Jazz que piensa en rock

A primera vista, cualquiera podr¨ªa tomarlos por la ¨²ltima excrecencia de la escena indie en su versi¨®n m¨¢s gamberra. Durante la pasada d¨¦cada, The Bad Plus se ganaron a pulso su fama de chicos malos con sus versiones no exactamente ortodoxas de Nirvana, Blondie o Herb Alpert. ¡°Nuestra m¨²sica caus¨® consternaci¨®n en ciertas esquinas polvorientas de la comunidad del jazz que tienen poco aprecio al rock¡±, opina el pianista Ethan Iverson, miembro fundador de TBP. Catorce a?os y diez ¨¢lbumes despu¨¦s, los chicos malotes, ya no tanto, del jazz, pisar¨¢n por vez primera el sacrosanto escenario del Auditorio Nacional, en Madrid. Ser¨¢ esta misma tarde.

Para Iverson, la m¨²sica de The Bad Plus acaso pudiera definirse por lo que no es: ¡°no somos un tr¨ªo de piano, sino un colectivo, lo que significa que no hay un l¨ªder y que todas las puertas est¨¢n abiertas a la aportaci¨®n de cada cual¡±. The Wall Street Journal los defini¨® como ¡°una banda de jazz con coraz¨®n de rock and roll¡±. The Bad Plus interpretan jazz como lo har¨ªa un grupo pop. Sin electricidad pero con un groove irresistible: ¡°no sabemos si somos de verdad un grupo de jazz o no, y tampoco nos importa lo m¨¢s m¨ªnimo. Nos denominamos como tr¨ªo de bajo, piano y bater¨ªa¡±.

Su historia arranca en el 2000, a?o en que Ethan Iverson (piano), Reid Anderson (contrabajo) y Dave King (bater¨ªa) se reunieron para ofrecer su primer concierto en p¨²blico como The Bad Plus: ¡°el nombre fue un invento de Dave y no significa absolutamente nada. Nos gust¨® porque es f¨¢cil de recordar, punto¡±. Muy pronto, la cr¨ªtica comenzar¨ªa a vincular el nombre del tr¨ªo a la existencia de un improbable punk jazz: ¡°no s¨¦ lo que somos, lo que s¨ª s¨¦ es que a los tres nos gusta mucho el punk. Pero tambi¨¦n Wynton Marsalis es una influencia importante en la m¨²sica de TBP¡±.

Finalmente, hacemos un totum revolutum en el que cabe de todo: ¡°cada uno tenemos nuestro propio iPod cargado de m¨²sica de muchos estilos diferentes. Lo bueno de TBP es que ninguno de nosotros tiene que saberlo todo necesariamente. Es posible que uno est¨¦ m¨¢s familiarizado con los compositores cl¨¢sicos y que otro sepa mucho de rock o de pianistas de jazz, pero entre los tres tenemos cubierto un enorme abanico de referencias que luego nos sirven para elaborar nuestra m¨²sica¡±.

Su ¨²ltimo disco, Made possible, contiene una ¨²nica versi¨®n, Victoria, original del baterista Paul Motian, uno de los primeros en confiar en el talento pian¨ªstico de Iverson: ¡°est¨¢bamos grabando en el estudio cuando nos enteramos de que Paul agonizaba en el hospital. Entonces, nos propusimos grabar un tema de homenaje¡±. Al margen de TBP, Iverson se mantiene muy activo, como pianista titular en el cuarteto del baterista Billy Hart y como cr¨ªtico de jazz, a trav¨¦s de Do the Math, un blog ¡°did¨¢ctico y desordenado¡± que le sirve para saldar alguna que otra cuenta pendiente: ¡°leo habitualmente a todos los cr¨ªticos de jazz importantes, respeto su trabajo, es bueno y necesario¡±, apunta. Pol¨¦micos, pero no tanto. M¨¢s all¨¢ de su imagen p¨²blica, estos chicos malos resultan no ser tan fieros como se los pinta: ¡°nuestra m¨²sica es para quien quiera escucharla. No hay barreras de edad ni de ning¨²n otro tipo para disfrutar con ella¡±.

The Bad Plus, Auditorio Nacional de M¨²sica (Pr¨ªncipe de Vergara, 146), 20:00. de 10 a 20 euros.