urkullu

El efecto Urkullu solo parece haber servido al PP, que ayer insist¨ªa en que es posible un acuerdo con los socialistas mientras el PNV se mostraba convencido en evitar pr¨®rrogas presupuestarias. Euskadi se vio ayer m¨¢s cerca que nunca de una devoluci¨®n del primer proyecto de presupuestos de la etapa de I?igo Urkullu, despu¨¦s de que, como respuesta a las reuniones con el lehendakari, tanto EH Bildu y PSE registraran sus enmiendas a la totalidad y UPyD anunciara que lo har¨¢ ma?ana.

Son, en total, 38 de 75 votos del pleno, los suficientes para devolver al Gobierno un proyecto de presupuestos que ha sido contestado por la oposici¨®n, agentes sociales, sindicatos y patronal. Es el resultado inmediato de la ronda de contactos que ha protagonizado el lehendakari, la tercera del Gobierno para tratar de lograr adhesiones a su propuesta presupuestaria ¡ªlas dos anteriores estuvieron presididas por el consejero Ricardo Gatzagaetxebarria¡ª y la primera en la que la oposici¨®n ha recibido un planteamiento por escrito de ¡°m¨ªnimos¡±.

¡°Tan de m¨ªnimos que se queda en nada¡±, resumi¨® ayer el portavoz socialista, Jos¨¦ Antonio Pastor, con una expresi¨®n con la que aglutin¨® las cr¨ªticas de todos los grupos que saltaron a los medios ayer. El documento, de 17 p¨¢ginas, recoge una reflexi¨®n sobre la inconveniencia de la pr¨®rroga presupuestaria y reclama responsabilidad ante una situaci¨®n de ¡°pr¨¢cticamente emergencia presupuestaria¡±.

Los ¡°hipot¨¦ticos¡± ingresos se negociar¨ªan tras la aprobaci¨®n del presupuesto con los grupos, a trav¨¦s de una ley que el documento nombra como de cr¨¦dito adicional. Una referencia insuficiente para los socialistas, que dedican buena parte de su enmienda a la totalidad a reclamar la revisi¨®n de los ingresos previstos para 2013, un aspecto cerrado a cal y canto por el Gobierno que el PSE entiende como la ra¨ªz de unos presupuestos de ¡°resignaci¨®n¡± que llevan a ¡°nuevos sufrimientos y a instalarnos en la par¨¢lisis econ¨®mica¡±.

El PSE estima en su enmienda que Euskadi podr¨ªa contar con 890 millones adicionales (el 1,4% del PIB), una cifra que seg¨²n aseguraron es conservadora y podr¨ªa ser en realidad mayor, entre los nuevos impuestos. EH Bildu tambi¨¦n hace referencia a la necesidad de contabilizar mayores ingresos. Aunque no detalla en sus enmiendas una cifra concreta, Laura Mintegi se?al¨® en rueda de prensa que estos podr¨ªan ascender a 1.500 millones. Por su parte, UPyD censur¨® que la respuesta de Urkullu a sus 16 exigencias es ¡°claramente insatisfactorio y muy decepcionante¡± porque no se ha acercado a sus peticiones. Si UPyD se abstuviera en la votaci¨®n de la devoluci¨®n, se producir¨ªa un empate que obligar¨ªa a repetir las votaciones el viernes siguiente.

El escrito de Urkullu va m¨¢s all¨¢ de cuestiones meramente presupuestarias. Como ya avanz¨® este diario, esboza su intenci¨®n de realizar cambios en la administraci¨®n que conlleven un ahorro y una reforma fiscal que incluya cambios en el IRPF o en el Impuesto de Sociedades, as¨ª como medidas para atajar el fraude fiscal por medio de mejoras en el intercambio de informaci¨®n y un plan conjunto de lucha contra el mismo.

