Arquitectura entre el caos y la belleza
Dionisio Gonz¨¢lez exhibe en Marbella sus fotograf¨ªas sobre propuestas arquitect¨®nicas inventadas para enclaves problem¨¢ticos
A Dionisio Gonz¨¢lez (Gij¨®n, 1965) la adversidad, las cat¨¢strofes naturales y el caos le sirven de inspiraci¨®n. Al igual que la energ¨ªa, la capacidad de resistencia y la combatividad de quienes las padecen. Este doctor en Bellas Artes por la Universidad de Sevilla, donde da clases, encontr¨® en la fotograf¨ªa la v¨ªa por la que desarrollar una de sus vocaciones, la arquitectura, aunque s¨®lo fuera bidimensionalmente. Gonz¨¢lez ha dedicado los ¨²ltimos 10 a?os a recorrer el mundo en busca de n¨²cleos habitacionales que son pasto continuo de la fuerza de la naturaleza y cuyos habitantes se resisten a abandonar pese a los sucesivos azotes de devastadores huracanes, inundaciones o terremotos.
De la visita a lugares como la isla de Dauphin, en el Golfo de M¨¦xico, las superpobladas favelas de S?o Paulo, en Brasil o las casas de pescadores de la Bah¨ªa de Halong, en Vietnam, enclaves donde conviven el caos y la belleza, Gonz¨¢lez obtuvo la inspiraci¨®n para buscar soluciones a los problemas de sus moradores, ideando construcciones atrevidas, casi escult¨®ricas y sostenibles, adem¨¢s de factibles, si bien ninguna de sus creaciones, de momento, ha llegado a plasmarse en hormig¨®n y ladrillo.
Ayudado por un arquitecto y un infografista de su estudio sevillano, Gonz¨¢lez ide¨® sus futuristas edificios que posteriormente fueron insertados en las fotograf¨ªas de los lugares que visit¨®. De ah¨ª salieron series fotogr¨¢ficas como Favelas (2004-2007) Halong (2008-2011), Dauphin Island (2011) o Busan (2011), a las que se suma Inter-Acciones, su ¨²ltimo trabajo, finalizado el pasado a?o.
La muestra incluye Organogramas, una instalaci¨®n en la que un robot dirige una sinfon¨ªa del rugido de los tubos de escape de las motocicletas de Hanoi
Dos de estos trabajos, Dauphin Island e Inter-Acciones, se pueden ver hasta finales de marzo en la galer¨ªa marbell¨ª Yusto/Giner, que acoge la primera exposici¨®n individual de Gonz¨¢lez en M¨¢laga, titulada Arquitectura para la resistencia. En total se exhiben una veintena de fotograf¨ªas de ambas series en las que Gonz¨¢lez reflexiona sobre la aceptaci¨®n de la adversidad y el v¨ªnculo que se establece entre la construcci¨®n y la destrucci¨®n en estos lugares, lo que ha creado, seg¨²n dice, ¡°estructuras constructivas para la resignaci¨®n¡±.
¡°En la serie Dauphin Island el hilo conductor es el agua. Esta isla de Alabama, en el Golfo de M¨¦xico, fue descubierta por los espa?oles y ya los franceses la rebautizaron como ¡®isla masacre¡¯ por lo virulenta que es la naturaleza all¨ª, con continuos huracanes que barren todo. De la energ¨ªa de sus gentes, resignados a una arquitectura de restituci¨®n, me surgi¨® la idea de realizar una arquitectura para la resistencia, una arquitectura bunquerizada preparada para resistir los embates de la naturaleza¡±, explica Gonz¨¢lez.
¡°En Inter-Acciones, sin embargo, las construcciones no tienen tanta implicaci¨®n social. S¨ª que intervengo en diversos enclaves geogr¨¢ficos, pero m¨¢s por diversi¨®n. Son casas que se incrustan en la naturaleza, dando la sensaci¨®n de que est¨¢n ah¨ª como dejadas u olvidadas¡±, a?ade el artista, cuyas fotograf¨ªas intervenidas han colgado de las paredes de grandes centros de arte mundiales como el George Pompidou de Par¨ªs, el Reina Sof¨ªa de Madrid o el Museum of Contemporary Photography de Chicago.
La exposici¨®n se completa con la instalaci¨®n in¨¦dita Organogramas, un rugido de tubos de escape simulando el sonido de las motocicletas de Hanoi, cuya sinfon¨ªa dirige un robot y con la que Gonz¨¢lez reflexiona sobre ¡°el ritmo de la fatalidad¡± y ¡°el orden dentro del caos¡±.
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