La mala experiencia del PSE con Bildu en Gipuzkoa ayuda al pacto con el PNV
Los nacionalistas siempre han recelado del apoyo socialista a Garitano
El PNV siempre ha recelado de la aproximaci¨®n del PSE-EE a Bildu en Gipuzkoa, sobre todo en el ¨²ltimo a?o, porque entiende que es un ensayo pol¨ªtico de largo alcance sobre el planteamiento atribuido a Jes¨²s Eguiguren de acercar posiciones de izquierda en tiempos de paz. Adem¨¢s, los socialistas han alimentado esta fundada intuici¨®n mediante sus acuerdos en materia de pol¨ªtica fiscal con la coalici¨®n abertzale y favoreciendo luego que el gobierno de Martin Garitano sacara adelante sus presupuestos de 2013.
Pero al igual que le ocurri¨® al PNV un a?o antes, cuando tambi¨¦n favoreci¨® la aprobaci¨®n entonces del primer presupuesto de Bildu, el PSE-EE se siente defraudado. La coalici¨®n soberanista no ha respondido a las expectativas de la apuesta econ¨®mica que se pretend¨ªa al apoyar las cuentas forales, seg¨²n repiten ahora los principales dirigentes del socialismo guipuzcoano. Adem¨¢s, para ensanchar este progresivo alejamiento entre ambas formaciones se ha cruzado la reapertura judicial del caso Errebal, donde Aralar siempre ha visto un posible delito de prevaricaci¨®n en materia urban¨ªstica colocando el dedo acusador sobre el entonces alcalde de Eibar, I?aki Arriola, el l¨ªder del PSE en Gipuzkoa.
Al admitir este desencanto por la mala experiencia con Bildu, el PSE-EE allana la vertiente pol¨ªtica de las negociaciones abiertas con el PNV en busca de un pacto institucional, ahora focalizado en la fiscalidad. Los nacionalistas se quedan sin un argumento recurrente cuando las conversaciones entre ambos partidos enfilan la recta m¨¢s pol¨ªtica, que se sustanciar¨¢ a primeros del pr¨®ximo mes de septiembre, L¨®gicamente, ante semejante escenario, la coalici¨®n abertzale dispone de un argumento interesado para alejarse de las desavenencias sobre el impulso econ¨®mico y reducir la raz¨®n de la ruptura con su socio presupuestario a las pretensiones socialistas de rango superior para confluir en un s¨®lido acuerdo ¡°de pa¨ªs¡± con el PNV.
Adem¨¢s, este alejamiento entre PSE-EE y Bildu en Gipuzkoa tranquiliza al n¨²cleo duro de la direcci¨®n socialista. La escenificaci¨®n del desacuerdo con los abertzales, evidenciada por Rodolfo Ares en la ponencia de Paz y Convivencia sobre una cuesti¨®n tan sensible como es el suelo ¨¦tico, tendr¨ªa una dif¨ªcil justificaci¨®n si en uno de los territorios se asiste a un acuerdo de semejante importancia como es el presupuestario. De paso, con el desenga?o del PSE en Gipuzkoa, el PNV logra indirectamente que se proyecte la incapacidad de Bildu para mantener acuerdos de gobierno y as¨ª se retrate su soledad pol¨ªtica.
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