La privatizaci¨®n en los centros educativos salta por los aires
La Inspecci¨®n de Trabajo y la justicia desmontan el sistema de subcontrataci¨®n de administrativos Los sindicatos alertan de que hay m¨¢s casos de cesi¨®n ilegal de empleados
Est¨¢n en la parte m¨¢s d¨¦bil del sistema educativo andaluz. Tienen las peores condiciones laborales, con sueldos que rondan los cuatro euros a la hora. No son funcionarios ni interinos ni personal laboral. Los llamados monitores educativos dependen de empresas privadas a las que la Administraci¨®n subcontrata algunos servicios. Pero trabajan a las ¨®rdenes del director de cada centro educativo en labores estructurales como la gesti¨®n administrativa, el apoyo de los alumnos con necesidades especiales o como int¨¦rpretes de lenguaje de signos.
Este colectivo estaba formado por algo menos de 2.000 personas hasta el a?o pasado, seg¨²n los c¨¢lculos del sindicato CC OO. El Ente P¨²blico Andaluz de Infraestructuras y Servicios Educativos (ISE), a trav¨¦s del que la Junta realiza las subcontrataciones, gast¨® el curso pasado 14,8 millones de euros en estos monitores.
Pero este sistema de privatizaci¨®n de servicios educativos ideado por la Consejer¨ªa de Educaci¨®n a mediados de la d¨¦cada pasada ha saltado por los aires. La Inspecci¨®n de Trabajo, dependiente del Ministerio de Empleo, y la justicia consideran que tras este modelo de subcontrataci¨®n se esconde una cesi¨®n ilegal de mano de obra. Los ¨²ltimos pronunciamientos se refieren al colectivo de monitores de apoyo administrativo de los colegios andaluces.
840 monitores se encargaban de reducir la carga burocr¨¢tica de los colegios hasta finales del curso pasado. La Administraci¨®n comenz¨® a subcontratar estos servicios en 2006, pero no fue hasta 2012 cuando surgieron los problemas. Varios de estos trabajadores de las provincias de C¨®rdoba y C¨¢diz decidieron denunciar su situaci¨®n y los impagos que sufr¨ªan ante la Inspecci¨®n de Trabajo. Este servicio concluy¨® en 2013 que se estaba incurriendo en la cesi¨®n fraudulenta de empleados. Es decir, que las empresas beneficiarias de los concursos abiertos para hacerse cargo de los servicios administrativos se limitaban a asumir solo las n¨®minas de los monitores, algo fraudulento.
¡°La hora no llegaba a cuatro euros¡±
Javier Fern¨¢ndez (39 a?os) fue contratado en mayo de 2006 como monitor administrativo escolar. El sueldo mensual: 277 euros por 16 horas a la semana (ocho en cada uno de los dos centros de Ja¨¦n que le fue asignado). ¡°En aquellos a?os, nadie quer¨ªa trabajar por tan poco dinero. Imag¨ªnate, yo fui el s¨¦ptimo al que llamaron¡±, precisa Fern¨¢ndez, uno de los 840 monitores cuyos contratos no han sido renovados por la Junta de Andaluc¨ªa. ¡°El sueldo era una miseria, la hora no llegaba a cuatro euros¡±, apunta Conchi Melero (53 a?os), otra de las afectadas y quien cobraba casi 400 euros al mes por 25 horas a la semana.
Ante estas condiciones laborales, la ¨²nica v¨ªa para llegar a fin de mes era sumar trabajos. ¡°Compaginaba las tareas administrativas con las de monitor en el aula matinal y vigilante en el comedor y durante las horas extraescolares. Llegu¨¦ a cobrar unos 900 euros¡±, explica Fern¨¢ndez, casado y con cuatro hijos. ¡°Ahora cobro 248 euros de desempleo y estoy a punto de que me desahucien¡±, afirma. Al igual que Fern¨¢ndez, Patricia Garc¨ªa (38 a?os) tambi¨¦n opt¨® por acaparar estas tareas. ¡°Llegaba al colegio a las 7.30 y volv¨ªa a casa a las 18.00. Se pod¨ªa decir que viv¨ªa all¨ª¡±, explica Garc¨ªa, quien conserva su trabajo como monitora en el comedor de un colegio de Sevilla.
