Regenerar un modelo clave que funciona
Sectores econ¨®micos y pol¨ªticos coinciden en la defensa del grupo Mondrag¨®n por su trascendencia, pero alertan del riesgo de que no sepa adaptarse a la situaci¨®n
¡°No es una cuesti¨®n de liderazgo, sino de saber qu¨¦ tipo de medidas tomar y cu¨¢ndo¡±. Esta receta estrat¨¦gica es el compendio de las distintas opiniones recabadas ayer por este diario en los ¨¢mbitos pol¨ªtico y econ¨®mico de Euskadi sobre cu¨¢l deber¨ªa ser el escenario m¨¢s adecuado para que la Corporaci¨®n Mondrag¨®n (antes MCC) retomara su pulso industrial y financiero, convulsionado por el incierto futuro de Fagor Electrodom¨¦sticos y la precipitada renuncia de Txema Gisasola a la presidencia de este grupo cooperativo de 80.000 trabajadores, en medio de los zarpazos de la crisis econ¨®mica.
De entrada, existe una preocupaci¨®n compartida por ¡°el cuestionamiento¡± del sistema cooperativo. ¡°Teniendo en cuenta el porcentaje de paro en Euskadi o en Espa?a, ?de cu¨¢nto paro estamos hablando en el conjunto de las empresas que pueden tener problemas dentro del grupo Mondrag¨®n?¡±, se preguntaba con cierto esp¨ªritu desafiante un analista econ¨®mico. ¡°Nos ponemos a hablar en contra de las cooperativas sin saber que es un modelo que hasta ahora ha sido rentable, que ha reinvertido lo que ha ganado y que puede resistir si se hacen las cosas bien¡±, se?ala un exdirectivo del grupo.
Incluso, este dardo tambi¨¦n se extiende al Gobierno vasco. ¡°Hasta ahora, todo eran fotos alabando la expansi¨®n, las plantas en China, se les llenaba la boca destacando el modelo Mondrag¨®n, y ahora parece que no sabemos hacer las cosas¡±, a?ade la misma fuente. El Ejecutivo de Urkullu ha sido especialmente cr¨ªtico con la gesti¨®n acometida por Gisasola en la crisis de Fagor Electrodom¨¦sticos y ahora en el departamento de Arantza Tapia se sigue con especial intensidad el proceso de refinanciaci¨®n de Eroski, aunque existe ¡°confianza en que salga¡±, dicen.
En lugar de medidas dr¨¢sticas se han puesto pa?os calientes y aspirina¡±
Pero dentro de MCC tambi¨¦n ha llegado la autocr¨ªtica, a pesar de desenvolverse en un entorno refractario a la comunicaci¨®n. El rev¨¦s de Fagor Electrodom¨¦sticos y el ¡°castigo en la calle¡± a muchos socios del grupo por parte de afectados en el esc¨¢ndalo de las subordinadas ha erosionado la confianza ilimitada en el funcionamiento del sistema cooperativista. ¡°Se ha sido muy contemporizador cuando las cosas empezaban a ir mal. Hay que pensar que quienes ten¨ªan que tomar las decisiones ante la situaci¨®n son trabajadores y compa?eros y, en lugar de aplicar medidas dr¨¢sticas, eligieron la aspirina y los pa?os calientes¡±, cuestiona un directivo del propio grupo. ¡°Nos ha ido muy bien. Se ha ganado, se ha repartido, se ha reinvertido, pero no se ha sabido prever cuando han venido mal dadas y as¨ª nos encontramos¡±, destaca este directivo.
¡°Desde luego, aqu¨ª est¨¢ claro que no se lo ha llevado nadie, como podr¨ªa ocurrir en una empresa privada que tiene p¨¦rdidas, aunque tampoco tenemos a nadie que venga con el dinero para hacer una ampliaci¨®n de capital cuando se nos plantean problemas financieros¡±, agrega.
Un experto en el cooperativismo, convencido de la plena vigencia de este sistema, sostiene, no obstante, que ¡°falta ilusi¨®n¡± en el proyecto de MCC: ¡°Ahora que han llegado al borde del precipicio hablamos del mercado, de lo local y de lo global, cuando otros en el mismo tipo de mercado han sabido salir¡±. Seg¨²n su criterio, el problema radica exclusivamente ¡°en las medidas estrat¨¦gicas, y las medidas estrat¨¦gicas las toman las personas¡±.
Apoyado en este principio, subraya que ¡°quienes han compartido durante a?os y a?os las mismas medidas, la misma cultura y dir¨ªa hasta el mismo pueblo¡±, en alusi¨®n directa a la Corporaci¨®n Mondrag¨®n, ¡°no pueden ser capaces de encarar las soluciones para las exigencias que la situaci¨®n actual requiere¡±.
