Las 24 horas de Foronda tienen precio

La historia del aeropuerto de Vitoria-Foronda es la de una improductiva pol¨¦mica que dura ya 30 a?os. Dise?ado como el principal aeropuerto de la cornisa cant¨¢brica espa?ola y llamado a ser la referencia aeroportuaria del norte, junto a Barcelona, ha terminado como un minijob, trabajando menos de media jornada y sin expectativas de mejora a corto plazo.

30 a?os despu¨¦s de que se pusiera en marcha en la Llanada alavesa, es dif¨ªcil recordar uno solo en el que se haya mantenido al margen de pol¨¦micas est¨¦riles de uno u otro tipo. Ha estado peri¨®dicamente en boca de todos los agentes pol¨ªticos y sociales, sin que su situaci¨®n haya mejorado ni un ¨¢pice, desde la que consolid¨® hace m¨¢s de dos d¨¦cadas: aeropuerto de carga. El sue?o de los vuelos de pasajeros se ha repetido como un mantra entre las paredes de las instituciones alavesas, sin resultados estables, tras las aventuras m¨¢s sonadas de Euskal Air, Ryanair y Helitt.

Reducido a la m¨ªnima expresi¨®n, con un pasivo acumulado de nueve millones de euros la cantinela ahora es el H24. La consigna resuena como el objetivo a lograr sin que sobre la mesa exista un plan concreto para hacerlo, y todo se traduce en una nueva pol¨¦mica. Esta vez surgida despu¨¦s del dif¨ªcilmente explicable hecho de que numerosos pasajeros que no pudieron aterrizar en Loiu, durante el ¨²ltimo temporal navide?o, se tuvieran que ir a otras capitales y volver en autob¨²s. Sin embargo, la soluci¨®n tiene un precio. La pregunta es qu¨¦ administraci¨®n lo paga.

El sue?o de los vuelos de pasajeros se ha repetido como un mantra

El recorte de personal en Foronda hace inviable ofrecer las medidas de seguridad que exige la legislaci¨®n a un aeropuerto de uso p¨²blico durante las 24 horas. Pero no har¨ªa falta recuperar los 100 empleados de la plantilla que salieron hasta junio del pasado a?o: con 21 personas m¨¢s, el mismo n¨²mero que atiende las 12 horas nocturnas, el aer¨®dromo estar¨ªa potencialmente listo para operar todo el d¨ªa. Cuantificado el problema por el propio comit¨¦ de empresa del aeropuerto, ¡°las instituciones alavesas tienen una l¨ªnea de trabajo clara¡± para presentar un proyecto que al menos sobre el papel, de forma clara, segura y legal, ofrezca garant¨ªas de operaci¨®n aseguran fuentes del propio aeropuerto.

Esas 21 personas se repartir¨ªan de la misma manera que durante la noche: 15 bomberos, tres personas en la central el¨¦ctrica y otras tres en operaciones. Otro equipo, pero con la misma o algo diferente configuraci¨®n, se har¨ªa cargo de las eventuales operaciones durante las restantes 12 horas del d¨ªa. ?Hasta qu¨¦ punto es estrat¨¦gico para las instituciones alavesas y vascas el H24 como para trascender el debate pol¨ªtico y trasladar a Madrid un plan real con costes y financiaci¨®n para extender el horario operativo? El plan de eficiencia aeroportuaria que castig¨® a Foronda por excesos presupuestarios de la propia AENA no va a ir marcha atr¨¢s.

La actual ministra de Fomento Ana Pastor firm¨® ese plan para adaptar la actividad a los gastos y es cierto que los gastos se han reducido, pero la actividad no avanza. Es m¨¢s, retrocede. Los escasos, pero reales, negocios que basaban su actividad en el horario diurno de Foronda han desaparecido generando despidos y p¨¦rdidas a sus inversores. Es decir, desde el punto de vista de Fomento no hay justificaci¨®n, por lo tanto, para ampliar el horario. Ahora bien, ?qu¨¦ pasar¨ªa si la plantilla adicional la paga un tercero? En un pueblo como el vasco, con un entramado institucional complejo y acostumbrado a que las sociedades y los organismos aut¨®nomos crezcan bajo el paraguas del presupuesto p¨²blico, ¡°?habr¨ªa o no justificaci¨®n para una sociedad nueva que diera servicio a las restantes 12 horas al aeropuerto de Foronda?¡±, asegura un ex alto cargo de la C¨¢mara de Comercio de ?lava. ?l mismo responde que estar¨ªa plenamente justificada, si hay voluntad pol¨ªtica para encontrarle un encaje jur¨ªdico, sobre todo si se tiene en cuenta el debate que suscita cada vez que llega a la C¨¢mara foral, y al Ayuntamiento de Vitoria.

