Cumplea?os de deterioro
Las Administraciones, incapaces de solucionar las deficiencias del Albaic¨ªn 20 a?os despues de ser nombrado Patrimonio Mundial
El barrio del Albaic¨ªn, en Granada, cumple 20 a?os desde que fue declarado por la Unesco Patrimonio Mundial y tiene que rendir cuentas. No lo hace solo, puesto que la declaraci¨®n es conjunta con la Alhambra a la que se le otorg¨® ese reconocimiento 10 a?os antes. Aunque el informe sea coordinado por la comunidad aut¨®noma la situaci¨®n es bien distinta a uno y otro lado del Valle del Darro. La Alhambra puede presumir, en muchos aspectos, de su gesti¨®n. El barrio morisco, por el contrario, tiene numerosas deficiencias.
La evoluci¨®n de cada uno de los enclaves desde que obtuvo el reconocimiento mundial ha sido muy diferente, aunque tambi¨¦n hay que precisar que la complejidad es mayor para acordar acciones en el Albaic¨ªn. Con motivo del aniversario, PSOE e IU llevan meses advirtiendo de la posible puesta en ¡°riesgo¡± de la declaraci¨®n del barrio como Patrimonio Mundial y piden al Gobierno central y al Ayuntamiento de la ciudad, ambos del PP, que garanticen las exigencias de protecci¨®n acordadas por la Unesco ante el ¡°grave deterioro¡± que sufre.
Los sonidos del barrio
Con motivo de la reciente celebraci¨®n del D¨ªa Mundial contra el Ruido, el Ayuntamiento de la ciudad y la Universidad de Granada han presentado el proyecto ¡®Itinerarios sonoros por el Albaic¨ªn¡¯, que contiene cinco rutas a pie para escuchar los sonidos propios del barrio morisco. El murmullo del agua, las campanas de las iglesias o el canto del muec¨ªn llamando a la oraci¨®n desde la Mezquita Mayor son algunos de los sonidos propios del enclave.
En total, el proyecto recoge 53 puntos de observaci¨®n ac¨²stica que pueden encontrarse en la web del Ayuntamiento donde se acompa?an de una breve explicaci¨®n y de im¨¢genes con el lugar concreto, as¨ª como el horario recomendado para acudir. El objetivo es apreciar el Albaic¨ªn desde una perspectiva diferente.
Las rutas son ¡®Sonidos del Darro¡¯, ¡®Sonidos de la ciudad desde el Albaic¨ªn¡¯, ¡®Sonidos de la cotidianidad¡¯, ¡®Sonidos para los encuentros¡¯ y ¡®Sonidos de las Placetas¡¯. Se han editado mil folletos explicativos de cada ruta. El proyecto ha sido desarrollado por el departamento de F¨ªsica Aplicada de la UGR.
En el barrio hay lugares silenciosos que permiten escuchar los sonidos que no se suelen percibir por el ruido de las ciudades. De ah¨ª, destacan los promotores, la utilidad de este proyecto.
Lo que ocurre es que su delicado estado no es nuevo. Hace diez a?os que ya se pusieron sobre la mesa las preocupaciones de los vecinos, si es que no hace m¨¢s tiempo, y desde entonces poco se ha avanzado. A la advertencia socialista sobre ese riesgo --en la que se hizo especial hincapi¨¦ tras anunciar el Ayuntamiento el archivo del plan especial que debe regir el futuro del barrio-- el alcalde de la ciudad, Jos¨¦ Torres Hurtado (PP), neg¨® que peligre la declaraci¨®n. Y adem¨¢s acus¨® a la Junta de Andaluc¨ªa de ser la culpable del estado en que se encuentra.
Echar balones fuera es lo que llevan haciendo a?os las tres Administraciones en lo que respecta al barrio. As¨ª lo ven desde luego los vecinos que son los que sufren las deficiencias de la zona que no tiene un plan claro de futuro. Ahora, a trav¨¦s de la Agencia Albaic¨ªn, que depende del ¨¢rea de Turismo del Ayuntamiento de Granada, se ha de elaborar una especie de memoria que contenga las actuaciones llevadas a cabo en los ¨²ltimos diez a?os y el estado de conservaci¨®n del barrio. Debe estar finalizado antes de verano, pero sobre su elaboraci¨®n, ni la Agencia Albaic¨ªn ni la concejal de Turismo, Roc¨ªo D¨ªaz, quisieron hacer declaraciones por ser un informe conjunto.
