¡°No hay distinci¨®n profunda entre las novelas er¨®ticas y las infantiles¡±

¡°A los ni?os les gusta imaginar que Caperucita acaba en la cama con el lobo¡±, coment¨® este martes Vicente Mu?oz Puelles. El escritor valenciano citaba a Djuna Barnes, autora del cl¨¢sico El bosque de la noche, para ilustrar su planteamiento a la hora de escribir. ¡°No hay una distinci¨®n profunda entre las novelas er¨®ticas y las infantiles¡±, sostuvo a ra¨ªz de la presentaci¨®n en Valencia ante los medios de su libro La voz del ¨¢rbol, que ha ganado el XI Premio Anaya de Literatura Infantil Juvenil.

?l ha escrito para todas las franjas de edad, desde los cuatro a?os hasta los adultos. Y ha recibido galardones tanto de literatura er¨®tica (Sonrisa Vertical por Anacaona), como el Nacional de Literatura Infantil (por ?scar y el le¨®n de Correos).

¡°La literatura infantil es muy sensual. Bueno, para los ni?os no es sensualidad es misterio. El ni?o adivina pero no sabe, tal vez lo presiente. Cuando los ni?os se pelean con las ni?as lo desconocen, pero tienen deseo de estar con ellas. Es muy bonito¡±, apunta Mu?oz Puelles, mientras, a su lado, otro reputado escritor de literatura infantil y juvenil Carles Cano asiente y recuerda que en la versi¨®n de Perrault de Caperucita, en la que el cuento acaba con la ni?a en las fauces del lobo, sin cazador ni le?ador que la salve.

Ahora Mu?oz Puelles se ha metido en la piel de una ni?a para narrar la historia de una familia que vive en el campo, rodeada de animales, y descubre una caba?a en un ¨¢rbol en la que van apareciendo libros de manera misteriosa. Es una s¨ªntesis de la trama de La voz del ¨¢rbol, editada con ilustraciones de Adolfo Serra.

El autor, de 63 a?os, ha convertido en literatura su ¡°a?oranza¡± infantil de los animales. Cuando era ni?o, viv¨ªa en pleno centro de Valencia y los ¨²nicos con los que conviv¨ªa eran los patos de la fuente de la plaza de San Vicente Ferrer (conocida popularmente como la plaza de los patos) o el le¨®n que orlaba el buz¨®n de Correos. Muchos a?os despu¨¦s, se traslad¨® con su familia a vivir a El Vedat de Torrent, donde su casa empez¨® a llenarse a animales ¡ª¡°de repente llegaba un b¨²ho¡±, relat¨®¡ª y donde sus hijos descubrieron una caba?a...

El escritor valenciano relata la vida de una familia rodeada de animales

La realidad, filtrada por los recuerdos, se entreteje con la ficci¨®n en el ¨²ltimo libro de Mu?oz Puelles, con el que ha vuelto a obtener el premio Anaya (tras El arca y yo) por segunda vez el premio Anaya. Tambi¨¦n la literatura desempe?a un papel fundamental en la trama. El primer libro que encuentra la protagonista, Virginia, en su refugio es Orlando, de Virginia Woolf.

No en vano, el libro se abre con una cita de la obra de la escritora brit¨¢nica: ¡°Hab¨ªa estado recluido tanto tiempo, escribiendo y leyendo, que casi hab¨ªa olvidado los encantos de la naturaleza, que en junio pueden ser grandes¡±.

Son los componentes de su libro, como explica el propio Mu?oz Puelles: ¡°En La voz del ¨¢rbol se juntan algunos de los temas que m¨¢s me interesan: la infancia, la naturaleza y los libros. Creo que los ni?os necesitan de la naturaleza, porque son parte de ella y no deber¨ªan abandonarla nunca. En cuanto a los libros, pienso lo que dec¨ªa Graham Greene: que solo durante la infancia los libros pueden ejercer en nosotros una influencia realmente profunda (...)¡±.

La vida es materia de la literatura, como lo podr¨ªa ser tambi¨¦n las satisfacciones y tribulaciones en el seno del Consell Valenci¨¤ de Cultura (CVC), del que Mu?oz Puelles es miembro. ¡°Si fuera Dickens, el Consell de Cultura ser¨ªa una fuente inagotable de inspiraci¨®n¡±, bromea el escritor, que naci¨® en la casa donde vivi¨® seis a?os escondido en un doble fondo su t¨ªo, Ricardo Mu?oz Suay, tras la Guerra Civil. El portero avisaba cuando la polic¨ªa acechaba. Pero esa es otra historia.