Basagoiti intenta que L¨®pez d¨¦ marcha atr¨¢s para buscar un acuerdo a tres

Pastor critic¨® al Gobierno por su ejercicio de ¡°dejaci¨®n pol¨ªtica¡± y denunci¨® que el PNV ha ¡°renunciado¡± al autogobierno. En esta misma l¨ªnea, Mintegi reclam¨® en euskera: ¡°se recauda aqu¨ª, se distribuye aqu¨ª y se decide aqu¨ª¡±. La coalici¨®n abertzale se comprometi¨® a analizar el documento de Urkullu con m¨¢s detalle, ya que registr¨® su enmienda a la totalidad tras salir de una reuni¨®n con el lehendakari que dur¨® alrededor de una hora. Sin embargo, la portavoz avanz¨® que el ¡°punto de partida¡± de las cuentas del PNV es ¡°diametralmente opuesto¡± a la pol¨ªtica econ¨®mica que desea EH Bildu, lo que genera importantes dificultades para un acuerdo con la coalici¨®n.

Son posturas que, al menos en p¨²blico, no parecen haber variado ni lo m¨¢s m¨ªnimo en los ¨²ltimos d¨ªas y que hacen que las cuentas parezcan abocadas a una devoluci¨®n, pese a la postura favorable al acuerdo que ha mostrado un PP cuyos votos son insuficientes para Urkullu ¡ªser¨ªa necesario sumar, al menos, el de UPyD, algo que su parlamentario, Gorka Maneiro, ha descartado hasta la fecha¡ª. Diez d¨ªas es el tiempo que tiene ahora el Ejecutivo para cambiar las tornas, un tiempo suficiente para virajes en las posturas de los grupos.

Pese a que las palabras de EH Bildu, PSE y UPyD situaron a los tres partidos lejos de la posibilidad de retirar sus enmiendas a la totalidad ¡ªalgo que pueden hacer en cualquier momento, hasta el mismo d¨ªa de la votaci¨®n y que los socialistas juran y perjuran que no har¨¢n¡ª, la portavoz en materia econ¨®mica del PNV, Josune Gorospe, interrumpi¨® su presencia en la comisi¨®n de Hacienda para comparecer ante los medios, se?alar que ¡°todas las puertas siguen abiertas¡± y mostrarse convencida de que a¨²n es posible alcanzar pactos. Gorospe hizo un llamamiento a seguir negociando al ensalzar que a¨²n quedan diez d¨ªas para la votaci¨®n de la devoluci¨®n de las cuentas.

Al igual que Gorospe, el presidente del PP vasco, Antonio Basagoiti, insisti¨® en la posibilidad de un acuerdo a tres con el PSE, partido al que emplaz¨® a ¡°mejorar¡± junto con el PP el proyecto nacionalista. Basagoiti hizo referencia ¡°especialmente¡± a Patxi L¨®pez, a quien el presidente del PNV, Andoni Ortuzar, ya pidi¨® un acuerdo que haga honor a su tratamiento de lehendakari. Basagoiti advirti¨®, pese a su respaldo a los jeltzales, que si para el viernes no hay una ¡°concreci¨®n clara de las mejoras¡± del proyecto, su partido tambi¨¦n presentar¨¢ una enmienda a la totalidad.

Estirar la pr¨®rroga que gestiona el Ejecutivo desde sus primeras semanas de vida hasta final de a?o supondr¨ªa algunos inconvenientes de gesti¨®n y, sobre todo, un golpe pol¨ªtico para Urkullu, que en este tramo final ha protagonizado la negociaci¨®n.

El documento remitido por el Gobierno a la oposici¨®n recoge en su pre¨¢mbulo una extensa argumentaci¨®n sobre las dificultades que entra?a la pr¨®rroga, entre ellas la ¡°inseguridad jur¨ªdica y econ¨®mica¡± y una ¡°inestabilidad econ¨®mica en las finanzas p¨²blicas nada recomendable¡± porque genera una ¡°sensaci¨®n de provisionalidad financiera¡± indeseable. Euskadi es, junto con Catalu?a, la ¨²nica comunidad aut¨®noma que todav¨ªa sigue negociando sus cuentas.