La crisis tambi¨¦n azota a los solidarios
La plantilla del Comit¨¦ de Apoyo al Refugiado lleva un mes sin cobrar. Sus dirigentes dicen que la falta de recursos afecta a la calidad del servicio
Son tiempos dif¨ªciles para la solidaridad. La falta de recursos adem¨¢s de cebarse con miles de trabajadores que se han visto expulsados del mercado laboral, est¨¢ azotando tambi¨¦n a las asociaciones sin ¨¢nimo de lucro que apoyan a los extranjeros. La falta de ayudas p¨²blicas que complementen su voluntarismo y militancia est¨¢ elevando peligrosamente su nivel de endeudamiento hasta acercarse a la quiebra. Es la ¨²nica manera que han encontrado, hasta ahora, de mantener el nivel de servicios a sus miles de clientes, la mayor¨ªa refugiados y casi todos con problemas m¨¢s serios. CEAR Euskadi, y el resto de la organizaci¨®n nacional, vive momentos m¨¢s que delicados en este contexto.
Aunque la de Euskadi es la sede ¡°m¨¢s estable¡± asegura su presidente, el abogado Javier Calparsoro, los recortes han provocado que ninguno de los 32 miembros de la plantilla hayan cobrado un solo euro, despu¨¦s de las dificultades de la entidad para abonar la extra de verano. La organizaci¨®n central actualmente tiene una deuda que asciende hasta los 700.000 euros, aunque en los tres ¨²ltimos meses la situaci¨®n ha mejorado de forma m¨¢s que notable al reducirse a la mitad desde un total de 1,5 millones. Una situaci¨®n que ha limitado su capacidad de acci¨®n.
Nuestro trabajo no est¨¢ siendo lo m¨¢s brillante que quisi¨¦ramos¡±
En los ¨²ltimos dos a?os, la cifra de las personas que han recibido la asistencia de la organizaci¨®n ha descendido m¨¢s de un 20% hasta situarse en poco m¨¢s de 3.500 y cada vez con mayores dificultades. ¡°Nuestro trabajo no est¨¢ siendo lo m¨¢s brillante que quisi¨¦ramos¡±, reconoce Galparsoro. ¡°Y tenemos mucho trabajo porque tenemos que seguir atendiendo a la gente que nos necesita¡±. Hasta hace poco se hablaba, incluso, de que CEAR no llegar¨ªa al mes de septiembre por el agujero que le deben las instituciones p¨²blicas de todo el pa¨ªs, entre las que, al menos el Gobierno vasco no est¨¢. Seg¨²n se?ala Galparsoro, en ese hipot¨¦tico escenario de desaparici¨®n de la organizaci¨®n en el resto de Espa?a, en Euskadi ¡°podr¨ªamos sobrevivir, aunque no sin graves problemas¡±.
Aunque en Euskadi habr¨ªa que hacer ajustes de seguir en esta situaci¨®n, no tiene los graves problemas de Extremadura, que ha desaparecido.¡°En Euskadi estamos pr¨¢cticamente todos aunque hemos hecho algunos ajustes porque no todo el mundo est¨¢ en la plantilla dependiendo exclusivamente de CEAR Euskadi¡±, precisa. Estrella Gal¨¢n, secretaria general de la organizaci¨®n en Toda Espa?a, explica que desde 2009 a 2012 el presupuesto de la entidad ha descendido de los 16 millones hasta los poco m¨¢s de 7 que manejan en la actualidad. Unas reducciones que les ha metido en un nuevo ERE, el tercero que sufren desde que arranc¨® la crisis.
Los perjudicados de toda esta situaci¨®n son los refugiados"
¡°Los perjudicados de toda esta situaci¨®n son, evidentemente, los refugiados¡±, dice Galparsoro. Es una ayuda minoritaria pero necesaria para un colectivo que presenta cada vez menos solicitudes de asilo en Euskadi. Seg¨²n los ¨²ltimos datos disponibles, en el a?o 2012 se presentaron en Euskadi 61 solicitudes de ese tipo, 60 de ellas en Bizkaia y una el ?lava, el 45% menos que hace un a?o. ¡°Son m¨ªnimos hist¨®ricos¡± dice Galparsoro tras rechazar de plano la coyuntura econ¨®mica como argumento para justificar la situaci¨®n. ¡°Los refugiados nos dicen que no sabemos lo que es una crisis, que nos estamos relamiendo las heridas por no llegar a fin de mes o por no ir de vacaciones. Nos dicen que no sabemos lo que es vivir 30 a?os en guerra, y es cierto¡±, sentencia. CEAR est¨¢ explorando todo tipo de posibilidades para recaudar fondos que impidan tener que adoptar medidas m¨¢s graves.
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