Los trabajadores de limpieza llevan el conflicto a las calles de la capital

Comienza hoy la huelga indefinida de los trabajadores de la limpieza viaria y de la jardiner¨ªa de Madrid. Por ahora, las posiciones entre empresas y sindicatos son irreconciliables. El Ayuntamiento, de momento, se mantiene al margen porque considera que los problemas en los servicios de la limpieza son solo un enfrentamiento entre trabajadores y patronal por la negociaci¨®n de los convenios colectivos. El Consistorio mantiene privatizado el servicio y, por lo tanto, no se trata de trabajadores municipales.

Los empleados, que ayer llevaron las hogueras y los petardos a las calles en una manifestaci¨®n de miles de personas, protestan porque los expedientes de regulaci¨®n de empleo anunciados por las empresas que tienen los contratos de limpieza dejan en la calle a 1.144 empleados de los 6.000 que prestan ese servicio en la capital. A principios de agosto, las concesionarias ya despidieron a 350 personas.

El presupuesto en esos servicios ya se hab¨ªa ido reduciendo en los ¨²ltimos a?os: un 18% menos el de limpieza viaria entre 2011 y 2013; un 19% menos el de parques y jardines en los mismos a?os. El nuevo contrato divid¨ªa Madrid en seis zonas y, con ¨¦l, el Ayuntamiento pretend¨ªa rebajar a¨²n m¨¢s los costes. Ped¨ªa una rebaja de un 10% a las empresas sobre el presupuesto inicial de 2.316 millones. Las concesionarias que m¨¢s bajo ofertasen el servicio se llevar¨ªan los contratos. Salieron ganadoras Cespa (de Ferrovial), Valoriza (del grupo Sacyr), OHL y FCC-Alfonso Ben¨ªtez. Entre todas ofrec¨ªan hacer el servicio por 1.943 millones, una rebaja total del 16%. Ese recorte de 373 millones es el que ha creado finalmente el conflicto. Las empresas alegan que no pueden llevar a cabo el servicio sin reducir salarios y trabajadores. Y el Ayuntamiento no establece en sus pliegos ninguna exigencia para que se mantuviera el empleo.

Las cosas hoy por hoy, mientras contin¨²a la negociaci¨®n, est¨¢n como siguen: las empresas pretenden despedir a 1.144 trabajadores y aplicar rebajas salariales de hasta el 43%. En las ¨²ltimas horas, fuentes sindicales hablaban de que las concesionarias hab¨ªan ofrecido 900 despidos siempre que el resto de la plantilla se bajara un 12% m¨¢s el sueldo.

El perfil del trabajador del sector es el de un empleado de entre 35 y 55 a?os de media, casado, con hijos, hipoteca y estudios primarios. Lleva trabajando entre 12 y 15 a?os en el sector y cobra entre 1.000 y 1.300 euros de media.

La alcaldesa de Madrid, Ana Botella, confi¨® ayer en que los paros no afecten a los ciudadanos y record¨® que los servicios est¨¢n externalizados y que corresponde a empresas y sindicatos alcanzar un acuerdo. Esa premisa es la que ha repetido el Ayuntamiento desde que empez¨® a vislumbrarse el conflicto. Seg¨²n el Consistorio, su ¨²nica labor es fiscalizar a las empresas y ver si cumplen con los niveles de calidad exigidos en los pliegos. No hacerlo puede conllevar sanciones: el Ayuntamiento puede detraer hasta el 6% del contrato si no cumplen.

Los sindicatos vinculan los despidos con los recortes municipales

Sin embargo, en un contrato piloto entre agosto de 2012 y agosto de 2013 que probaba el que ahora est¨¢ vigente, el Ayuntamiento solo penaliz¨® con 223.000 euros (un 0,6% del contrato), por 25 incidencias, en su mayor¨ªa, suciedad de las aceras. Los sindicatos se han quejado de ese tipo de fiscalizaci¨®n que recae en solo 300 inspectores, uno cada 11.000 habitantes o 20.000 metros cuadrados.

¡°Hacen falta muchas huelgas para oponerse a las pol¨ªticas del Partido Popular, que son las que est¨¢n generando esta situaci¨®n¡±, se?al¨® ayer Raquel L¨®pez, concejal de Izquierda Unida en el Ayuntamiento. ¡°Que no quede en que esto es un asunto solo de la patronal. Apoyamos los servicios p¨²blicos. Estamos hablando de m¨¢s de 1.000 trabajadores con nombres, apellidos y familias¡±. Tambi¨¦n el socialista Jaime Lissavetzky arremeti¨® ayer contra el hecho de que la alcaldesa no asumiera ninguna responsabilidad. ¡°Botella es el origen y la causa del malestar de los trabajadores. No puede cerrar los ojos ante un problema que ha causado ella¡±, asegur¨® ayer.

Comienza as¨ª un conflicto a tres bandas que a tenor de la tensi¨®n acumulada en estos meses puede ser largo. Los sindicatos tratar¨¢n de que no haya ning¨²n despido, las empresas intentar¨¢n tensionar la cuerda para que el negocio siga siendo rentable. El Consistorio, por ahora, intenta mostrar que solo hay dos partes. Pero en anteriores ocasiones ha declarado que sin 1.000 trabajadores no se puede dar el mismo servicio. El estado de las calles en los pr¨®ximos d¨ªas permitir¨¢ ver el alcance del conflicto.