Nacionalistas de calle o de urnas

Hace tiempo que las manifestaciones pol¨ªticas del 25 de julio en Santiago han dejado de reflejar las corrientes subterr¨¢neas que mueven el nacionalismo gallego. Hasta las de ayer, las ¨²ltimas marchas del D¨ªa da Patria hab¨ªan sido las celebradas en 2012, ya que las del pasado a?o se cancelaron tras el accidente de tren de Angrois. En las de hace dos a?os la del BNG, aglutinadora por tradici¨®n de otros movimientos sociales, fue la mayoritaria. Anova, su entonces incipiente escisi¨®n capitaneada por Xos¨¦ Manuel Beiras, apenas congreg¨® a unas pocas decenas de simpatizantes en una peque?a plaza del casco hist¨®rico. Justo tres meses despu¨¦s, las elecciones auton¨®micas de octubre relegaban al frente nacionalista a la cuarta posici¨®n del Parlamento gallego, superado por la coalici¨®n de Anova con Esquerda Unida en Alternativa Galega de Esquerda (AGE). Ayer la situaci¨®n fue similar a la de hace dos a?os, con miles de personas respaldando la tradicional marcha del BNG desde la Alameda hasta la plaza de A Quintana, llena por completo, y apenas unos pocos cientos en la concentraci¨®n de Anova.

Tras el vuelco electoral de hace dos a?os dentro del nacionalismo gallego, ratificado hace apenas dos meses en las elecciones europeas, y la aparici¨®n entonces y desde entonces de diversas iniciativas pol¨ªticas ciudadanas, de base, de unidad popular o similar denominaci¨®n (Podemos, Somos Maior¨ªa, Marea Atl¨¢ntica, Manifesto Mi?or, etc¨¦tera) los discursos no han cambiado. El portavoz nacional del BNG, Xavier Vence, insisti¨® en la necesidad de que Galicia sea ¡°una naci¨®n en el mundo como quiere ser Escocia o Catalu?a¡± y critic¨® el ¡°provincianismo papanatas en San Caetano¡±. Fue cuando se le pregunt¨® por la posible creaci¨®n de ¡°frentes¡± populares de cara a las elecciones municipales del pr¨®ximo a?o cuando el l¨ªder nacionalista apel¨® a conformar ¡°un gran proyecto de izquierda¡± y record¨® que su formaci¨®n est¨¢ impulsando asambleas abiertas a la ciudadan¨ªa con las que quiere ¡°sumar a todo el mundo sin pedirle el carn¨¦¡±. Pero debe ser un proyecto, dijo, ¡°alrededor del nacionalismo¡±.

Frente a esa visi¨®n, Beiras destac¨® que son los movimientos sociales ¡°los que est¨¢n siendo el motor de la rebeli¨®n¡± contra las estructuras de poder tradicionales y apel¨® a que las fuerzas pol¨ªticas se limiten a ser una ¡°herramienta¡± al servicio de esa mayor¨ªa social. Seg¨²n dijo, est¨¢ ¡°m¨¢s preparada que las fuerzas pol¨ªticas¡± para ¡°cambiar el r¨¦gimen actual en descomposici¨®n¡± y ¡°romper con la segunda restauraci¨®n borb¨®nica¡±.

El l¨ªder de Anova salud¨® ¡°con fraternidad¡± de forma expresa al movimiento coru?¨¦s ¡°de base ciudadana¡± Marea Atl¨¢ntica y apel¨® a ¡°mover los marcos¡± pol¨ªticos como hizo su formaci¨®n al crear la coalici¨®n AGE con EU. ¡°Las municipales no deben ser preparadas convencionalmente, mediante acuerdos por arriba, sino que deben ser candidaturas de base ciudadana, de unidad popular, en las que sea el pueblo quien m¨¢s ordene¡±, resumi¨®.

Beiras tambi¨¦n se refiri¨® a la presencia del Rey en Santiago: ¡°Parece que estamos en Vietnam otra vez, solo porque est¨¢ el Borb¨®n ah¨ª, que a nadie le interesa ni le quiere hacer mal, solo que se vaya de una pu?etera vez, que coja un barco, una canoa o un avi¨®n, de esos que no funcionan nunca, y a ver si se equivocan otra vez los ucranianos y le dan con un misil¡±, dijo. Declaraciones similares llevaron al presidente de la Xunta, Alberto N¨²?ez Feij¨®o, a atribuir hace diez d¨ªas a su coalici¨®n ¡°la mayor violencia en 30 a?os de democracia¡±. Pese a tal acusaci¨®n, la concentraci¨®n de Anova no cont¨® con vigilancia policial visible, al contrario que la del BNG.

Tampoco hab¨ªa en el acto de Anova mucha gente que vigilar. Lejos de los 200.000 votos que obtuvo su coalici¨®n con EU hace dos a?os, la afluencia de simpatizantes fue de unos pocos cientos, similar a la de la ofrenda en el Pante¨®n de Galegos Ilustres de Compromiso por Galicia, que en las europeas de mayo apenas cosech¨® 10.000 votos. El fin de su acto coincidi¨® con el inicio a pocos metros del de Anova y propici¨® saludos e intercambios de opini¨®n entre los miembros de ambas formaciones. En lo que coincidieron en p¨²blico tanto estas dos como el BNG fue en reclamar responsabilidades pol¨ªticas por el accidente de Angrois, ese que los dej¨® a todos en casa el a?o pasado.