Olaizola, finalista con diferencia

Aimar Olaizola sigue a¨²n muchos pelda?os por encima de Mikel Urrutikoetxea, la promesa del manomamista de Bizkaia. Lo ha demostrado en el partido de semifinales del campeonato de mano individual, disputado en el front¨®n de la capital vizca¨ªna, que ha resuelto por un significativo marcador final de 22-12. Eso s¨ª, hubo emoci¨®n hasta mediada la semifinal por la salida airosa del delantero vizca¨ªno, que en esta edici¨®n se ha consolidado como un valor en esta especialidad. Ahora, otra vez la final entre los habituales. La txapela es una cuesti¨®n de Juan Mart¨ªnez de Irujo, que ya se impuso en la anterior semifinal a Bengoetxea VI,o de Aimar Olaizola.

Era el partido entre el campe¨®n que acostumbraba a ensayar los partidos comprometidos del mano a mano con su sparring. Ahora era a cara de perro con el premio de la presencia en la final. Olaizola II no lo desaprovech¨® ni siquiera cuando de salida se vio superado por su compa?ero de empresa y quien le suele ganar con frecuencia en los entrenamientos. Pero como el propio Urrutikoetxea reconoce, "todo cambia cuando se viste de blanco".

Eso s¨ª, de entrada hubo emoci¨®n. El delantero vizca¨ªno se puso por delante con un 3-0 que le dio la moral necesaria para un pelotari que lo necesita porque tiene h¨¢bitos de salirse del partido cuando las cosas le empiezan a ir mal. En esta ocasi¨®n, se mostr¨® muy entero, seguro en la mayor¨ªa de las ocasiones y plantando cara al rival hasta donde le permite llegar la diferencia t¨¦cnica y de cualidades entre ambos.

Tras varios empates en la parte baja del marcador, Olaizola II tom¨® posiciones y fue marcando distancias que acabar¨ªan por hacerse insuperables para su oponente. Apenas un atisbo con el 18-8, donde Urrutikoetxea sum¨® cuatro tantos seguidos, fue la excepci¨®n en el camino hacia el tanto definitivo del delantero de Goizueta.

Sin sorpresas, Olaizola II confirm¨® que sigue estando a prueba con una resistencia t¨¦cnica y f¨ªsica de garant¨ªas, mientras Urrutikoetxea se consolida como un especialista en el mano a mano y da a Bizkaia el pelotari de futuro que necesitaba, sobre todo ahora que Berasaluze II, por cierto en la grada del front¨®n Bizkaia, sigue su recuperaci¨®n.