Telemadrid sortea el cierre
El Supremo declara improcedente el ERE que caus¨® el despido del 74% de la plantilla La Comunidad habilitar¨¢ otros 22 millones para indemnizaciones
Telemadrid seguir¨¢ emitiendo. El Tribunal Supremo declar¨® ayer improcedente el expediente de regulaci¨®n de empleo (ERE) que hace poco m¨¢s de un a?o afect¨® a 861 trabajadores, el 74% de la plantilla. La decisi¨®n ratifica la sentencia que el pasado abril dict¨® el Tribunal Superior de Justicia de Madrid (TSJM), que declar¨® ¡°no ajustado a derecho¡± el recorte de empleo en Radiotelevisi¨®n de Madrid. El ente regional tendr¨¢ que incrementar la cuant¨ªa de las indemnizaciones abonadas hasta ahora. Pocos minutos despu¨¦s de conocer el fallo, Telemadrid anunci¨® que una vez recibida la sentencia proceder¨¢ ¡°a dar cumplimiento de la misma, optando por indemnizar a las personas afectadas¡±. Se calcula que tendr¨¢ que destinar alrededor de 22 millones de euros a esta partida.
Para el Gobierno de Ignacio Gonz¨¢lez (PP), el fallo del Supremo ha sido un alivio. La Comunidad de Madrid hab¨ªa amenazado con cerrar Telemadrid si el ERE era declarado nulo y el ente p¨²blico se ve¨ªa obligado a readmitir a los despedidos. Y no parec¨ªa un aviso en balde. La Comunidad Valenciana llev¨® a negro Canal 9 a finales de noviembre despu¨¦s de que un ajuste laboral similar al acometido en Telemadrid fuera considerado nulo.
A la espera de conocer los argumentos del Supremo, el TSJM hab¨ªa expuesto ya en su sentencia que ¡°el recurso al despido masivo¡± no estaba justificado porque la causa no estaba ¡°bien ponderada¡±. Se?alaba, adem¨¢s, que la empresa no hab¨ªa acreditado que la reducci¨®n de plantilla propuesta fuera adecuada a la situaci¨®n del ente p¨²blico. Uno de los principales argumentos de Telemadrid para justificar el ERE fue que el Gobierno regional le hab¨ªa recortado el presupuesto. Pero los jueces entendieron que no era suficiente acreditar ¡°una reducci¨®n en el presupuesto que es insuficiente y cong¨¦nito a un servicio p¨²blico¡±. ¡°Por lo que se ha podido constatar¡±, subrayaba el TSJM, ¡°una reducci¨®n presupuestaria entre un 5% y un 10%, no parece que pueda justificar la idoneidad de la medida extintiva¡±.
La gesti¨®n de Telemadrid comenz¨® a deteriorarse durante la etapa de gesti¨®n de Esperanza Aguirre (2003-2012) y lleg¨® a su punto culminante con el Ejecutivo de Gonz¨¢lez, cuando el ente p¨²blico entr¨® en quiebra t¨¦cnica. Acumul¨® una deuda financiera de 262 millones de euros, los ingresos publicitarios se desplomaron y las entidades financieras le cortaron la l¨ªnea de cr¨¦dito.
Ayer, la euforia del Gobierno madrile?o ¡ª ¡°la sentencia garantiza la viabilidad de RTV-Madrid¡±, dijo su portavoz, Salvador Victoria¡ª contrastaba con la reacci¨®n de los trabajadores afectados. Alrededor de 400 se hab¨ªan concentrado ante la sede del Supremo despu¨¦s de una marcha de 19 kil¨®metros desde las instalaciones de Telemadrid, en la Ciudad de la Imagen (en la localidad de Pozuelo de Alarc¨®n) hasta el centro de la capital.
La protesta estuvo organizada por los comit¨¦s de empresa del ente y las secciones sindicales de UGT, CC OO y CGT. Pasado el mediod¨ªa se apostaron en la sede del Tribunal Supremo al grito de ¡°?S¨ª se puede!¡± y ¡°?Queremos salir en Telemadrid!¡±. Al escuchar el fallo, todos enmudecieron, algunos sollozaron y otros expresaron su indignaci¨®n. ¡°?D¨®nde est¨¢ la justicia? ?Ladrones!¡±, exclamaron. La portavoz del comit¨¦ de empresa de Telemadrid, Teresa Garc¨ªa, mostr¨® su confianza en que el Gobierno auton¨®mico cambie en 2015 (a?o de elecciones municipales y auton¨®micas) y ¡°empiece otra etapa¡±. De momento, lo ¨²nico claro es que los 861 despedidos (en enero de 2013, cuando se present¨® el ERE, los afectados eran 829 de los 1.161 que integraban la plantilla) percibir¨¢n una indemnizaci¨®n de 45 d¨ªas por a?o trabajado con un tope de 42 mensualidades hasta febrero de 2012, y 33 d¨ªas y 24 mensualidades partir de esa fecha. Atendiendo a la reforma laboral, las indemnizaciones hab¨ªan sido de 20 d¨ªas por a?o trabajado con un tope de 12 mensualidades.
