¡°De aqu¨ª no sale hoy nadie¡±

El hombre lo explica apoyado en la verja del cant¨®n de la calle Mar¨ªa Odiaga, en Carabanchel. "De los cantones no hoy no sale nadie, ni los m¨ªnimos ni nadie, todo el mundo est¨¢ por defender su empleo". Los cantones son los almacenes de los que cada d¨ªa salen los barrenderos y personal del servicio municipal de limpieza viaria y jardines, que est¨¢ en huelga desde el martes contra 1.134 despidos de una plantilla de 6.000 operarios. Los carritos de barrendero est¨¢n apilados al otro lado de la verja. La calle est¨¢ llena de restos de basura, bolsas, pieles de fruta podrida, cascotes de botellas. Algunos tramos apestan.

A unos metros, en el cant¨®n de la calle de Cedro, el suelo est¨¢ lleno de piezas de tela de la f¨¢brica de textiles de enfrente. Tampoco hay movimiento y una veintena de piquetes aguarda en la puerta frente a un furg¨®n policial. Pasadas las 10 de la ma?ana, se consumen los restos de varios contenedores que han ardido apenas unos minutos antes. Uno de los piquetes congregados explica que los trabajadores que salen van sin escoba y sin carrito. "Cogen los restos con las mano", a?ade. Seg¨²n ¨¦l, porque las empresas les piden que cubran as¨ª los m¨ªnimos (son del 40% en limpieza y el 25% en jardines). Seg¨²n otros, porque los piquetes les rompen el material conforme enfilan la puerta.

Los cantones de Carabanchel est¨¢n en el pol¨ªgono del Aguacate, con las calles llenas de papel triturado por los suelos y de restos de tela. En el camino a otra de las sedes, en la calle de Urgel, arde y gotea un nuevo contenedor lleno de retales de tela. Un trabajador les avisa desde dentro, seg¨²n un piquete. Va a salir un cami¨®n. Ante la puerta, otros dos queman un contenedor con ruedas dentro que arde en apenas 15 minutos, dejando una columna de humo negro y un olor insoportable. El cami¨®n no sale. Los bomberos llegan cuando apenas quedan llamas. Un coche de polic¨ªa se presenta poco despu¨¦s. Al otro lado de la verja, nueve trabajadores uniformados miran a los piquetes de fuera. "Son servicios m¨ªnimos, tampoco salen", explica uno de los congregados. Otro comenta: "Tendr¨ªamos que hacer como los de Vallecas, que se han negado a salir porque las empresas no les han dado el uniforme de invierno".

Un portavoz de las empresas (OHL, FCC y Sacyr-Valoriza ) asegura a las 13.30 que los servicios m¨ªnimos se han cumplido en el segundo d¨ªa de huelga del sector. Despu¨¦s ha matizado que los trabajadores con m¨ªnimos se han presentado en sus puestos pero "no todos han podido cumplir con su labor". No da datos de seguimiento. Los sindicatos cifran el seguimiento de la segunda jornada en casi el 100%, seg¨²n CC. OO. Las centrales se han reunido a las 10.00 con las empresas en la Inspecci¨®n de Trabajo para revisar los t¨¦rminos del expediente de regulaci¨®n de empleo (ERE). La ¨²ltima propuesta de las contratas es reducir de 1.134 a 998 los despidos, pero buscando "f¨®rmulas alternativas" para reducir costes que los sindicatos entienden como bajadas de sueldo.

La alcaldesa, Ana Botella, ha acusado este mi¨¦rcoles a los sindicatos de quemar contenedores y coches y de ensuciar la ciudad en actos vand¨¢licos. Botella ha dicho que la huelga "es consecuencia de la negociaci¨®n del convenio colectivo y no de la adjudicaci¨®n de los contratos de limpieza". Ni la oposici¨®n, que pide al Ayuntamiento que intervenga en la soluci¨®n del conflicto, ni los sindicatos est¨¢n de acuerdo con esa afirmaci¨®n.

El nuevo contrato de limpieza viaria, adjudicado en agosto, elimina la cl¨¢usula que mantiene un m¨ªnimo de personal y lo cambia por "un criterio de exigencia". Los sindicatos acusan al Ayuntamiento de haber abierto as¨ª la veda para que se produjeran los despidos. Adem¨¢s de los 1.134 que hay encima de la mesa, otros 350 trabajadores no fueron subrogados en agosto. El presupuesto municipal de limpieza y jardines se ha reducido casi un 20% desde 2011. El Ayuntamiento quer¨ªa rebajar un 10% m¨¢s la cifra inicial de 2.316 millones para la contrataci¨®n. Su principal criterio de adjudicaci¨®n ¨Ccon 80 de los 100 puntos posibles- fue el "porcentaje a la baja sobre el presupuesto de licitaci¨®n". Las concesionarias asumieron finalmente el servicio por 1.943 millones, 373 menos. "Las cuentas no cuadran, somos barrenderos pero no gilipollas", dec¨ªa este mi¨¦rcoles por la ma?ana uno de los piquetes en Carabanchel.