De ¡®birras¡¯ en el teatro

Con una cerveza es posible arreglar el mundo. Con eso y con un pu?ado de amigos que te ayuden a hacerlo, aunque sea apoyados en la barra de cualquier bar. Pol¨ªtica, econom¨ªa, trabajo y sexo; conversaciones que vienen y van con una ca?a en la mano. Eso que nunca falte. Si a ese combinado tan habitual en los garitos de Madrid le a?ades el toque c¨®mico, el resultado ser¨ªa Arreglando el mundo, un espect¨¢culo protagonizado por Ernesto Sevilla, J.J. Vaquero y El Monaguillo, tres amigos de toda la vida que compartir¨¢n, junto a la presentadora Cristina Urgel, sus opiniones, recuerdos y an¨¦cdotas m¨¢s divertidas.

La obra es poco convencional. Dirigida por el actor y guionista Eduardo Ald¨¢n, se instal¨® el pasado jueves por segunda vez en las tablas del teatro Compac de Gran V¨ªa y, una vez m¨¢s, se visti¨® de bar para la ocasi¨®n. Las m¨¢s de 900 butacas que cubr¨ªan el espacio desaparecieron y fueron sustituidas por mesas, taburetes y barras blancas y relucientes. La luz tenue y la banda sobre el escenario terminaron de crear la atm¨®sfera necesaria. Esto no es el teatro, es una cervecer¨ªa con espect¨¢culo.

¡°?D¨®nde va la gente cuando sale los fines de semana? ?Al bar!¡±, exclama Ald¨¢n, que en la primera representaci¨®n formaba parte del elenco, adem¨¢s de dirigirlo. ¡°Aqu¨ª hemos juntado amigos tomando ca?as, m¨²sica de fondo y comedia. El plan perfecto para evadirse, para olvidar el mundo¡±, asegura.

Karaoke, mon¨®logos, sketches, conversaciones de barra de bar guiar¨¢n la actuaci¨®n que, en su n¨²cleo, cuenta la historia de tres amigos que terminar¨¢n siempre brindando. De hecho, seis de cada diez espa?oles terminar¨¢n acompa?¨¢ndoles, ya que seg¨²n una encuesta realizada por la consultor¨ªa de mercado Quote Research, el 60% de los ciudadanos reconoce no haber renunciado a la costumbre de tomar ca?as pese a la situaci¨®n econ¨®mica. En cambio, si se han despedido de planes como asistir a conciertos (74%) y al teatro (74%). Este espect¨¢culo hace un tres en uno.

Entre las mesas en forma de luna que pueblan el espacio, los cuatro actores divagan sobre como cambiar¨ªan ellos el mundo, pero ninguno se moja con un m¨ªnimo de seriedad. Para algo son c¨®micos. ¡°Si la gente mirara el mundo con los ojos de mi hija de cinco a?os, ser¨ªa distinto¡±, reflexiona El Monaguillo, casi serio por primera vez en toda la tarde. Ernesto Sevilla no se lo piensa, esconder¨ªa al presidente del gobierno y pondr¨ªa a cualquier ciudadano de a pie como l¨ªder. ¡°Lo har¨ªa mucho mejor¡±, asegura. J.J. Vaquero va m¨¢s all¨¢, su propuesta conllevar¨ªa robar todo el dinero de los bancos para que Poli D¨ªaz lo repartiera convenientemente. Un chiste detr¨¢s de otro que entrelazan, incluso, con trozos de la obra.

¡°Este espect¨¢culo se nota poco fresco, muy ensayado¡±, sigue bromeando el tr¨ªo de c¨®micos, acompa?ados de la presentadora y actriz Cristina Urgel, que har¨¢ de anfitriona, invitando al p¨²blico a subirse al escenario a cantar junto a la banda de rock en el karaoke de Arreglando el mundo. Tambi¨¦n Enrique Sanfrancisco y el mismo Ald¨¢n tendr¨¢n su colaboraci¨®n especial.

¡°Lo que pretendemos es que la gente viva con nosotros lo que est¨¢ sucediendo en el escenario, que toda sea natural y sencillo¡±, asegura sorprendentemente serio Sevilla. El objetivo es que la gente olvide, por un tiempo, que el mundo es complicado. ¡°Y lo haremos, ?c¨®mo no?, bebiendo cerveza¡±, sentencian.