¡°Cuando lo denunci¨¦ me amenaz¨® con pagarla con mi hermana en otra c¨¢rcel¡±
Cuatro mujeres testifican contra un funcionario de prisiones por abusos en Soto del Real La defensa dice que est¨¢n buscando dinero
![El funcionario de prisiones acusado, Miguel ?ngel P. F.](https://imagenes.elpais.com/resizer/v2/O4P4TCTYPTMUAKZ67F4GXQP3HU.jpg?auth=252a38320083c4f20a392383c6a63f387d0b99798939f2719bf5d31b8d99e474&width=414)
Varias presas han relatado este lunes en un juicio oral que se celebra en la Audiencia Provincial de Madrid, c¨®mo un funcionario de la prisi¨®n de Soto las acosaba sexualmente y, en determinados momentos, las ¡°arrinconaba¡± para abusar de ellas bajo amenazas de perjudicar su situaci¨®n carcelaria o la de sus familiares internos. Sin embargo, el encausado, Miguel ?ngel P.F. ha negado los hechos y ha dejado entrever que las acusaciones son una venganza de las reas.
La Fiscal¨ªa de Madrid solicita 42 a?os de prisi¨®n para el hombre por agredir sexualmente a tres internas al menos durante los a?os 2007 y 2009. Se le acusa de varios delitos continuados de abuso de su funci¨®n y de cuatro delitos de agresi¨®n sexual.
La primera de las supuestas v¨ªctimas, Francedy, ha explicado al juez que, tras una insinuaci¨®n previa aludiendo al tama?o de sus pechos, el 14 de julio de 2009 entr¨® en el economato donde trabajaba, le arrincon¨® contra un frigor¨ªfico y empez¨® a tocarle los senos y otras partes de su cuerpo, entre ellas la vagina. Seg¨²n ha relatado, tras lograr soltarse, el acusado la persigui¨®, la cogi¨® por los pelos y la oblig¨® a hacerle una felaci¨®n. ¡°Me dijo que no se lo dijera a nadie porque si no a mi hermano preso le iba a poner en primer grado y no podr¨ªa tener permisos¡±, ha indicadoc¨® Francedy, que ha aclarado que no dio consentimiento de la supuesta agresi¨®n sexual.
La presa, ante la insistencia del funcionario, entr¨® en depresi¨®n y tuvo que ser medicada. Semanas despu¨¦s, Francedy decidi¨® contarlo a una trabajadora social y luego a la juez penitenciaria, adem¨¢s de interponer una denuncia. Ya en libertad, la mujer ha concluido que peor que sentirse ¡°ultrajada y vejada¡± fue la ¡°indefensi¨®n¡± que sinti¨®, ya que la c¨¢rcel ¡°estaba dividida entre los buenos, que eran los pulcros que no consent¨ªan estas situaciones y los malos, que apoyaban a este se?or¡±, ha dicho este lunes.
La segunda interna en declarar, tambi¨¦n en libertad ya, ha sido Diana, que ha relatado que vio a Miguel ?ngel P. en varias ocasiones con los pantalones bajados y dos veces masturb¨¢ndose delante de ellas. La presunta v¨ªctima ha contado que pidi¨® el cambio de destino para evitar su presencia y sus comentarios. En una ocasi¨®n, seg¨²n ha explicado, le tir¨® contra un armario y le exigi¨® que se arrodillara para hacerle una felaci¨®n. ¡°Me mandaba cartas intermodulares y una tarjeta el d¨ªa del cumplea?os. Tambi¨¦n me dejaba en la biblioteca paquetitos con lociones y chocolates, cosa que est¨¢ prohibida¡±, ha a?adido. ¡°Cuando decid¨ª denunciarle y lo supo amenaz¨® con putear a mi hermana, que estaba en la c¨¢rcel de Topas¡±, ha asegurado.
Otra interna, Miositi, ha contado que Miguel ?ngel P. le toc¨® los pechos y le pidi¨® que se pusiera de rodillas para hacerle una felaci¨®n. Ella le recrimin¨® su actitud y se march¨®. Por ¨²ltimo, la cuarta presa, Tina, ha expuesto un id¨¦ntico relato al anterior, tambi¨¦n en la cocina y cuando ambos se encontraban solos.
El acusado ha asegurado en repetidas ocasiones que ¡°nunca¡± abord¨® a las internas que la denunciaron, ni las acos¨® ni las toc¨® ni las solicit¨® o agredi¨® sexualmente. Incluso ha afirmado que a algunas de ellas ni las conoc¨ªa.
El abogado de la defensa, Julio Rodr¨ªguez, ha asegurado que las testigos caen en ¡°contradicciones¡± y que sus acusaciones son una venganza de las reas, que cumpl¨ªan prisi¨®n por tr¨¢fico de drogas, despu¨¦s de que su defendido descubriera que hab¨ªan introducido ordenadores y port¨¢tiles en la prisi¨®n, una trama ¡°en las que est¨¢ detr¨¢s una banda de narcotraficantes¡±. El letrado dice que las denunciantes buscan una compensaci¨®n econ¨®mica y que el caso es un ¡°aviso para que otros funcionarios no se metan en problemas y miren para otro lado¡±.
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