La ciudad que cuece la basura
Rivas Vaciamadrid trata de exportar una tecnolog¨ªa que reduce en un 70% los residuos Los ecologistas, contrarios a esta t¨¦cnica de eliminaci¨®n
Deber¨ªa oler a podrido, pero lo que llega es un cierto tufillo a cocido. No cocina la abuela ni hay zanahoria, tocino o garbanzos. Bueno, en realidad, s¨ª. Pero tambi¨¦n hay latas, botellas de pl¨¢stico, hojas, c¨¢scara de fruta... Es decir: basura. Toneladas de residuos que una decena de camiones recoge en el municipio de Rivas Vaciamadrid y lleva hasta la planta piloto donde se est¨¢ probando una tecnolog¨ªa que aspira a acabar con el problema de los vertederos, colmados y contaminantes: hervir los residuos, higienizarlos y aprovechar casi el 100% para la obtenci¨®n de energ¨ªa. O, al menos, as¨ª lo aseguran sus valedores. Lo llaman Vertedero 0 y ha captado el inter¨¦s de pa¨ªses como China, Brasil o Chile; pero tambi¨¦n el rechazo de los ecologistas, que advierten de que la planta vulnera las directivas europeas sobre gesti¨®n de residuos.
D¨®nde meter la basura que genera la sociedad es uno de los problemas que trae de cabeza a Ayuntamientos y Gobiernos. A los vertederos les cuesta cada vez m¨¢s alargar unos a?os de su vida ¨²til y la incineraci¨®n se convierte en una soluci¨®n desastrosa para el medioambiente, que espanta a los ecologistas por las emisiones a la atm¨®sfera.
El proyecto naci¨® en 2010, cuando RivaMadrid, la empresa que se dedica a la recogida de residuos s¨®lidos urbanos (RSU) en el municipio, firm¨® con la empresa aragonesa Ecohisp¨¢nica un acuerdo para el desarrollo de esta tecnolog¨ªa, que cuenta con una planta piloto en el municipio desde hace un a?o. ¡°No s¨¦ si es porque es m¨ªo, pero creo que este es el mejor negocio del siglo XXI. Poder decir que los vertederos pueden desaparecer es muy importante. Con la basura, o hacemos algo o se nos come¡±, suelta Jes¨²s Marco Sol¨®rzano, consejero delegado de Ecohisp¨¢nica.
El Ayuntamiento negocia el modelo de tratamiento con S?o Paulo y Chile
Primero, un batall¨®n de 12 camiones rastrea el municipio cargando los contenedores que se cruzan por el camino. A la planta solo llega la bolsa de restos, que se descargan en un foso para ser triturados mientras un sistema inform¨¢tico registra los datos. Un gancho gigante se encarga de mover toda la masa. El olor en este punto del proceso es insoportable.
Una vez triturados, los residuos pasan a la cinta transportadora que los conduce hasta el waste cleaner, ¡°el coraz¨®n de la planta¡±. Es una especie de gran cisterna plateada que act¨²a como una olla, con vapor a altas temperaturas y cambios de presi¨®n que tras un proceso de una media hora esteriliza los residuos y reduce su volumen en un 70%. ¡°Solo con esto ya estar¨ªamos alargando la vida de los vertederos¡±, apunta Sol¨®rzano. El vapor de agua es generado por una caldera, aunque Ecohisp¨¢nica asegura que con la tecnolog¨ªa adecuada podr¨ªan llegar a ser autosuficiente energ¨¦ticamente aprovechando los residuos. A partir de ah¨ª, el olor pasa de la putrefacci¨®n a un cierto recuerdo a cocido de la abuela, aunque menos apetitoso. Los residuos se pueden tocar, no hace falta mascarilla ni ning¨²n tipo de precauci¨®n en la manipulaci¨®n. Justo despu¨¦s de pasar por el waste cleaner, se a¨ªsla la materia org¨¢nica, que es la m¨¢s contaminante por sus emisiones de metano.
Los lixiviados (l¨ªquidos que dejan los residuos y cuyo tratamiento es caro) se evitan extrayendo los l¨ªquidos de las basuras junto al vapor condensado. El agua se puede depurar para reutilizarla en el proceso, explica Sol¨®rzano, que parece tener una soluci¨®n para cada problema.
El agua hervida empleada en el proceso se depura y reutiliza
El resto de materiales, ya sin el org¨¢nico, son separados con un electroim¨¢n (metales f¨¦rricos), un equipo de corrientes Eddy (aluminio), un separador ¨®ptico (pl¨¢stico) y una ¨²ltima separaci¨®n manual para aislar definitivamente el 15% de materiales inertes no aprovechables tras el tratamiento. La planta de Rivas, que es solo un proyecto piloto, todav¨ªa no cuenta con la tecnolog¨ªa necesaria para esta separaci¨®n ni para el aprovechamiento energ¨¦tico posterior, por lo que de momento solo son proyecciones.
