La Generalitat admite ¡°d¨¦ficits¡± de integraci¨®n con los inmigrantes

Durante la ¨²ltima d¨¦cada, Catalu?a ha vivido un proceso de cambio demogr¨¢fico marcado por el aumento de la poblaci¨®n extranjera. Si a principios de siglo viv¨ªan poco m¨¢s de 160.000 inmigrantes (un 2,9% de la poblaci¨®n) el pasado a?o hab¨ªa m¨¢s de 1,1 millones (un 15,6%). Un cambio que "de manera inevitable, comporta un impacto notable sobre nuestra sociedad", apunta el primer Informe sobre la integraci¨® de les persones immigrades a Catalunya, realizado por el Departamento de Bienestar Social y Familia. El estudio revela tambi¨¦n que la crisis se ha cebado con la poblaci¨®n extranjera, acrecent¨¢ndose las desigualdades entre este colectivo y los aut¨®ctonos. Como admite el texto, "Catalu?a acoge las personas inmigradas, pero muestra d¨¦ficits de integraci¨®n", entendida como un proceso de "aceptaci¨®n mutua entre los aut¨®ctonos y los extranjeros, que culmina cuando un inmigrante se siente parte de la sociedad de acogida y disfruta de las mismas oportunidades".

El informe, en el que ha colaborado la Obra Social "La Caixa", constata que este proceso de integraci¨®n dista mucho de ser una realidad, y apunta que la crisis econ¨®mica ha disparado las desigualdades entre aut¨®ctonos y inmigrantes. Si en 2004 la diferencia entre las retribuciones anuales de los hombres de ambos colectivos era de poco m¨¢s de 5.000 euros en favor de los aut¨®ctonos, en 2010 esta disparidad rozaba los 10.000 euros. Adem¨¢s, recuerda el estudio, el desempleo tambi¨¦n ha afectado mucho m¨¢s a los inmigrantes, ya que mientras que un 15,8 % de la poblaci¨®n aut¨®ctona est¨¢ en paro, el 34,3 % de los extranjeros no tiene trabajo. "La crisis tiene un impacto negativo sobre la capacidad de integraci¨®n de la sociedad catalana, ya que la falta de oportunidades laborales obstaculiza las posibilidades de incorporarse a la comunidad de referencia", revela el informe.

La consejera de Bienestar Social, Neus Munt¨¦, ha asegurado que el fen¨®meno migratorio que ha vivido Catalu?a en la ¨²ltima d¨¦cada "no tiene precedentes" y ha admitido que uno de los retos de la sociedad es pasar de la fase de acogida a una de "plena incorporaci¨®n".? Solo uno de cada tres extranjeros asegura hablar catal¨¢n en el trabajo, mientras que el 77% de los aut¨®ctonos dice usar el idioma. "Catalu?a no es una naci¨®n? ¨¦tnica, sino una naci¨®n de lengua, cultura y convivencia, donde el catal¨¢n juega un papel determinante como motor de integraci¨®n", ha subrayado la consejera.

En este sentido, el informe pide que el problema de la integraci¨®n no se centre exclusivamente en cuestiones "administrativas y laborales" y que se ampl¨ªe la visi¨®n a aspectos "culturales, educativos, pol¨ªticos, etc".