Las fuentes consultadas desde el ¨¢mbito econ¨®mico han evitado entrar ¡°en un carrusel de aspirantes¡±, porque entienden que ¡°solo es una parte de la soluci¨®n del problema¡±. De hecho, el sistema de elecci¨®n y control del que se dota el modelo cooperativista relativiza el protagonismo de la presidencia, seg¨²n destacan fuentes internas. ¡°Otra cosa es que tiene que dar la cara, pero las medidas que se toman no son personalistas, porque tienen que pasar por consejos de representatividad¡±, recuerdan.
Quienes han compartido la misma cultura no son la soluci¨®n¡±
No obstante, algunas decisiones estrat¨¦gicas se han identificado directamente con los distintos presidentes del grupo y ah¨ª es donde Gisasola sale mal parado, aunque se le reconoce ¡°la poca suerte que ha tenido su presidencia en plena crisis¡±. Un ejemplo paradigm¨¢tico son las subordinadas. ¡°Las que se sacaron en el per¨ªodo 2003-2010 se han satisfecho sin ninguna pega, con unos beneficios muy por encima de los que estaban en el mercado y era el mismo producto que las de ahora, admitido por el Estado y sin pegas, pero entonces no hab¨ªa crisis y ahora no hay dinero por culpa de la crisis¡±, a?ora quien particip¨® en el dise?o de captaci¨®n de m¨²sculo financiero.
Con todo, nadie en el Gobierno vasco ha lamentado esta renuncia por los m¨²ltiples desencuentros habidos durante la gesti¨®n de la consejera Arantza Tapia en el desenlace traum¨¢tico de Fagor Electrodom¨¦sticos, aunque enfatizan: ¡°Son decisiones que respetamos¡±. En el Ejecutivo nacionalista preocupa, sobre todo, la inestabilidad que ahora proyecta MCC en una situaci¨®n de mercado muy comprometida. ¡°Una cosa es que no se haya sabido responder con medidas eficaces ante lo que se avecinaba y otra es que se haga le?a del ¨¢rbol ca¨ªdo¡±, admiten en el entorno del departamento de Desarrollo Econ¨®mico.
En el Ejecutivo siguen muy de cerca el proceso de refinanciaci¨®n de los 2.500 millones de deuda de Eroski por la repercusi¨®n que alberga. Seg¨²n un analista financiero, ¡°las perspectivas son buenas, aunque es una operaci¨®n compleja, porque hay que conseguir el visto bueno de los 22 bancos acreedores y las noticias sobre el grupo no son tranquilizadores precisamente¡±. Pero este poderoso grupo de distribuci¨®n ya ha sabido superar anteriores retos sobre la refinanciaci¨®n de su deuda. Quienes afrontaron este proceso de confianza ante los acreedores admiten que ¡°hay fortaleza en Eroski, y eso lo saben los bancos¡±. ¡°Los acreedores miran tu caja, tu ebitda, saben que tus edificios no son los de la burbuja inmobiliaria, sino que hay fondos interesados en su compra¡±, apostilla. Si as¨ª fuera, el pr¨®ximo presidente de MCC se habr¨ªa quitado un gran peso de encima. Y con ¨¦l, la econom¨ªa vasca.
Grandes retos a corto plazo
- El plan de viabilidad de Fagor Electrodom¨¦sticos a partir de su concurso de acreedores, la financiaci¨®n de la deuda de Eroski, el futuro de las subordinadas y la elecci¨®n del presidente del consejo general son los grandes retos que le aguardan a corto plazo a la Corporaci¨®n Mondrag¨®n.
- El congreso general del grupo se celebrar¨¢ en el pr¨®ximo mes de mayo y es la fecha para la que se entiende que se habr¨¢ procedido a la elecci¨®n de un nuevo presidente, en sustituci¨®n de la actual comisi¨®n gestora que cubre el vac¨ªo producido por la dimisi¨®n de Txema Gisasola, conocida el viernes.
- Eroski negocia la refinanciaci¨®n de su deuda de 2.500 millones con los 22 bancos acreedores. La obligada venta de activos, como ya ocurriera en otra etapa comprometida, es una de las salidas obligadas para propiciar el acuerdo.
- La negociaci¨®n de la deuda condiciona, a su vez, el canje pactado por Eroski con los principales bancos comercializadores sobre el futuro de las pol¨¦micas subordinadas. A su vez, dentro del conflicto suscitado, sigue adelante el proceso judicial de Adicae tanto contra la cooperativa como contra el BBVA.
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