En este proyecto mando yo

A veces pasa que uno va a otro pa¨ªs y piensa: "?Y por qu¨¦ no tengo esto en mi ciudad?". Eso es lo que le ocurri¨® a Javier Alonso, arquitecto madrile?o, cuando vio las cubiertas que ten¨ªan los pa¨ªses n¨®rdicos. Decidi¨® que si las azoteas de los pa¨ªses m¨¢s fr¨ªos ten¨ªan un uso, Madrid, con un porcentaje de sol al a?o bastante superior, no pod¨ªa ser menos. Esa idea le reconcom¨ªa la cabeza desde hace a?os y por fin va a ser capaz de ver el fruto de su obsesi¨®n. Pero a pesar de su profesi¨®n, que le capacita para dise?ar un proyecto de estas caracter¨ªsticas, no ser¨¢ ¨¦l quien lo lleve a cabo. La idea de cualquiera podr¨ªa triunfar: la del panadero, la del profesor o la del pintor. Todo gracias a Madrid Think Tank, una iniciativa del Colegio de Arquitectos de Madrid (COAM) que tiene la ambiciosa intenci¨®n de involucrar a cualquier ciudadano en el desarrollo de su entorno.

El primero que se convertir¨¢ en una realidad ser¨¢ precisamente el de las cubiertas. Uno de los tejados de Matadero ser¨¢ el pionero en experimentar la arquitectura ciudadana, concretamente el de la nave 16. ¡°Cuanto m¨¢s disparatadas sean las ideas mejor, se valorar¨¢ la innovaci¨®n, luego los profesionales ya se encargar¨¢n de adaptar las propuestas a la realidad¡±, explica Alonso. De esta manera se consigue el equilibrio entre el profesional y el profano. A ¨¦l se le ocurren muchas maneras convertir este tejado de cuatro metros de ancho por cien de largo, pero asegura que prefiere no comentarlas en voz alta para no condicionar las propuestas ciudadanas.

A todo hay que ponerle una pega, ya que la normativa madrile?a impide que las cubiertas tengan uso. Ah¨ª entra en juego la Administraci¨®n, porque los impulsores de esta plataforma pretenden ser el cauce de la participaci¨®n ciudadana y que el Ayuntamiento adapte parte de su regulaci¨®n a la voluntad de los madrile?os.

Pero esto que es tan bonito sobre el papel, ?c¨®mo se traduce a la pr¨¢ctica? En el mecanismo dise?ado por el Colegio de Arquitectos, ellos se convierten en mediadores entre las ideas, la Administraci¨®n y los profesionales. La financiaci¨®n corre a cargo de una empresa privada que decide adherirse a los retos, el proyecto no cuenta con un c¨¦ntimo de dinero p¨²blico.

Los pasos son los siguientes. Alguien debe lanzar una idea en la web de Madrid Think Tank, que se denomina "reto". Durante un tiempo el resto de personas que deseen participar deben escribir su propuesta y entre todas las recabadas, un equipo compuesto por profesionales decidir¨¢ la m¨¢s factible. A partir de ese momento, aquel cuya idea resulta escogida se convierte en director del proyecto y tiene que contactar con un arquitecto que lo haga realidad. Aqu¨ª es donde entra en juego la Administraci¨®n, que cumple el papel de facilitador del proceso agilizando el cambio de normativa y el patrocinador, que aporta la suma para convertirlo en realidad. Durante el periodo que se abre para el env¨ªo de soluciones a los diferentes retos, el COAM organiza debates entre profesionales o charlas de expertos extranjeros para informar de las posibilidades que ofrecen los diferentes espacios.

¡°Lo que queremos es que los retos que lanzan los participantes marquen la agenda de los gobernantes¡±, explica Carlos Lahoz, director de Think Tank. El objetivo de la plataforma es llevar a cabo al menos un proyecto al a?o, aunque hay m¨¢s de 50 que se est¨¢n cociendo a la vez.

Esta plataforma lleva gest¨¢ndose dos a?os, desde que cambi¨® la directiva del COAM y los nuevos miembros decidieron buscar una v¨ªa para que el ciudadano participara en la construcci¨®n de su entorno. 40 instituciones, tanto p¨²blicas como privadas, y ocho empresas patrocinadoras est¨¢n involucradas. Los impulsores han ido de reuni¨®n en reuni¨®n intentando sacar adelante su idea con presupuesto 0, la ¨²nica posibilidad en un momento complicado para la inversi¨®n p¨²blica. Para ello han tenido incluso que convencer a dos equipos de Gobierno diferentes, por el relevo en el Ayuntamiento y en la Comunidad.

La mayor¨ªa de los proyectos no cuentan con un presupuesto fijo, el dinero que se invierte variar¨¢ en funci¨®n de las iniciativas. En el de Matadero, los promotores de las seis ideas mejor valoradas cobrar¨¢n mil euros, que aportar¨¢ la empresa Lafarge. ¡°El hecho de que Matadero acoja la primera iniciativa es significativo porque nosotros creemos que en este espacio la planificaci¨®n ha sido ejemplar¡±, apunta Lahoz.

Las propuestas intentan cambiar la ciudad de lo particular a lo general. La filosof¨ªa es alejarse de los grandes proyectos, centrarse en iniciativas concretas en los que la ciudadan¨ªa se fije para impulsar experiencias parecidas.

Los arquitectos quieren arrastrar a los ciudadanos en su ansia por redise?ar Madrid en peque?as p¨ªldoras. La primera semilla ser¨¢ una terraza en Matadero, en la que cualquiera puede decidir qu¨¦ brotar¨¢ dentro de unos meses.