Los sueldos de estos empleados, aseguran tanto Melero como Fern¨¢ndez, distaban ¡°con creces¡± de su carga de trabajo. ¡°Nosotros ¨¦ramos los que cada curso pon¨ªamos en marcha el colegio, pero eso no se ha valorado¡±, precisa Melero, quien tambi¨¦n ten¨ªa asignado dos centros, en su caso, en Sevilla. ¡°Ni eso, ni las horas extra que ten¨ªas que echar si quer¨ªas llevar todos los papeles al d¨ªa¡±, agrega. ¡°Los monitores ¨¦ramos el chico o la chica para todo¡±, apunta Fern¨¢ndez. ¡°Es verdad que la palabra esclavitud es muy fuerte, pero viendo nuestras condiciones, no est¨¢ mal usada¡±, explica Melero en alusi¨®n a la ¨²ltima sentencia de un juzgado de C¨®rdoba.
La Consejer¨ªa de Educaci¨®n decidi¨® entonces cambiar el modelo de contrataci¨®n y suprimir las intermediarias. La Administraci¨®n argument¨® que no quer¨ªa renovar los contratos con ¡°empresas que explotan a los trabajadores¡±. La Junta decidi¨® contratar a los empleados de apoyo administrativo este curso con una oferta de trabajo a trav¨¦s del Servicio Andaluz de Empleo. A los seleccionados se les contrat¨® como personal laboral. Pero ninguno de los 840 monitores que hasta el a?o pasado prestaban este servicio a trav¨¦s de las subcontratas ha conseguido una plaza, ya que se exig¨ªan unas titulaciones que casi ninguno ten¨ªa.
Los monitores han protestado en las calles y han llevado su lucha a los tribunales. Y dos juzgados de C¨®rdoba han confirmado la semana pasada que existe esa cesi¨®n ilegal y que 16 antiguos monitores fueron despedidos de forma improcedente, por lo que deben ser readmitidos o indemnizados. ¡°Lo que nos hubiese gustado es que se declarara el despido nulo¡±, apunta Virginia V¨¢zquez, una de las portavoces de la plataforma de monitores administrativos. Porque entonces no habr¨ªa dudas sobre qu¨¦ pasos dar¨ªa la Administraci¨®n. Los afectados conf¨ªan en que la consejer¨ªa, tras las sentencias, termine contrat¨¢ndolos de nuevo. Pero a¨²n no est¨¢ tomada la decisi¨®n. Se espera para esta semana.
Los sindicatos creen que el problema con las cesiones ilegales de mano de obra no terminar¨¢ aqu¨ª. Jos¨¦ Blanco, responsable del ¨¢rea de ense?anza en Andaluc¨ªa de CC OO, apunta tambi¨¦n al colectivo de monitores de educaci¨®n especial y al de lenguaje de signos, unos 1.100 trabajadores que tambi¨¦n dependen de subcontratas. ¡°La cesi¨®n ilegal es m¨¢s clara en el caso de los trabajadores de apoyo. Est¨¢n dentro del horario lectivo, en las aulas y conviven con otros trabajadores que realizan las mismas funciones pero contratados por la Administraci¨®n¡±, sostiene Blanco. Rafael Fenoy, responsable de ense?anza de CGT, tambi¨¦n opina que el caso de estos otros monitores ¡°es muy parecido¡±. ¡°Seguro que es una cesi¨®n ilegal¡±. Fenoy critica la actitud de la consejer¨ªa: ¡°Una cosa es que puntualmente se recurra a una ETT [Empresa de Trabajo Temporal] y otra que se haga sistem¨¢ticamente para labores estructurales¡±.
Pero la Consejer¨ªa de Educaci¨®n rechaza la interpretaci¨®n que hacen los sindicatos. ¡°Los contratos son con empresas especializadas, sus funciones est¨¢n determinadas con precisi¨®n y sin confusi¨®n posible alguna y las empresas contratistas gozan de la organizaci¨®n precisa para la labor encomendada¡±, apuntan fuentes del departamento de Luciano Alonso.
La situaci¨®n de los monitores que trabajan como int¨¦rpretes de lenguaje de signos fue denunciada tambi¨¦n ante la Inspecci¨®n de Trabajo en 2012. Y este servicio concluy¨® que se trataba de una cesi¨®n ilegal de mano de obra. Pero el recorrido judicial ha sido diferente. Dos de estas trabajadoras denunciaron su caso ante la justicia en Granada. Y el Tribunal Superior de Justicia de Andaluc¨ªa entendi¨® que no se trataba de una cesi¨®n fraudulenta de empleados, al contrario de lo que hab¨ªa establecido la Inspecci¨®n de Trabajo.
La Consejer¨ªa de Educaci¨®n sostiene que los pronunciamientos judiciales refrendan su posici¨®n y la legalidad de las subcontrataciones de monitores de educaci¨®n especial y de lenguaje de signos. Por eso, no hay intenci¨®n de cambiar este pol¨¦mico sistema.
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