La despoblaci¨®n, la falta de servicios, la suciedad, las pintadas, el abandono de viviendas o el cableado son algunos de los problemas que presenta el Albaic¨ªn a simple vista y que cientos de turistas pueden comprobar a diario, lamenta el portavoz de IU, Paco Puentedura. Pese a todo, no se tiene constancia de una advertencia seria por parte de Patrimonio. Los vecinos son los que m¨¢s veces levantan la voz y as¨ª, la asociaci¨®n del Bajo Albaic¨ªn, tiene documentado el desarrollo de las actuaciones en el barrio y tambi¨¦n sus deficiencias. No descartan presentar esa informaci¨®n para que se les tenga en cuenta, aunque lo que ellos reclaman, una y otra vez, es que las Administraciones fijen criterios de actuaci¨®n conjuntos que consensuen con ellos, que son los que al fin y al cabo le dan vida.
En su d¨ªa la declaraci¨®n supuso un impulso pero el abandono, especialmente en los ¨²ltimos a?os, ha llevado a los vecinos a reclamar sus servicios y habitabilidad. ¡°El Albaic¨ªn no es un parque tem¨¢tico¡± y, adem¨¢s del turismo, tiene que estar acondicionado para vivir, lamentan.
Los pol¨ªticos, seg¨²n el signo, reclaman a la Administraci¨®n que no dirigen su implicaci¨®n. La ¨²ltima propuesta municipal fue subir dos euros las entradas a la Alhambra para con ese dinero financiar la mejora y rehabilitaci¨®n del barrio morisco, algo que consideran ¡°de justicia¡± en el PP para que se revierta en este enclave los beneficios del monumento. La direcci¨®n del Patronato de la Alhambra replic¨® que esa subida no era viable puesto que no la permiten los estatutos.
La falta de acuerdo entre las Administraciones se vuelve a repetir. Pero antes de buscar el dinero, m¨¢s escaso para inversiones desde que estall¨® la crisis, deber¨ªan, entienden distintos colectivos, plantear qu¨¦ plan de actuaci¨®n hay que seguir. El documento por el que se rige es de 1990 y se plante¨® para ocho a?os. Pues bien, ni ese se cumple, y es con modificaciones puntuales como, a juicio de IU, se dan ¡°bocados¡± a la protecci¨®n del patrimonio. En 2009, Cultura de la Junta y el Centro Unesco Andaluc¨ªa crearon un informe con los principales problemas y, hoy por hoy, tiene vigencia total. De nuevo, poco se ha avanzado.
Los vecinos reclaman a la Junta un "diagn¨®stico desde la base"
El vicepresidente de la Junta de Andaluc¨ªa y consejero de Administraci¨®n Local, Diego Valderas, se reuni¨® este viernes con los vecinos del Albaic¨ªn y Sacromonte. Durante hora y media le expusieron con detalle sus problemas y reclamaron la necesidad de elaborar un ¡°diagn¨®stico desde la base¡±.
La falta de una visi¨®n de conjunto, de un modelo tur¨ªstico ¡°respetuoso¡± con la singularidad del barrio y la verdadera rehabilitaci¨®n que no llega son algunas de las cuestiones que plantearon al vicepresidente un grupo de vecinos que volvi¨® a llamar a la puerta de la Administraci¨®n por este asunto.
Adem¨¢s de los concejales de IU en el Ayuntamiento, Paco Puentedura y Maite Molina, asisti¨® el delegado de Fomento, Manuel Morales. Sobre la mesa est¨¢ la intenci¨®n de hacer ese diagn¨®stico, explic¨® Morales, por lo que en un mes volver¨¢n a verse las caras para, tras esta toma de contacto, iniciar una serie de acciones que permitan trabajar por el barrio.
¡°Hay que hacer las cosas de dentro hacia fuera y no al contrario¡±, explicaron algunos vecinos presentes en la reuni¨®n. El deteriorado estado de las murallas, la problem¨¢tica del cerro de San Miguel o la situaci¨®n de dejadez de un lugar tan caracter¨ªstico como el Sacromonte coparon parte del encuentro.
Las contradicciones que sufre el Albaic¨ªn est¨¢n, por tanto, sobre la mesa. La posibilidad de organizar unas jornadas o seminario que aborde en profundidad la problem¨¢tica tambi¨¦n. ¡°Lo que falta es un modelo coherente de lo que de verdad se quiere¡±, lamentan los vecinos que no sienten, por las carencias, los privilegios de vivir en una zona declarada por la Unesco Patrimonio Mundial.
Tras esta reuni¨®n hay cierta ¡°esperanza¡± de los residentes en iniciar un camino que devuelva al Albaic¨ªn al lugar que le corresponde. Trabajar con una visi¨®n de conjunto entre Albaic¨ªn-Sacromonte-Alhambra es el reto al que se enfrentan.
Tras el desarrollo del flamenco, el barrio de cuevas est¨¢ tambi¨¦n en decadencia y aunque el Ayuntamiento plante¨® un plan especial que inclu¨ªa al Sacromonte, su paralizaci¨®n fue un varapalo para la zona, que ve como incluso se potencia el turismo de cuevas en otras comarcas y ellos se quedan al margen.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.