Formulando hip¨®tesis teatrales
El ciclo Impulso ETC arranca en la sala Cuarta Pared Hasta mediados de marzo exhibe cuatro montajes resultantes de la experimentaci¨®n
Normalmente, cuando escuchamos palabras como ¡°investigaci¨®n¡± o ¡°laboratorio¡±, se nos pierde la cabeza entre matraces y aceleradores de part¨ªculas, en el ¨¢mbito de la investigaci¨®n por antonomasia: la cient¨ªfica. Bien es cierto que en el mundo del teatro tambi¨¦n hay laboratorios e investigaci¨®n, pero solemos pensar que es investigaci¨®n de otro tipo. Pues no tanto: en la sala Cuarta Pared abordan la innovaci¨®n teatral utilizando un m¨¦todo similar al cient¨ªfico. ¡°Planteamos unas hip¨®tesis y luego viene la parte experimental para demostrar esas hip¨®tesis¡±, explica Javier Yag¨¹e, director de la sala, quien, por cierto, empez¨® la carrera de Qu¨ªmica antes de pasarse al teatro. ¡°Hay experimentos cient¨ªficos¡±, contin¨²a, ¡°que llegan a buen puerto y otros que no. Los que llegan a buen puerto entran en la industria y generan avances tecnol¨®gicos y los que no¡ ah¨ª se quedan¡±.
En teatro, seg¨²n Yag¨¹e, todo esto es m¨¢s ¡°ambiguo¡±, pero han intentado ajustarse a ese modelo dentro del laboratorio Espacio Teatro Contempor¨¢neo (ETC). El resultado ¡ªalgunos de esos experimentos que han llegado a buen puerto¡ª se puede ver en la propia sala durante el ciclo ¡°Impulso ETC¡±, que estrena cuatro obras variadas e innovadoras hasta el 15 de marzo. ¡°Se han hecho experimentos de investigaci¨®n pura¡±, explica el director siguiendo con el s¨ªmil cient¨ªfico, con el fin de ¡°generar conocimientos para la profesi¨®n. Y luego, lo que se va a mostrar, es la investigaci¨®n aplicada¡±.
G¨¹nter, un destripador en Viena de la compa?¨ªa Pecado de Hybris Teatro, es la primera propuesta. Escrita y dirigida por Mar¨ªa Velasco y con toques de teatro cabar¨¦, es una ficci¨®n inspirada en la vida de G¨¹nter Brus, artista austriaco perteneciente al Accionismo Vien¨¦s, aquel sangriento y extremo movimiento que en los a?os sesenta llev¨® la performance a l¨ªmites insospechados, como la mutilaci¨®n corporal o el sadomasoquismo.
En sucesivas semanas se podr¨¢ ver Horizonte Artificial, de Proyecto Bufo Teatro, una obra de teatro f¨ªsico en el que una enferma terminal y su familia asumen su situaci¨®n a trav¨¦s de la fantas¨ªa; Aqu¨ª hay una mano de La Dram¨¢tica Madrile?a, una intriga cient¨ªfica sobre miembros fantasma y fascinaci¨®n por las m¨¢quinas y En defensa (un concierto de despedida), de la compa?¨ªa Abiosis, teatro pol¨ªtico y musical, sobre la nueva generaci¨®n de j¨®venes que se ven obligados a abandonar el pa¨ªs.
Dios (o la crisis) aprieta, pero no ahoga, as¨ª que de la precariedad del mundo teatral surge una efervescencia creativa que se aprecia en la proliferaci¨®n de salas alternativas y compa?¨ªas. "M¨¢s all¨¢ de la situaci¨®n econ¨®mica la gente necesita expresarse, contar cosas¡±, opina Yag¨¹e, "es normal esta efervescencia y me parece muy saludable porque conecta al artista con la necesidad expresiva¡±. Eso s¨ª, las cosas est¨¢n bien feas para el gremio: a finales de enero los resultados de un informe de la Artistas Int¨¦rpretes, Sociedad de Gesti¨®n (AISGE) arrojaban que el 73% de los actores y bailarines no pueden vivir de su trabajo. ¡°Es necesario apoyo institucional para hacer que la gente no viva en precario. La subsistencia en precariedad no es buena porque a la larga, la gente se agota¡±, dice el director.
Un apoyo institucional que m¨¢s bien va en retroceso. Los recortes en cultura se materializaron de forma especialmente visible con?el adi¨®s del festival Escena Contempor¨¢nea, despu¨¦s de 13 a?os de teatro alternativo. El festival recibi¨® en su ¨²ltima edici¨®n un 70% del presupuesto de las arcas de la Comunidad (unos 90.000 euros), que fue retirado. ¡°Este caso es un s¨ªntoma de nuestros tiempos¡±, dice Yag¨¹e, ¡°proyectos como el nuestro tambi¨¦n reciben ayudas del ministerio y la Comunidad, pero estas ayudas han ca¨ªdo much¨ªsimo en los ¨²ltimos a?os. Hemos tenido que reinventarnos para subsistir¡±.
Otra necesidad que no permite este estado de precariado?es la de trabajar a largo plazo. ¡°Es lo que intentamos en ETC¡±, dice el director, ¡°queremos que la creatividad se desarrolle y haya innovaci¨®n, y para eso hay que poder trabajar a largo plazo. Si no, uno tiende a repetirse porque no tiene capacidad de avanzar. El del largo plazo es, de alguna manera, el mismo problema que existe en la investigaci¨®n cient¨ªfica¡±. Al final, la ciencia y el teatro se van a parecer hasta en sus problemas.
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