Sobre estas proyecciones trabaja el alcalde, Jos¨¦ Masa, de IU, para tratar de exportar la idea a otras ciudades y pa¨ªses, aunque de momento descarte deshacerse de la patente. ¡°No solo est¨¢n interesados en el aspecto econ¨®mico ¡ªporque esta tecnolog¨ªa es dos tercios m¨¢s barata que el vertedero tradicional¡ª, sino sobre todo por la sostenibilidad ambiental¡±, apunta el regidor. Es el mensaje que quiere que cale en las delegaciones que ya han visitado la planta piloto y que podr¨ªan estar interesadas en instalar la tecnolog¨ªa. Masa asegura que las negociaciones m¨¢s avanzadas son las que est¨¢n realizando con el estado brasile?o de S?o Paulo, con el que ya habr¨ªan hablado hasta de alg¨²n pedido concreto. Tambi¨¦n han firmado un convenio con Chile. En Espa?a se han interesado municipios como Torrej¨®n, Alcal¨¢ de Henares o comunidades como Asturias, entre otras. Pero la gran pregunta es por qu¨¦ ha descartado establecer una planta industrializada en su municipio si es todo tan bueno como lo pintan. ¡°Est¨¢ pensado para un volumen de poblaci¨®n m¨¢s cercano a una mancomunidad¡±, responde Masa. Una respuesta que suena razonable incluso para adversarios pol¨ªticos.
Son los ecologistas quienes m¨¢s reparos ponen a este modelo. Daniel L¨®pez, responsable del ?rea de Residuos y Contaminaci¨®n de Ecologistas en Acci¨®n y ge¨®logo de profesi¨®n, subraya que existe incompatibilidad entre la alimentaci¨®n de este tipo de tecnolog¨ªa y lo que ser¨ªa una pol¨ªtica de separaci¨®n y de recogida domiciliaria. ¡°O se hace una recuperaci¨®n del material o se hace una valorizaci¨®n energ¨¦tica¡±, defiende. L¨®pez desliza que esta planta solo es una cobertura para que los restos acaben en la incineradora. Jos¨¦ G¨®mez, gerente de RivaMadrid, respondeque nunca han fomentado la no selecci¨®n previa, una pr¨¢ctica que ahorra costes, y niega rotundamente que los restos puedan acabar en la incineradora.
Biog¨¢s y gas¨®leo ¡®made in Rivas¡¯
Los ecologistas han puesto su punto de mira en el proyecto Vertedero 0. No les gusta. Aseguran que es un sistema insostenible ambiental y econ¨®micamente. "Salvo los restos met¨¢licos, nada de lo obtenido tras el tratamiento es reutilizable. Los pl¨¢sticos de diferentes tipos quedan mezclados, lo que hace muy dif¨ªcil su separaci¨®n, y la materia org¨¢nica esterilizado no se puede convertir en abono", explican Amigos de la Tierra, Ecologistas en Acci¨®n y Greenpeace.
Adem¨¢s, critican que ¡°fomente la no selecci¨®n previa¡± y sostienen que los residuos acabar¨¢n en la incineradora, pese a que la empresa lo niega.
Jos¨¦ G¨®mez, gerente de Rivamadrid, la empresa p¨²blica que se encarga de la recogida de los residuos s¨®lidos, carga contra los ecologistas y asegura que forman parte de una comisi¨®n de evaluaci¨®n a la que ¡°apenas han asistido¡± y que, por lo tanto, lo que digan ¡°poco tiene que ver con la realidad¡±.
Ecohisp¨¢nica explica el aprovechamiento de las basuras desde el punto de vista energ¨¦tico: los restos org¨¢nicos no ser¨ªan aptos para compost, pero s¨ª para otros fines. Destacan la metanizaci¨®n para la producci¨®n de biog¨¢s y la gasificaci¨®n para generar gas combustible. Con la tecnolog¨ªa adecuada, explican, con el pl¨¢stico se podr¨ªa producir gas¨®leo.
El PP de Rivas se muestra ¡°moderadamente a favor¡± de la planta, pero con algunos matices: ¡°Que se mantenga la separaci¨®n en origen y que existan mecanismos para la valorizaci¨®n energ¨¦tica¡±, advierte el portavoz de la formaci¨®n, Jes¨²s Gonz¨¢lez, al tiempo que lamenta una excesiva inversi¨®n a costa de las arcas locales.
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