La memoria de las bicis varadas

Si un paseante va por Madrid y ve una bici blanca encadenada a una valla o a un ¨¢rbol y junto a ella un peque?o cartel, quiz¨¢ no repare en ella. O no le d¨¦ mayor importancia. Pensar¨¢ que su due?o es un celoso de la propiedad que ha tomado todas las precauciones posibles para que no se la roben. La realidad es bien distinta. La capital se est¨¢ sumando en los ¨²ltimos a?os a un movimiento activo en otras grandes ciudades del mundo que trata de denunciar con estas bicicletas fantasma las muertes de ciclistas en las que se han visto involucrados veh¨ªculos de motor. Hasta el momento, son al menos tres las m¨¢quinas varadas en Madrid por este motivo.

La idea de las llamadas en ingl¨¦s ghost riders o ghost bikes tiene su aparente origen en San Louis (Missouri, Estados Unidos) en octubre de 2003. Se le atribuye a Patrick Van Der Tuin, quien coloc¨® la primera bicicleta pintada de blanco en el bulevar Holly Hills tras asistir como testigo al atropello mortal de un deportista que circulaba por un carril-bici. A partir de ah¨ª, la idea fue extendi¨¦ndose hasta colocar en la ciudad m¨¢s de 15 bicis fantasma. De Missouri se expandi¨® a otros estados y a otros pa¨ªses.

La primera vez que se coloc¨® una de estas m¨¢quinas blancas en Madrid fue a ra¨ªz de un atropello ocurrido el 19 de marzo de 2010 en el que muri¨® un ciclista de 17 a?os. El accidente se produjo en la confluencia de la avenida de Andaluc¨ªa con la calle de Alcocer, en el distrito de Usera a las 21.30. El conductor de un turismo arroll¨® a dos ciclistas. La peor parte del golpe se la llev¨® Mat¨ªas, un joven de 17 a?os que sufri¨® graves contusiones en todo el cuerpo y entr¨® en parada cardiorrespiratoria.

Los otros dos casos son mucho m¨¢s recientes. M¨¢s concretamente, de este a?o. En pleno debate sobre si los ciclistas tendr¨ªan que llevar casco en v¨ªas urbanas ¡ªuna medida que defiende la Direcci¨®n General de Tr¨¢fico (DGT)¡ª, un hombre de origen italiano, Mario P., de 54 a?os, mor¨ªa atropellado el pasado 27 de mayo por un coche patrulla de la Polic¨ªa Nacional que se dirig¨ªa a la comisar¨ªa de Arganzuela. El accidente se produjo a las 22.30 cuando el turismo sali¨® del t¨²nel de la Puerta de Toledo. De acuerdo con las investigaciones posteriores, el ciclista, que no llevaba ni chaleco reflectante ni casco ni luz en la bici, result¨® arrollado por cruzar la v¨ªa por un lugar inadecuado. Pese a los intentos del SAMUR por reanimarle, perdi¨® la vida.

El viandante que pase ahora por este punto se encontrar¨¢ con esa bici blanca, atada con una cadena a la valla de la ronda de Toledo, frente al lugar del accidente. Es la se?al evidente de que un ciclista perdi¨® la vida all¨ª.

El ¨²ltimo caso resulta, si cabe, mucho m¨¢s dram¨¢tico. Un vecino del barrio del Pilar que se dirig¨ªa a trabajar a Cuatro Caminos, ?scar Fern¨¢ndez P¨¦rez, de 37 a?os, fue atropellado el pasado 7 de agosto en el camino del Chorillo, muy cerca de Sinesio Delgado. El conductor de un Ford Focus blanco que ten¨ªa el carn¨¦ retirado hasta febrero de 2017, Mauricio Eduardo Apolo Granda, de 26 a?os, le arroll¨®, supuestamente, y le dej¨® tirado malherido junto al bordillo. La bicicleta termin¨® destrozada a unos 15 metros. En la calzada no hab¨ªa se?ales de frenada y s¨ª de que el veh¨ªculo hab¨ªa arrastrado varios metros al deportista y a la bici.

Un motorista fue el que hall¨® tirado a ?scar Fern¨¢ndez y el que avis¨® a los servicios de emergencia. De poco sirvi¨®. El ciclista ya llevaba un tiempo fallecido. La Polic¨ªa Municipal detuvo el mismo d¨ªa del accidente al presunto autor del atropello, que se neg¨® a declarar. Paradojas de la vida, el arrestado qued¨® en libertad tras pasar a disposici¨®n judicial. La magistrada Mar¨ªa Almudena ?lvarez Tejero estaba de guardia en el Juzgado de Instrucci¨®n n¨²mero 6 sustituyendo a un compa?ero de vacaciones. Pese a que la Polic¨ªa Municipal apreci¨® un delito contra la seguridad vial y otro de homicidio imprudente, la juez lo redujo solo a este ¨²ltimo. El imputado tiene que comparecer todos los lunes en el juzgado. Tambi¨¦n se le retir¨® el pasaporte para que no pudiera salir del pa¨ªs.

En el lugar donde se produjo el accidente, encadenada a una farola, yace ahora una bicicleta blanca y algunas velas rojas que recuerdan a Fern¨¢ndez. Este hab¨ªa hecho de las dos ruedas su ¨²nico medio de transporte, seg¨²n asegur¨® su hermano Jos¨¦ Javier. Aquella ma?ana se dirig¨ªa al bar donde trabajaba. Nunca lleg¨®.

Una concentraci¨®n de ciclistas a cuyo frente estaba el colectivo Bicicr¨ªtica le rindi¨® un homenaje el pasado martes 20 de agosto. Hicieron un recorrido que fue desde la plaza de Cibeles (su punto habitual de reuni¨®n) hasta los arcos de la avenida de la Ilustraci¨®n, donde hicieron un sentido homenaje a ?scar Fern¨¢ndez. Eso s¨ª, antes protagonizaron una protesta frente a la vivienda del supuesto homicida y se detuvieron en el lugar del accidente mortal.