Una mujer ilustrada y cosmopolita
Rosario Porto estudi¨® en Universidades europeas y se codeaba con la ¨¦lite pol¨ªtica de Santiago
¡°Si las sospechas sobre Charo se confirman, yo ya no creo en el g¨¦nero humano¡±. Una amiga ¨ªntima de la abogada Rosario Porto (Charo para los muchos que en su ciudad la trataban) y del periodista Alfonso Basterra resum¨ªa as¨ª el d¨ªa de su detenci¨®n, con esa mezcla de incredulidad y rabia que sacudi¨® a los vecinos de Santiago, una capital auton¨®mica de apenas 95.000 habitantes con una pl¨¢cida existencia acunada por la Administraci¨®n y la Universidad.
Era habitual ver a Rosario y Alfonso paseando con su hija Asunta por el Ensanche compostelano, la parte m¨¢s moderna del centro de Santiago que se extiende m¨¢s all¨¢ de los confines del casco viejo que rodea la catedral. Ella, hija ¨²nica de un reconocido letrado que ejerci¨® durante d¨¦cadas como c¨®nsul honor¨ªfico de Francia y de una catedr¨¢tica de Historia del Arte especializada en el barroco, naci¨® el 11 de julio de 1969 en un hogar culto, bien posicionado econ¨®micamente, con una tradici¨®n familiar republicana e intensas relaciones sociales.
Estudi¨® desde ni?a en dos centros prestigiosos de la capital gallega ¡ªel colegio p¨²blico P¨ªo XII y el instituto Rosal¨ªa de Castro¡ª, los mismos en los que ella y su marido matricularon a Asunta. Pero complet¨® sus estudios en el extranjero y cuando enfil¨® la adolescencia empez¨® a pasar los veranos en Reino Unido y Francia para perfeccionar idiomas. El COU lo curs¨® en el Yago School of Oxford y, aunque la carrera de Derecho la hizo en Santiago, en su curr¨ªculum constan estancias en la Universidades de Par¨ªs III y Le Mans y en la London High School of Law.
Tras su periplo cosmopolita, Porto regres¨® a Santiago en 1996 y se puso a ejercer la abogac¨ªa en el despacho que su padre, Francisco Porto Mella, ten¨ªa en la calle de Montero R¨ªos, en el Ensanche, ese c¨¦ntrico conglomerado de apenas una docena de calles en el que ha transcurrido la vida de la familia hasta el pasado fin de semana, cuando una pareja de j¨®venes que iban de fiesta encontraron el cuerpo sin vida de la peque?a Asunta. Al mismo tiempo que ella empezaba a ejercer de letrada, el periodista Alfonso Basterra, nacido en Bilbao en 1965, ya se hab¨ªa instalado en Santiago.
Rosario hered¨® de su progenitor la profesi¨®n y tambi¨¦n el cargo de c¨®nsul de Francia en Santiago, que le fue transmitido en 1997 y que dej¨® en 2006. Fueron estos a?os en los que la hija de Francisco Porto y de la catedr¨¢tica Socorro Ortega ¡ªmiembro esta ¨²ltima de la Real Academia Gallega de Bellas Artes¡ª comenz¨® a convertirse en una habitual de la vida social y cultural de la ciudad.
Tras diez a?os de c¨®nsul, Francia la condecor¨® en 2007 con la prestigiosa medalla de la Orden Nacional del M¨¦rito, solo unos meses despu¨¦s de que decidiese dejar el puesto diplom¨¢tico por ¡°razones personales¡±. Al acto celebrado con numerosos invitados en un hotel del campus universitario de Santiago, acudi¨® el entonces alcalde de la capital, Xos¨¦ S¨¢nchez Bugallo, y el c¨®nsul general de Francia, Thierry Frayss¨¦, que viaj¨® expresamente desde Bilbao. Pero su vida social continu¨® como directiva del Ateneo compostelano, donde no era raro que actuase de presentadora de conferenciantes.
Desde que Rosario adopt¨® a Asunta en China, todos la ve¨ªan como una madraza. ¡°Para m¨ª que ten¨ªa incluso una especie de ansiedad maternal¡±, dice un amigo. ¡°Cada vez que la encontraba, no me hablaba m¨¢s que de la ni?a¡±. Seg¨²n se han ido conociendo los hechos ¡ªmezclados con rumores de todo tipo¡ª la incredulidad se rompi¨®. Y los vecinos pasaron a gritarle ¡°asesina¡±.
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