El cerco judicial a un exalcalde del PP por contrabando y blanqueo se reactiva

La justicia ha reactivado el caso abierto hace ahora 13 a?os en un juzgado de Vilagarc¨ªa contra el entonces todopoderoso alcalde de Ribadumia Jos¨¦ Ram¨®n Barral, Nen¨¦, al que se le implic¨® con un alijo de 400.000 cajetillas y por el que tuvo que abandonar el cargo que hab¨ªa desempe?ado durante casi dos d¨¦cadas como uno de los bastiones electorales del PP. La fiscal¨ªa de Pontevedra encara la recta final de la causa m¨¢s antigua de los juzgados de Arousa, que llevaba ocho a?os atascada en los tribunales suizos. Convencida de que los delitos no han prescrito enfila ya el escrito de acusaci¨®n por contrabando, cohecho y revelaci¨®n de secretos contra Barral y otras 15 personas entre las que se encuentran varios familiares directos del expol¨ªtico, cuatro guardias civiles y dos agentes aduaneros.

El otro frente abierto contra Barral se instruye en Cambados por un presunto delito contra la hacienda p¨²blica y, posiblemente, otro de blanqueo de dinero despu¨¦s de que en 2009 el Servicio de Vigilancia Aduanera localizase en China y Chile inversiones por valor de m¨¢s de 1,6 millones de euros procedentes de una cuenta bancaria abierta en el para¨ªso fiscal de Islas V¨ªrgenes Brit¨¢nicas.

Mientras los recursos de la defensa del exalcalde siguen invocando la prescripci¨®n del delito de contrabando e intentado que ambas causas se unan en un solo procedimiento, la fiscal¨ªa ha renunciado a esperar la resoluci¨®n de los tribunales suizos ¡ªa los que Barral apel¨® para que sus buscados dep¨®sitos sigan bajo secreto bancario¡ª y no le acusar¨¢ del delito de blanqueo de dinero derivado del contrabando porque considera que en este caso s¨ª ha prescrito.

Pero antes de dar carpetazo a la parte econ¨®mica derivada de los presuntos negocios tabaqueros del imputado, tendr¨¢ que pronunciarse el abogado del Estado en un informe que en principio ser¨ªa favorable a la prescripci¨®n, seg¨²n indicaron fuentes judiciales, sobre todo para no entorpecer la otra causa paralela por delito fiscal donde se investigan incrementos patrimoniales no justificados entre 2006 y 2009 y que s¨ª puede derivar en un posible delito de lavado de capitales.

Aunque la fiscal¨ªa no tiene dudas de que Barral Mart¨ªnez dirig¨ªa una organizaci¨®n ¡°s¨®lida y muy sofisticada¡± de contrabando de tabaco, la evasi¨®n fiscal ha sido el principal escollo para la investigaci¨®n ante los obst¨¢culos que pusieron algunos pa¨ªses como Suiza para la identificaci¨®n de cuentas bancarias y que convirtieron este proceso en una aut¨¦ntico atolladero judicial. Tampoco se han obtenido resultados en Holanda, donde se abri¨® otra investigaci¨®n paralela a la del contrabando y que acab¨® archivada al fallecer el principal imputado y presunto socio del entonces alcalde en Espa?a. El primer instructor de la causa (que ya ha pasado por la supervisi¨®n de tres jueces y dos fiscales) rastre¨® sin ¨¦xito posibles dep¨®sitos bancarios de Barral en Gran Breta?a, Portugal, Noruega y Suiza. En el pa¨ªs helv¨¦tico se procedi¨® al registro del despacho de su representante legal lo cual desat¨® un proceso sobre el que los tribunales suizos todav¨ªa no se han pronunciado ni tampoco han desvelado las cuentas bancarias que presumiblemente tiene Barral.

Mientras el viejo proceso se encontraba completamente atascado, esperando las respuestas de Suiza, un empleado de Barral que fue despedido se prest¨® a colaborar con la justicia. El testigo se encontraba cumpliendo una condena por desacato relacionada con los negocios de su jefe en una prisi¨®n china en la que permaneci¨® m¨¢s de tres a?os en unas condiciones penosas por el hacinamiento de los reclusos.

Excarcelado en febrero pasado, el testigo confirm¨® ante el juez las inversiones de Barral en empresas e¨®licas en la provincia de Shandong y otras que se extend¨ªan por la costa de Chile relacionadss con el sector de cultivos marinos. Las sospechas de que el dinero entraba y sal¨ªa de una sociedad matriz creada en las Islas V¨ªrgenes, que estaba vinculada a otra cuenta abierta en Hong Kong, tambi¨¦n fueron confirmadas por este testigo cuyas declaraciones ser¨¢n la principal prueba de cargo del fiscal ante la negativa a contestar las comisiones rogatorias enviadas por el juzgado a China.

La defensa de Barral, su mujer y sus tres hijas (que tambi¨¦n est¨¢n imputadas en la otra causa) tratan de desmontar la acusaci¨®n de contrabando y han pedido su archivo. Alegan que el alijo de tabaco se encontraba en tr¨¢nsito de camino a Inglaterra y fue incautado en el puerto franco de Vigo, mientras para la fiscal¨ªa, el delito de contrabando no ha prescrito porque est¨¢ ligado a delitos m¨¢s graves como el de cohecho y revelaci¨®n de secretos. Dos a?os antes de su detenci¨®n, el entonces juez de la Audiencia Nacional Baltasar Garz¨®n hab¨ªa ordenado el registro de su chal¨¦ de Ribadumia sin hallar ninguna pista que le implicase en el contrabando. Tambi¨¦n la Oficina Europea de Lucha contra el Fraude (Olaf) se interes¨® por las investigaciones abiertas contra Barral e incluso podr¨ªa actuar contra ¨¦l si fuese condenado.