Cuando 426 euros son una fortuna
Uno de cada tres parados de Catalu?a ha agotado el desempleo y todas las ayudas. La mitad de los que a¨²n cobran solo perciben el subsidio m¨ªnimo
Juan Carlos Serret es una de las personas que se han visto obligadas a hacer aut¨¦nticos equilibrios para sobrevivir con 426 euros mensuales. Trabajaba en una fundici¨®n de aluminio hasta que, con 47 a?os, le despidieron. Tres a?os y medio despu¨¦s, sigue en el paro. Agotada la prestaci¨®n por desempleo, cobra el subsidio con el que tienen que llegar a fin de mes ¨¦l y su pareja, que tambi¨¦n est¨¢ en el paro y no cobra ninguna ayuda. De los 426 euros, 360 ya se van en el alquiler del piso donde viven. Con el resto se supone que tienen que vivir dos adultos.
?l est¨¢ separado y, por orden judicial, deber¨ªa pagar una pensi¨®n compensatoria a su exmujer y una pensi¨®n alimenticia al hijo que tienen en com¨²n. Sigue intentando encontrar trabajo, pero su edad es un obst¨¢culo que parece insalvable. ¡°No encuentro trabajo. Solo quieren a gente joven o discapacitada¡±, explica, y admite que recurre a los amigos y a la familia para poder subsistir.
Llegar a fin de mes con menos de 500 euros parece, m¨¢s que un reto, casi un milagro. Es, sin embargo, la situaci¨®n en la que se encontraban el 48,8% de los parados registrados el pasado mes de mayo en las Oficinas del Servicio de Ocupaci¨®n (SOC) de la Generalitat que todav¨ªa cobraban algo por estar desempleados.
¡°No hay trabajo. Solo quieren a gente joven¡±, se lamenta un beneficiario
La persistencia en el tiempo y la dureza de la crisis econ¨®mica han agravado el paro de larga duraci¨®n, de manera que muchos agotan la prestaci¨®n por desempleo. Si se cumplen los requisitos ¡ªtener responsabilidades familiares, ser mayor de 55 a?os, no haber cotizado suficiente para tener una prestaci¨®n contributiva...¡ª, se puede cobrar un subsidio de 426 euros durante otros seis meses, prorrogables a dos periodos m¨¢s de la misma duraci¨®n.
Anna Mar¨ªa Mart¨ªn es psic¨®loga. Ten¨ªa 52 a?os cuando perdi¨® su empleo. Un conflicto entre la gerencia y el centro de menores de la fundaci¨®n donde ejerc¨ªa de trabajadora social se sald¨® con el despido de todo el equipo. Cuando se qued¨® en paro, intent¨® desarrollar un proyecto de prevenci¨®n para trabajar con las familias que est¨¢n en riesgo de exclusi¨®n social. ¡°No funcion¨® porque intent¨¦ que me lo subvencionaran. Intent¨¦ tambi¨¦n en el sector privado, pero no lo quisieron. Hay fundaciones que tienen el monopolio e intentan mantenerlo¡±, lamenta. Antes de quedarse sin trabajo, su hermana, viuda, le ofreci¨® que se mudara a vivir con ella. El no tener que pagar alquiler o hipoteca facilita que los 426 euros que cobra de subsidio cundan m¨¢s.
C¨¢ritas alerta de la ¡°feminizaci¨®n¡± y el ¡°rejuvenecimiento¡± de la pobreza
Aunque despu¨¦s del subsidio existen otras ayudas para determinados colectivos, en mayo se contabilizaron 235.007 parados que no recib¨ªan ninguna ayuda. Son el 36,6% de las 642.000 personas apuntadas en el SOC ese mes. La Encuesta de Poblaci¨®n Activa (EPA) ofrece una imagen a¨²n m¨¢s desoladora. De los 873.000 parados que registr¨® durante el segundo trimestre de 2013 un 64,4% no cobraba ninguna ayuda. Seg¨²n un informe del sindicato UGT de Catalu?a, desde mediados de 2008 hasta mediados de 2013, se ha triplicado el n¨²mero de personas en esta situaci¨®n.
A Francisca se le acab¨® el subsidio para mayores de 45 a?os (426 euros) en el mes de junio. Entre junio y noviembre de 2012 estuvo trabajando en sustituciones como limpiadora del Aeropuerto de El Prat, donde ya hab¨ªa trabajado temporalmente en a?os anteriores. El pasado mes de julio no recibi¨® ninguna ayuda y no espera que la situaci¨®n cambie en agosto. La Administraci¨®n le dijo que cumpl¨ªa los requisitos para cobrar la renta m¨ªnima de inserci¨®n (una ayuda de entre 400 y 500 euros), pero tendr¨¢ que esperar hasta septiembre. A sus 53 a?os vive sola y es su hijo de 23 a?os quien le ayuda enviando dinero desde Canad¨¢, adonde emigr¨® hace dos meses.
El 80% de los atendidos en 2006 eran inmigrantes; ahora, la mitad son espa?oles
Desde las entidades de acci¨®n social y las organizaciones caritativas advierten de los riesgos que conlleva este aumento de la pobreza. El director de C¨¢ritas, Jordi Rogl¨¤, explica que esta ha mudado el rostro de un tiempo a esta parte. Mientras que el 80% de las personas que atend¨ªan en 2006 eran inmigrantes, actualmente la mitad de quienes acuden a ellos son aut¨®ctonos. Rogl¨¤ destaca tambi¨¦n la ¡°feminizaci¨®n¡± y ¡°rejuvenecimiento¡± del proceso de conversi¨®n hacia la pobreza. La frase que m¨¢s ha o¨ªdo decir entre quienes viven en estas circunstancias es ¡°nunca hubiera pensado que esto tambi¨¦n me podr¨ªa pasar a m¨ª¡±.
La presidenta de las Entidades Catalanas de Acci¨®n Social (ECAS), Teresa Crespo, lamenta que muchas personas mayores, que viv¨ªan relativamente bien con su pensi¨®n, se han visto arrastradas a situaciones l¨ªmite al desmoronarse la econom¨ªa familiar de sus hijos y nietos y al verse obligados a ayudarles. Crespo advierte tambi¨¦n de que algunas entidades se est¨¢n viendo saturadas y no son capaces de atender todas las demandas que reciben.
Otro ejemplo es el de Mar¨ªa ?ngeles. Recibi¨® la incapacidad permanente absoluta a principios de 2011. Un c¨¢ncer de piel, la muerte de su hermano, los malos tratos psicol¨®gicos por parte de su ex pareja y el acoso laboral le llevaron a una depresi¨®n profunda. Cobr¨® la pensi¨®n m¨ªnima hasta que en febrero de este a?o le hicieron una revisi¨®n y le dijeron que pod¨ªa trabajar. A punto de cumplir 63 a?os, se ha visto empujada de nuevo a un mercado laboral sin oportunidades. Desde marzo cobra una ayuda de 426 euros que se le acaba a finales de agosto. Su hijo colabor¨® para acabar de amortizar la hipoteca de su casa y enviaba dinero desde Inglaterra, donde lleva un a?o viviendo. Ahora se ha quedado en el paro ¨¦l tambi¨¦n y ella tiene que vivir con 126 euros despu¨¦s de pagar los gastos fijos de la casa.
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