El Ayuntamiento tapia la antigua sede de Telef¨®nica en la avenida de Roma

El Ayuntamiento de Barcelona ha decidido actuar de oficio en el caso de la antigua sede de Telef¨®nica, en la avenida de Roma. Entre el viernes y el fin de semana, se sellaron las entradas de la avenida de Roma, Viladomat, Mallorca y Calabria. El edificio, de m¨¢s de 38.000 metros cuadrados, se ha convertido en una mina de cobre abandonada, que ha sido saqueada de forma masiva este verano. Desde junio, los Mossos d'Esquadra han detenido a m¨¢s de 80 personas por los robos.?

Ante el deterioro del edificio y las constantes sustracciones, el Consistorio ha decidido actuar, sin esperar a que el administrador concursal -al que ha tramitado una orden de conservaci¨®n y seguridad del inmueble- interviniese. La empresa que compr¨® la antigua sede en 2007 por 220 millones, el grupo de capital riesgo Carlyle Real, quebr¨®. Desde mayo, el bufete de abogados Jausas son los administradores concursales.

El Ayuntamiento cobrar¨¢ el coste del tapiado de las entradas por donde se colaban los ladrones de cobre. Asimismo, ha pedido a Jausas que ponga seguridad 24 horas al edificio. Durante el verano, el inmueble ha sido pasto de los robos, sin ning¨²n tipo de seguridad y sin que nadie denunciase como perjudicado.

Ante las quejas de los vecinos y las constantes intervenciones de los Mossos d'Esquadra, el administrador concursal se comprometi¨® a buscar una soluci¨®n y poner seguridad al menos durante una parte del d¨ªa. La opci¨®n, seg¨²n cont¨® el abogado Agust¨ªn Bou a EL PA?S, del bufete Jausas, era valerse de una empresa, que explotase el cobre del edificio y que, con parte de los beneficios, se sufragase la vigilancia del inmueble.

Tras la quiebra, Carlyle no dej¨® ni un euro en la caja, seg¨²n explic¨® Bou, que lament¨® que ni siquiera dispusieran "seguridad por seis meses" en el inmueble. La deuda de la compa?¨ªa con los bancos es de 180 millones, lo que complica la salida a subasta del edificio. El proceso est¨¢ judicializado, y Jausas ya ha expresado su intenci¨®n de que el inmueble salga a subasta por 60 millones, pero los bancos son reticentes y prefieren esperar m¨¢s, seg¨²n cont¨® Bou.

El inmueble de Telef¨®nica se vendi¨® en la ¨¦poca del boom inmobiliario. La intenci¨®n de Carlyle era hace un edificio de lujo, con 350 pisos, locales comerciales, y un aparcamiento subterr¨¢neo. En lugar de eso, el mastod¨®ntico inmueble es un c¨²mulo de cables pelados y cristales rotos, un peligro para las decenas de personas que se adentran en ¨¦l como si fuese una mina a la caza del cobre.