Nuevas tecnolog¨ªas para todas las edades
Los mayores de la Casa de la Misericordia visitan la feria de inform¨¢tica Euskal Encounter
El programa de "realidad aumentada", como lo llaman sus creadores del laboratorio de ideas Bilbao Makers, sube al espectador a una monta?a rusa que atraviesa un pueblo medieval con castillo. Al girar la cabeza, ?ngel exclama: "?Qu¨¦ profundo!". Sentado en el carruaje de la atracci¨®n virtual, uno ve lo que supuestamente tiene a los lados y por debajo: un pueblo, el mar, el patio del castillo. "Me recuerda al Monte Igueldo", el parque de atracciones de San Sebasti¨¢n. "Como ya hab¨ªa montado, no me ha dado mucha sensaci¨®n, pero parec¨ªa que te ibas a marear cuando iba subiendo", explica, a¨²n con la sonrisa en la cara.
Con algo de retraso por fallos de coordinaci¨®n, durante una hora los visitantes se han paseado entre los gamers (apasionados de los videojuegos) que se afanaban en sus pantallas y han recibido una charla explicativa, antes de ver demostraciones pr¨¢cticas de los avances electr¨®nicos expuestos en la feria.
Las nuevas tecnolog¨ªas siempre son parte del programa en cualquier evento de inform¨¢tica, donde el perfil del asistente medio es joven. Este a?o las estrellas son las impresoras 3D, expuestas por distintos colectivos en al menos dos puntos del recinto ferial, como les ha explicado a los visitantes I?aki L¨¢zaro, de la asociaci¨®n Internet Euskadi, una de las organizaciones colaboradoras. Estas m¨¢quinas?que est¨¢n gozando ahora de una explosi¨®n de popularidad?fabrican objetos mediante la superposici¨®n repetida de capas del material utilizado, normalmente pl¨¢stico. La novedad no es el invento en s¨ª, sino que este m¨¦todo de fabricaci¨®n industrial sea cada vez m¨¢s accesible al p¨²blico.?
"Me voy a fabricar un m¨®vil que funcione sin bater¨ªa", bromea Vicente
"Ma?ana me fabrico un tel¨¦fono m¨®vil que no funcione a pilas y que no est¨¦ abonado a ninguna compa?¨ªa", bromea Vicente Porto, de 72 a?os. A este fot¨®grafo la feria de inform¨¢tica, con sus miles de asistentes en filas conectados al ordenador, le recuerda a la vista desde arriba de los guerreros chinos de terracota,?hallados en la tumba del primer emperador?Qin Shihuang.?Vicente ahora?se dedica a "hacer sonre¨ªr" a sus compa?eros de residencia: organiza noches de cine y m¨²sica todas las semanas con los trabajadores y otros compa?eros. Utiliza Internet para mirar el correo electr¨®nico, como ?ngel, y para enviar v¨ªdeos a sus amigos: "He mandado ya 65 obras de teatro grabadas para la televisi¨®n, como el Lazarillo de Tormes y la Casa de Bernarda Alba", explica satisfecho.
En la Casa de la Misericordia habitan 220 residentes, aunque tienen m¨¢s plazas disponibles, y cuentan con 170 trabajadores. Es la residencia de este tipo m¨¢s antigua de Bilbao, explica Bel¨¦n Gonz¨¢lez, la psic¨®loga del centro que ha organizado la visita. Esta instituci¨®n sin ¨¢nimo de lucro acoge exclusivamente a ancianos desde los a?os ochenta y recibe apoyo del club privado Rotary en Bilbao.
Sor Gloria luce un pelo negro y rizado admirable a sus 76 a?os. Est¨¢ comi¨¦ndose unas palomitas que ofrecen en un puesto promocional a cambio de bajarse una aplicaci¨®n de m¨®vil.?Con una sonrisa dulce, antes de subirse al microb¨²s que la llevar¨¢ de vuelta a casa, dice que la feria le ha parecido "incre¨ªble".?
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