40.000 expedientes colapsan el Fogasa
El Fondo de Garant¨ªa Salarial cuadruplica en dos a?os el n¨²mero de casos sin resolver El Ministerio de Trabajo contrata a 41 personas para intentar desatascar las demandas
El Fondo de Garant¨ªa Salarial (Fogasa) se encuentra al borde del colapso. Literalmente. En diciembre del a?o pasado, hab¨ªa en la unidad de Madrid de este organismo cerca de 40.000 expedientes a la espera de ser tramitados. Si antes se resolv¨ªan en un plazo medio de tres a cuatro meses, ahora se tarda m¨¢s de un a?o. En alguna ocasi¨®n, incluso, se ha alargado hasta dos, seg¨²n reconocen fuentes sindicales. El Ministerio de Trabajo e Inmigraci¨®n es consciente de lo que ocurre e intenta paliarlo con la contrataci¨®n de personal externo de la empresa p¨²blica Tragsatec.
El Fogasa ha visto en los ¨²ltimos a?os como su trabajo ha crecido de manera exponencial. Si a finales de 2011 el n¨²mero de expedientes acumulados era de 11.442, este n¨²mero se duplic¨® al a?o siguiente a 20.468 y se cuadruplic¨® dos ejercicios despu¨¦s hasta los 39.815 casos. En 2013, por ejemplo, le entraron 27.304 casos y solo pudo resolver 7.951. El trabajo de Fogasa consiste en pagar las indemnizaciones o los salarios de los trabajadores que no han cobrado de sus respectivas empresas. Y existen dos causas: cuando el empresario no puede hacer frente a esos desembolsos o cuando lo marca un tribunal tras resolver un concurso de acreedores o un despido colectivo, entre otros.
El organismo resolvi¨® en 2013 8.000 sumarios y le entraron 27.300
Para que el Fogasa pague es necesario que estudie todo el expediente, que debe incluir la sentencia o la resoluci¨®n pertinente. Despu¨¦s, los letrados son los que deciden la cantidad y la forma de pago. Para realizar todas estas operaciones, en la unidad perif¨¦rica de Madrid hay 29 personas, de las que ocho de ellas son letrados. Seg¨²n fuentes sindicales, resultan claramente insuficientes para toda la carga de trabajo que acumulan y que no pueden sacar adelante.
Seg¨²n el abogado de UGT Juan Antonio Lucena, este servicio ha funcionado ¡°muy bien¡± hasta la llegada de la crisis. En 1992 se estableci¨® que parte de las retenciones de los trabajadores se destinar¨ªan a sufragar los pagos del Fogasa. ¡°Desde su creaci¨®n, el plazo m¨¢ximo para resolver era de seis meses, pero en la mayor¨ªa de los casos estaban listos en tres o cuatro. Realmente acud¨ªa muy poca gente a este organismo. Eso, de momento, ya es historia¡±, recuerda.
Lo normal ahora es cerrar las listas de las citas cada dos meses, lo que ¡°transmite un mensaje desesperante y lamentable¡± para muchas personas, seg¨²n Lucena. A todo ello se une que los retrasos en la tramitaci¨®n y en el pago no genera intereses, como ocurre en otras ramas de la Administraci¨®n.
Desde el inicio de la crisis, el plazo para resolver los expedientes se ha ido incrementando de manera exponencial. Algunos casos se han demorado hasta dos a?os, seg¨²n UGT. ¡°El problema que se da, adem¨¢s, es que a los casos anteriores se siguen sumando los nuevos, con lo que el trabajo no para de acumularse y acumularse¡±, seg¨²n UGT.
Situaciones dram¨¢ticas
Detr¨¢s de las cifras y de los datos del Fondo de Garant¨ªa Salarial (Fogasa), hay situaciones personales y familiares que rozan la tragedia. ¡°Las situaciones pueden llegar a ser aut¨¦nticamente dram¨¢ticas. La gente espera mucho tiempo para recibir un dinero que necesita para mantener a la familia. En numerosos casos suele ser su ¨²nico ingreso del que disponen¡±, recuerda el abogado de UGT, Juan Antonio Lucena.
El letrado recuerda que la clase obrera, la m¨¢s afectada por la crisis, es la que tiene que acudir al Fogasa para completar su indemnizaci¨®n o los sueldos que se le adeudan. ¡°Como estos ingresos llegan tarde, las familias afectadas, en especial las m¨¢s humildes, ya han agotado el paro o las prestaciones sociales. Detr¨¢s hay gente que sufre desahucios o que no puede llegar siquiera a final de mes¡±, a?ade Lucena. Y recuerda que la cantidad que reciben los afectados no supera los 19.000 euros, aunque se les adeude m¨¢s. ¡°Se reconoce, en general, el funcionamiento anormal y lento de la justicia y de la Administraci¨®n, menos en este caso. Y degenera en una situaci¨®n ca¨®tica¡±, concluye el letrado.
Fuentes del Ministerio de Empleo reconocen que la carga de trabajo creci¨® a partir de los a?os 2007 y 2008 cuando empiezan a quebrar las empresas de manera masiva. De hecho, solo en Madrid se acumula casi un 25% de los 180.000 expedientes que hay el Fogasa a nivel nacional. La cifra global era de 30.000 casos hace cuatro a?os. ¡°La crisis se ceb¨® en algunas zonas como Levante [Valencia, Alicante y Castell¨®n], Barcelona y Madrid, debido entre otras cosas a la crisis del ladrillo. Por eso, en la Comunidad de Madrid existen numerosas empresas afectadas¡±, destacan en el Ministerio de Empleo.
El intento de desatacar los problemas del Fogasa lleg¨® a finales del a?o pasado cuando se contrataron a 500 personas con car¨¢cter interino en toda Espa?a, de las que 41 desembarcaron en la unidad perif¨¦rica de Madrid. ¡°Con este plan se pretende que se saque todo el trabajo lo antes posible. Nuestro objetivo es que est¨¦ resuelto antes de que termine el a?o¡±, se?alan fuentes de Empleo.
Para intentar acelerar el proceso administrativo, se ha acudido a la empresa p¨²blica Tragsatec, una divisi¨®n de Tragsa. Esta entidad es conocida en la regi¨®n, entre otros motivos, por poner operarios a disposici¨®n de los Ayuntamientos de Madrid y de Alcorc¨®n durante las huelgas de basuras y de limpiezas de los ¨²ltimos meses. Tragsatec naci¨® en 1989 como una filial de Tragsa para desarrollar actividades de ingenier¨ªa, consultor¨ªa y asistencia t¨¦cnica. Se ha utilizado una figura legal llamada encomienda de gesti¨®n para que pudiera ayudar a Tragsa.
UGT ha visto con recelo este proceso, ya que la formaci¨®n de estos operarios ha sido de un cursillo de dos o tres semanas. No creen que est¨¦n suficientemente preparados para afrontar la resoluci¨®n de los expedientes y que sean los correspondientes letrados los que den el visto bueno definitivo a cada caso. En su opini¨®n, hay mucha tramitaci¨®n y muchas circunstancias que no se pueden aprender en un periodo formativo tan corto. No obstante, Empleo conf¨ªa en que el n¨²mero de quiebras de empresas se frene este a?o, lo que har¨ªa que entraran menos casos. UGT no es tan optimista.
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