Los sindicatos solo consens¨²an en planta
ELA, CC OO, LAB y UGT no han sellado un convenio sectorial juntos este a?o
Los espacios para el consenso entre los agentes sociales se est¨¢n acercando al cero. Si ya era dif¨ªcil cuando la normativa laboral favorec¨ªa el mantenimiento de las condiciones laborales, es decir, antes del siete de julio del pasado a?o fecha a partir de la cual decayeron los convenios sectoriales con m¨¢s de un a?o de vigencia sin renovar en aplicaci¨®n de la ¨²ltima reforma laboral, ahora ya empieza a ser ex¨®tico. En plenas elecciones sindicales que est¨¢n elevando el perfil de cada organizaci¨®n, y con un panorama laboral endiablado, que se resuelve m¨¢s en los tribunales que en cualquier otro marco, y adem¨¢s se hace con criterios dispares, el ¨²nico lugar de encuentro ¡ªtambi¨¦n de m¨¢ximo desencuentro¡ª se est¨¢ llevando a las plantas de producci¨®n. Frente a un escenario en el que las condiciones de la mayor¨ªa de los trabajadores ten¨ªan un suelo estable a trav¨¦s de los convenios provinciales, se ha pasado a un extremo en el que aunque se pactan algunos, la firma de los cuatro sindicatos ya no figura en ellos.
El sectorial est¨¢
En lo que va de 2014, ELA, CC OO, LAB y UGT no han firmado juntos ni un s¨®lo convenio sectorial, frente a los siete que rubricaron unidos en 2013. 2014 avanza con pocos convenios sectoriales firmados, confirmando la agon¨ªa de ese ¨¢mbito, pero ninguno ha logrado concitar el acuerdo de las cuatro centrales m¨¢s representativas, pese a que la pasada semana estuvo a punto de producirse el primero, en el textil de ?lava, donde al final firmaron ELA, CC OO y UGT, pero LAB se desmarc¨® en el ¨²ltimo momento. La estrategia sindical que defiende el nacionalista ELA, que prefiere resolver las negociaciones en el seno de la empresa ¡ªcomo una manera de ganar afiliados y fortalecer su organizaci¨®n¡ª ha resultado beneficiada por una reforma laboral que otorga a ese ¨¢mbito una mayor fortaleza. Dinamitados los puentes en el ¨¢mbito que proporciona un suelo de condiciones a los trabajadores de la pymes, rotos los lazos en los organismos de di¨¢logo social, y recientemente finiquitada la complicidad en el Consejo de Relaciones Laborales, donde la espantada de ELA ha evitado la firma de nuevo Procedimiento de Resoluci¨®n de Conflictos, (Preco), las empresas se han convertido en el ¨²nico lugar donde las cuatro fuerzas sociales m¨¢s potentes se ponen de acuerdo y con cuentagotas.
Alguna estrategia sindical ha sido beneficiada por la reforma
Dos de los pactos m¨¢s significativos en ese ¨¢mbito por el n¨²mero de trabajadores afectados y por las consecuencias que puede generar en sus ¨¢reas de influencia son los de Tubacex y CAF. Aunque los convenios de empresa no tienen la capacidad tractora de los sectoriales en la provincia, en esos dos casos el hecho de que ELA, LAB, CC OO y UGT hayan puesto su firma proporciona una estabilidad extra a unas plantillas directas e indirectas que tambi¨¦n est¨¢n atravesando incertidumbres. Este escenario se consolida. El sectorial est¨¢ pr¨¢cticamente desahuciado. Tubacex sal¨ªa de una fuerte pol¨¦mica por la decisi¨®n de la empresa de invertir el pasado a?o en Cantabria tras criticar con dureza sus dirigentes los elevados costes laborales. Su presidente, ?lvaro Videgain, aprovech¨® la pol¨¦mica para reclamar un cambio en la rigidez del modelo laboral y cierta moderaci¨®n salarial, debido a que los costes laborales en sus plantas vascas superaban ya en 2013 en un 15% y en 35% las de sus f¨¢bricas en Austria y Estados Unidos, respectivamente.
