El expresidente de Ferrocarrils que malvers¨® 2,7 millones vuelve a prisi¨®n
Los jueces anulan el tercer grado de Antoni Herce porque no se ha arrepentido
Han pasado 19 meses desde que Enric Roig y Antoni Herce fueran condenados, en sentencia firme, a cuatro a?os y medio de c¨¢rcel por malversar 2,7 millones de euros de Ferrocarrils de la Generalitat. Pese a la gravedad de las penas y de los hechos, los expresidentes del organismo apenas hab¨ªan pasado, hasta ahora, 48 d¨ªas entre rejas: los suficientes para que el Departamento de Justicia, que encabeza Germ¨¤ Gord¨®, les concediese el tercer grado, o sea el r¨¦gimen de semilibertad que les obliga a ir a prisi¨®n solo a dormir.
La situaci¨®n se ha complicado para Herce, que desde hace unos d¨ªas vuelve a pasar las 24 horas del d¨ªa en Quatre Camins, en una celda ubicada en el Departamento de Medidas de Seguridad (DMS), el ¨¢rea de la prisi¨®n barcelonesa destinado a personas que necesitan una especial protecci¨®n; por ejemplo, polic¨ªas. La Audiencia de Barcelona ha rechazado el ¨²ltimo recurso que Herce ¡ªque sucedi¨® a Roig al frente de la entidad en 1999¡ª present¨® para seguir disfrutando del tercer grado.
La Audiencia de Barcelona ha confirmado la resoluci¨®n del juez de vigilancia penitenciaria, que anul¨® el r¨¦gimen abierto por la gravedad del delito y por la ¡°escasa fracci¨®n de condena cumplida¡±. En su respuesta al recurso de la defensa de Herce, los magistrados admiten que el condenado cumple la mayor¨ªa de requisitos para que se le otorgue el tercer grado (v¨ªnculos familiares, ausencia de antecedentes, disposici¨®n a abonar la responsabilidad civil) pero subrayan que actu¨® con desmedido ¨¢nimo de lucro y que no ha asumido del todo su responsabilidad en los hechos.
La tesis de la Audiencia sobre la falta de contrici¨®n coincide con la expresada, en su d¨ªa, por la fiscal¨ªa, que atribuy¨® el supuesto ¡°arrepentimiento¡± de los dos expresidentes ¡°m¨¢s al temor al castigo que al rechazo de la actividad delictiva¡±. Y por el propio juez de vigilancia penitenciaria, que en el caso de Herce escribi¨®: ¡°Mantiene un discurso de autocr¨ªtica que no se corresponde con el contenido de la sentencia¡±.
En mayo de 2011, la Audiencia de Barcelona conden¨® a seis a?os de c¨¢rcel a los dos excargos p¨²blicos por haber creado, veinte a?os antes, un fondo de pensiones ilegal que fue repartido entre una quincena de directivos del operador ferroviario de la Generalitat. Otro procesado, Albert Vilalta ¡ªque fue consejero de Medio Ambiente en uno de los gobiernos de Jordi Pujol¡ª result¨® absuelto porque el delito de prevaricaci¨®n que cometi¨® al firmar el fondo de pensiones hab¨ªa prescrito.
La sentencia definitiva lleg¨®, rebajada, un a?o m¨¢s tarde: el Tribunal Supremo fij¨® en cuatro a?os la pena de c¨¢rcel para Roig y Herce por malversaci¨®n, que tambi¨¦n quedaban obligados a devolver el dinero sustraido. Los exdirectivos intentaron eludir el ingreso en prisi¨®n mediante la petici¨®n de un indulto que el Gobierno central deneg¨®. En mayo del a?o pasado, ingresaron en prisi¨®n hasta que, 48 d¨ªas m¨¢s tarde, les fue concedido el tercer grado penitenciario. Durante este tiempo, han dormido en un centro abierto de la Generalitat. En el de la Trinitat sigue, seg¨²n fuentes penitenciarias, Enric Roig, que presidi¨® la empresa p¨²blica entre 1993 y 1999.
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