Entre pillos
Es dif¨ªcil pensar que un pa¨ªs decente puede seguir haciendo caso omiso a esta pestilencia
Hemos estados tan distra¨ªdos con la llegada del nuevo Rey, que ha pasado casi desapercibido un importante acontecimiento. La entrada, en el parque tem¨¢tico de la corrupci¨®n, del Tribunal de Cuentas. En este ¨®rgano, encargado de fiscalizar y sancionar a los partidos pol¨ªticos y administraciones por el desv¨ªo de dinero p¨²blico, tambi¨¦n se entra por enchufe. Consejeros, auditores y letrados forman una gran familia, en la que se incluyen hermanos, esposas y parientes cercanos. Todos en la armon¨ªa de un empleo bien remunerado.
Y no digo que no se merezcan el sueldo, ya que la labor que desarrollan es esencial para la democracia. Son los encargados de descubrir los tejemanejes de los pol¨ªticos, aunque sea justo en el momento en el que los tejemanejes ya han prescrito. Todo no pod¨ªa ser perfecto y alg¨²n fallo deb¨ªa tener un sistema que consiste en que unos partidos eligen a los miembros de un ¨®rgano encargado de vigilar las cuentas de sus propios partidos.
Con la incorporaci¨®n del Tribunal de Cuentas, apenas nos quedan instituciones donde no se haya colado esta sonrojante epidemia de corruptelas varias. Desde el entorno de la Monarqu¨ªa hasta los dos grandes partidos; desde la Confederaci¨®n de Empresarios hasta las centrales sindicales; sin olvidarnos de las cajas de ahorro o la banca; y concluyendo con las semanas tropicales del antiguo presidente del Consejo General del Poder Judicial, o con la melopea de un miembro del Tribunal Constitucional. En Espa?a, se ha democratizado mucho el sinvergonzoner¨ªo y tenemos, como m¨ªnimo, un alto representante en todas las grandes instituciones p¨²blicas.
Nuestros dirigentes pol¨ªticos pueden seguir diciendo que se trata de casos aislados. Y que la vergonzante actitud de unos pocos no puede empa?ar el trabajo diario de tantos servidores de conducta intachable. Lo que pasa es que, para tratarse de casos aislados, empiezan cada vez a estar menos aislados entre ellos. Y el listado abruma: N¨®os, Baltar, B¨¢rcenas, Brugal, G¨¹rtell, Astapa, AVE, Campe¨®n, ERE, Bankia, Troya, Palma-Arena, Pok¨¦mon, Malaya, Poniente, MercaSevilla, Fabra, Camisetas, Emarsa¡ Y un largo etc¨¦tera, con los cursos de formaci¨®n como producto estrella del mangoneo desde hace varias d¨¦cadas.
Es dif¨ªcil pensar que un pa¨ªs decente puede seguir haciendo caso omiso a esta pestilencia diaria. Hace poco, Hacienda acredit¨® que la sede del partido que sustenta al Gobierno se pag¨® con dinero negro, mientras en el Ayuntamiento de Santiago se bat¨ªa el record nacional de renuncias por corrupci¨®n en un mismo d¨ªa. Despu¨¦s hemos tenido esc¨¢ndalos en el FREMAP y hasta dinero negro en los cad¨¢veres donados a la Universidad. Una pena, que con esta acumulaci¨®n de casos, la incorporaci¨®n del Tribunal de Cuentas a este particular parque tem¨¢tico de la piller¨ªa no tuviera el boato que merec¨ªa un acontecimiento de tal relevancia. [PIEPAG]
@jmatencia[/PIEPAG]
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