El PP amenaz¨® con clausurar el ente si el los despidos se declaraban nulos
La declaraci¨®n de improcedente era el escenario esperado en la Comunidad de Madrid, que ya ha destinado 26 millones al ERE de Telemadrid. Era tambi¨¦n la soluci¨®n deseada por el PP madrile?o, que tras un a?o de protestas podr¨¢ dar por zanjado el principal conflicto social que mantiene abierto. De haber sido declarado nulo, la Comunidad cerrar¨ªa la televisi¨®n p¨²blica, al no estar dispuesta a readmitir a los despedidos. Un escenario que hubiera dejado a Gonz¨¢lez en una situaci¨®n tan inc¨®moda como la que ha experimentado el presidente valenciano, Alberto Fabra, tras ordenar el cierre de Canal 9.
Tanto los sindicatos como los partidos de la oposici¨®n criticaron la situaci¨®n a la que ha llegado el ente p¨²blico. ¡°Queda demostrado que Ignacio Gonz¨¢lez ha utilizado pol¨ªticamente a Telemadrid¡±, reproch¨® Miguel Aguado, diputado socialista en la Asamblea de Madrid. ¡°La Comunidad ha destrozado con su gesti¨®n a la televisi¨®n p¨²blica madrile?a y causado un da?o tremendo a m¨¢s de 800 familias. Es un resultado p¨¦simo, producto de una mala gesti¨®n y de intereses ocultos¡±, expres¨® Aguado.
¡°La justicia ha venido a respaldar la propuesta pol¨ªtica de saqueo de Ignacio Gonz¨¢lez y del PP utilizando los dineros p¨²blicos para dejar a los trabajadores en la calle y seguir manteniendo el Bolet¨ªn Oficial del PP, que es en lo que han convertido Telemadrid¡±, a?adi¨® Libertad Mart¨ªnez, diputada regional de Izquierda Unida. ¡°En 2015 recuperaremos Telemadrid con su plantilla¡±, apostill¨®.
Decepci¨®n entre los trabajadores, que aspiraban a recuperar el empleo
Roberto Tornamira, secretario general de UGT-Madrid, valor¨® la decisi¨®n del Supremo como una sentencia ¡°que no es justa¡±. ¡°Lo justo habr¨ªa sido recuperar a los trabajadores despedidos para levantar Telemadrid. Pensando en lo poco positivo que tiene la sentencia, Telemadrid seguir¨¢ abierta con los 300 empleados con los que cuenta actualmente¡±, dijo. Desde CC OO, Cristina Bermejo consider¨® que el fallo da la raz¨®n a los trabajadores y es un ¡°varapalo¡± al presidente madrile?o. En su opini¨®n, RTVM puede ser viable econ¨®micamente ¡°si se gestiona con independencia de los intereses pol¨ªticos¡±.
La jibarizaci¨®n de los entes auton¨®micos
El PP ha llevado a Telemadrid a la quiebra t¨¦cnica. Durante a?os, la compa?¨ªa recurri¨® al endeudamiento para cuadrar sus ejercicios. Pero la crisis empuj¨® a las entidades financieras a hacer efectivos los vencimientos. A mediados de 2012 la situaci¨®n alcanz¨® un nivel cr¨ªtico. Necesitaba con urgencia 88 millones de euros para financiarse y los bancos espa?oles y extranjeros le negaron el cr¨¦dito.
Tras los avisos de la Comunidad, Telemadrid recort¨® su presupuesto. De 131 millones de euros en 2012 pas¨® a 84,5 al a?o siguiente. Necesitaba adelgazar la plantilla. Pas¨® de tener 1.160 empleados a 300. El proceso de jibarizaci¨®n estaba en marcha.
El ERE ha dejado una televisi¨®n p¨²blica bajo m¨ªnimos, con una programaci¨®n donde solo se producen los informativos y el resto de la parrilla se sustenta en espacios de ficci¨®n (series y pel¨ªculas) comprados a trav¨¦s de la Forta (el organismo que agrupa a las auton¨®micas) y en la repetici¨®n de buena parte de los formatos que hicieron de Telemadrid una cadena innovadora.
Uno de los primeros efectos del ERE ha sido el desplome de la audiencia, aunque en los ¨²ltimos meses Telemadrid se ha recuperado ligeramente. En 2013 tuvo una cuota de pantalla del 3,8%, muy por debajo de la media de las auton¨®micas (8,7%). Los entes regionales no solo han perdido seguidores; tambi¨¦n han menguado sus ingresos publicitarios. En 2013, la consultora InfoAdex les atribuy¨® una facturaci¨®n de 120 millones de euros, un 7% del total de la inversi¨®n que se movi¨® en el medio televisivo, que ascendi¨® a 1.700 millones.
Todos los entes se han ajustado el cintur¨®n. Algunos, como el murciano, se mantienen en el aire casi de milagro, sin apenas presupuesto ni plantilla y con una d¨¦bil programaci¨®n. Otros, como los de Baleares, Andaluc¨ªa o Catalu?a, han cerrado canales para ahorrar gastos, se han desprendido de derechos de alto coste y han adelgazado la partida de personal.
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