Ninguna de las demandas de H24 ha ido acompa?ada de planes concretos

Todos los grupos de las Juntas Generales, sin excepci¨®n, aseguran que apuestan por el H24. Pero tambi¨¦n lo hacen los grupos en el Consistorio de Vitoria en medio de agrias pol¨¦micas. EH Bildu incluso ha presentado una proposici¨®n no de ley en el Parlamento vasco para que sea la C¨¢mara que detenta la soberan¨ªa popular, la que exija a Madrid que garantice las operaciones de Foronda durante 24 horas sin interrupciones. La ¨²ltima palabra la tiene el Ministerio de Fomento, en manos del PP, el mismo partido que gobierna en ?lava y que esta legislatura goza, al menos sobre el papel, del mayor grado de influencia sobre la administraci¨®n central de toda la historia, con el exalcalde de Vitoria Alfonso Alonso ahora en tareas de portavoz del Grupo Parlamentario popular en el Congreso de los Diputados.

¡°Qu¨¦ pasar¨ªa si ?lava, con el respaldo del Gobierno vasco y del Parlamento se presenta ante el Ministerio de Fomento y asume el gasto de personal de las 12 horas diurnas?¡±, se pregunta un miembro del equipo de la anterior direcci¨®n del aeropuerto de Foronda. A rengl¨®n seguido dice que ser¨ªa la mejor manera de descartar motivos pol¨ªticos m¨¢s all¨¢ de los econ¨®micos para que Vitoria sea el aer¨®dromo m¨¢s afectado de todos los espa?oles en el plan de recortes dise?ado por el ministerio.

¡°Puestos a defender utop¨ªas sin proyecto como el H24, se pueden defender proyectos concretos como el de la contrataci¨®n de personal y que sea Fomento el que diga que es ut¨®pico¡±, critica otro ex alto cargo de la instalaci¨®n aeroportuaria.

Foronda s¨®lo tuvo brillo cuando plastificaron sus planos¡±

En las pasadas Navidades, el n¨²mero de operaciones afectadas por el temporal de Loiu fueron 36, de las cuales 24 se suspendieron y 12 fueron desplazadas a otros aer¨®dromos. La mayor¨ªa de los viajeros maldijeron su suerte, posiblemente sin darse cuenta de que en su d¨ªa tambi¨¦n pagaron el coste de Foronda con sus impuestos, y despu¨¦s tambi¨¦n por esa v¨ªa, los d¨¦ficits que ha ido acumulado. Para colmo, el d¨ªa de Navidad extendieron otro tal¨®n con su tiempo, al ser desplazados a otros campos. Foronda estaba cerrado.

En la primera pol¨¦mica de 2014 que afecta al aer¨®dromo alav¨¦s, el Gobierno vasco propuso trabajar para convertir Foronda en un aeropuerto que d¨¦ servicio a ese tipo de contingencias y el diputado general de ?lava, Javier de Andr¨¦s, lo descalific¨® porque ¡°aspira a m¨¢s¡±, en concreto a que Foronda sea ¡°el aeropuerto de referencia¡± del norte.

Y vuelta a empezar. La realidad es que mientras Foronda no est¨¦ abierto no podr¨¢ atender ese tipo de contingencias. Todo avi¨®n que despega hacia su destino tiene que hacer un plan de vuelo, en el que adem¨¢s de otros datos fija dos aeropuertos alternativos al de destino, por si acaso no puede aterrizar en el previsto. Si un aeropuerto est¨¢ cerrado en el momento de hacer el plan de vuelo no se puede encasillar como alternativo. De incluirlo, el plan de vuelo volver¨ªa al emisor rechazado y no podr¨ªa iniciar la marcha. Para que aviones desplazados de otros campos pudieran haber aterrizado en Vitoria, el campo tendr¨ªa que haber estado abierto. ¡°Se trata de una magn¨ªfica instalaci¨®n desde el punto de vista de la seguridad que s¨®lo tuvo brillo cuando plastificaron sus planos¡±, lamenta ir¨®nico un ingeniero aeron¨¢utico vasco.