Tubacex consolida
El convenio un¨¢nime contempla subidas salariales equivalentes al IPC para los a?os 2013, 2014 y 2015 y del IPC m¨¢s un 0,5% para 2016. Pero sobre todo avanza en un nuevo modelo de organizaci¨®n de la empresa, la creaci¨®n de ¡°c¨¦lulas¡± que est¨¢n llamadas a revolucionar el sistema de producci¨®n. Se trata de evolucionar desde un modelo basado en puestos de trabajo est¨¢ticos a otro basado en empleados polivalentes, con competencias m¨²ltiples, y trabajando en equipo. La compa?¨ªa se comprometi¨® a invertir 25 millones de euros en las plantas de Llodio y Amurrio entre el presente a?o y 2016 y a crear empleo fijo, as¨ª como a mantener los contratos de relevo y la jornada laboral. La mayor empresa industrial de Gipuzkoa, CAF tambi¨¦n atravesaba algunos momentos de incertidumbre. A finales de 2012 la direcci¨®n de la ferroviaria dej¨® sin efecto el ERE de suspensi¨®n que afectaba a 869 trabajadores de su planta de Beasain ante el problema de falta de ocupaci¨®n de esa planta y empez¨® la negociaci¨®n del convenio.
CAF ha logrado
El texto, que tendr¨¢ vigencia hasta 2015 blinda las condiciones por otros dos ejercicios ¡ªpuenteando de esa manera la reforma laboral que s¨®lo ofrece un a?o de ultraactividad¡ª para el caso de que no se llegue a un acuerdo sobre su renovaci¨®n. Adem¨¢s, por vez primera y para proteger su articulado han abandonado la f¨®rmula de pacto de empresa para firmar un convenio colectivo, figura que refuerza las garant¨ªas jur¨ªdicas del texto ya que contiene art¨ªculos que van directamente en contra de determinadas medidas introducidas por las ¨²ltimas reformas laborales del Gobierno. Una de ellas es la obligatoriedad de un arbitraje para los supuestos en los que no haya acuerdo entre empresa y representantes de los trabajadores acerca de la inaplicaci¨®n del convenio ¡ªen el caso de que concurran causas t¨¦cnicas, organizativas, econ¨®micas, o de producci¨®n¡ª. De esta manera la empresa guipuzcoana est¨¢ en condiciones de puentear al Orprice, el ¨®rgano tripartito que ha puesto en marcha el Gobierno vasco para resolver ese tipo de casos y que los sindicatos rechazan.
En? Beasain
El articulado tambi¨¦n garantiza el nivel actual de empleo, impidiendo que la reforma laboral se cuele en forma de ERE u otro tipo de ajustes. Es decir, no habr¨¢ ning¨²n tipo de despidos durante la vigencia del convenio. Adem¨¢s sacraliza la contenci¨®n salarial. El texto contempla un incremento anual de los salarios equivalente al IPC que, en el caso del presente ejercicio, ser¨¢ del 0,6%, dos puntos porcentuales menos que en lo recogido en el pacto de empresa firmado para 2012 y 2013. Desde 2012 ha descendido el n¨²mero de contratos conseguidos debido en parte al descenso de inversiones de las administraciones p¨²blicas en infraestructuras ferroviarias y a que las grandes empresas mundiales est¨¢n ajustando de manera brutal los precios ante la fuerte competencia. Curiosamente se mantiene la jornada semanal de 35 horas. M¨¢s all¨¢ de la contenci¨®n salarial, que une a ambos, las condiciones restantes son radicalmente diferentes. CAF obtuvo en el primer trimestre del a?o un beneficio neto de 19,5 millones de euros, un 12,2 % menos que en el mismo periodo de 2013. Tubacex aument¨® su beneficio en un 59,8% en el primer trimestre del a?o, hasta los 5,6 millones de euros.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.