Jaque a los fondos de pensiones vascos
?Qu¨¦ hay de malo en que en Euskadi se pretenda generalizar las EPSV?
Izenik badu, bada es un antiguo aforismo en euskera, que puede traducirse al castellano como ¡°todo cuanto tiene nombre existe¡±. Pues bien, los fondos de pensiones propios de Euskadi existen y se llaman Entidades de Previsi¨®n Social Voluntaria (EPSV).?
No obstante, la reciente Sentencia del Constitucional, de 12 de junio de 2014, no reconoce dicha realidad y pone en jaque las EPSV vascas. Sin duda, un claro atentado contra el autogobierno vasco, pero, sobre todo, contra el bienestar de la ciudadan¨ªa vasca. Pero vayamos por partes.
Hablamos de jaque porque la sentencia del Constitucional declara inconstitucionales y nulos 9 art¨ªculos de la Ley 5/2012, de 23 de febrero, sobre las EPSV.
Ahora bien, hay que tener en cuenta que hablamos de la inconstitucionalidad y nulidad de 9 art¨ªculos de los 11 recurridos por el Gobierno de Espa?a. En efecto, al Gobierno espa?ol le bastaron apenas 9 meses desde la entrada en vigor de la nueva Ley de las EPSV para interponer un recurso de inconstitucionalidad. Y ahora, el Constitucional, avala los postulados del Gobierno espa?ol.
Este fallo es doblemente doloroso. Supone ¡°desmochar¡± una de las principales fortalezas a futuro del bienestar del pueblo vasco, y, al mismo tiempo, negar un claro ejemplo de actualizaci¨®n de sus derechos hist¨®ricos. Y es que los argumentos del Gobierno espa?ol y del Constitucional son m¨¢s que discutibles. Exist¨ªan otras posibilidades, sin salirse un ¨¢pice del bloque de constitucionalidad. Pero la actitud del Gobierno espa?ol al interponer el recurso de inconstitucionalidad demuestra su falta de voluntad y, lo que es peor, su desconfianza hacia algo que es bueno para todos.
?Qu¨¦ hay de malo en que en Euskadi se pretenda generalizar las EPSV entre su ciudadan¨ªa, fomentando especialmente los sistemas colectivos y de empleo, y que se pretenda, adem¨¢s, hacerlo reforzando la transparencia, la eficacia, la solvencia la innovaci¨®n y la profesionalidad de la gesti¨®n de las mismas, as¨ª como los mecanismos de tutela y control de los poderes p¨²blicos para proteger los intereses de los colectivos protegidos?
Precisamente es bueno extender las EPSV a toda la ciudadan¨ªa para complementar las pensiones p¨²blicas, ante la p¨¦rdida de sustituibilidad de las mismas respecto a las rentas de trabajo dejadas de percibir. Y la mejor v¨ªa para ello es fomentar las EPSV de empleo, especialmente las preferentes.
La tradici¨®n de nuestras EPSV, que, por cierto, es mayor que la de los fondos de pensiones espa?oles, permite que su patrimonio represente el 35% del PIB (cuadruplicando a Espa?a), aunque todav¨ªa se encuentre muy por debajo de los ¨ªndices de pa¨ªses como Holanda, Islandia o Suiza.
Es m¨¢s, la legalidad de las EPSV, sobre sus aspectos organizativos o estructurales, ha sido siempre avalada, desde que se regularon en 1983, por los tribunales, por actuaciones notariales y registrales, el Ministerio de Justicia y un largo etc¨¦tera de instituciones.
?Que impere el sentido com¨²n!
F. Javier Arrieta Idiakez (Profesor de Derecho del Trabajo y de la Seguridad Social). Universidad de Deusto
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.