Hern¨¢ndez prodiga los gestos para romper con el pasado en Santiago

Agust¨ªn Hern¨¢ndez ha empezado la carrera contrarreloj para intentar que el PP conserve la alcald¨ªa de Santiago. Y el empe?o requiere inexcusablemente distanciarse de la ominosa herencia del pasado reciente, la monta?a de esc¨¢ndalos que se llev¨® por delante a dos alcaldes populares. En un intento de evidenciar el cambio en el gobierno de la capital de Galicia, aunque el partido al mando siga siendo el mismo, el nuevo alcalde ha prodigado estos d¨ªas los gestos de ruptura con la etapa anterior. El pasado martes, Hern¨¢ndez inaugur¨® un parque en Finca do Espi?o, donde el exalcalde Gerardo Conde Roa preparaba lo que sus propios compa?eros del PP calificaban en privado de ¡°pelotazo urban¨ªstico¡±. Y ayer dio un nuevo paso al suspender la m¨¢s pol¨¦mica actuaci¨®n de su inmediato antecesor, ?ngel Curr¨¢s, una rotonda que invad¨ªa un parque p¨²blico y que hab¨ªa provocado una fuerte contestaci¨®n de los vecinos.

?El malestar vecinal en Galeras, un barrio al pie del casco hist¨®rico, lo desencaden¨® la autorizaci¨®n otorgada por el gobierno de Curr¨¢s a un aparcamiento privado para construirse una nueva entrada ocupando parte del principal parque de la zona. No ser¨ªa m¨¢s que un carril de acceso con su correspondiente rampa, de unos 30 metros de longitud. Ocupar¨ªa menos del 1% de un parque de unos 40.000 metros cuadrados, pero es un espacio p¨²blico que los vecinos no estaban dispuestos a entregar a manos privadas. Con el apoyo de los grupos de la oposici¨®n, los residentes del barrio llevan meses en pie de guerra y han tratado de frenar el proyecto recurriendo a la Xunta y a la v¨ªa judicial.

Aunque Hern¨¢ndez mantendr¨¢ el convenio urban¨ªstico firmado por el anterior gobierno con la empresa del aparcamiento, que a¨²n considera ¡°v¨¢lido¡±, ha paralizado la construcci¨®n de la rotonda con el argumento de que el proyecto t¨¦cnico no cumple la normativa de incendios ni de accesibilidad. El alcalde se?al¨® que si la empresa ¡°considera que es posible modificar el proyecto¡±, el gobierno local lo estudiar¨ªa, pero al mismo tiempo afirm¨®: ¡°Me gustar¨ªa que no se vuelva a generar un episodio como el que tuvimos. Todo se puede hablar y discutir, pero sin crispaci¨®n. Por parte del Ayuntamiento est¨¢ cerrado el episodio de Galeras¡±. Los periodistas insistieron en preguntar a Hern¨¢ndez si esta decisi¨®n no supone desautorizar a Curr¨¢s, que, al fin y cabo, sigue perteneciendo al gobierno local, ahora como simple edil. ¡°No desautorizo a nadie, miro al futuro¡±, replic¨® el alcalde compostelano. ¡°Tengo los problemas encima de la mesa y procuro arreglarlos con la visi¨®n y el ¨²nico objetivo de garantizar el inter¨¦s de los vecinos¡±. Con todo, ech¨® un capote a sus antecesores al afirmar que el proyecto se utiliz¨® en su momento para ¡°desgastar pol¨ªticamente a un gobierno¡±.

Sin embargo, los socialistas, grupo mayoritario de la oposici¨®n, dudan de la sinceridad de Hern¨¢ndez. ¡°Esto es una operaci¨®n de maquillaje, un intento de evitar protestas vecinales antes de las elecciones¡±, declar¨® la concejal del PSdeG Mercedes Ros¨®n. Seg¨²n la edil, el alcalde acord¨® paralizar el proyecto porque as¨ª se lo impon¨ªa un informe de los servicios t¨¦cnicos municipales. ¡°Si quiere desistir definitivamente de la obra, que anule el convenio urban¨ªstico. Es m¨¢s, lo pudo hacer antes, cuando era el conselleiro responsable del urbanismo en Galicia. Ese convenio es ilegal porque entrega un patrimonio p¨²blico a intereses particulares utilizando un espacio declarado zona verde¡±, agreg¨® Ros¨®n. Los socialistas advierten de que, con la decisi¨®n de ayer, el Ayuntamiento a¨²n podr¨ªa retomar la obra m¨¢s adelante tras acallar las movilizaciones ciudadanas.

El BNG, la otra fuerza de la oposici¨®n, felicit¨® a los vecinos de Galeras por haber obtenido una respuesta a sus demandas y anunci¨® que se mantendr¨¢ ¡°vigilante¡± para que el alcalde cumpla su palabra. Los nacionalistas recordaron que ellos mismos hab¨ªan propuesto al pleno municipal frenar la obra, pero que el PP lo rechaz¨® siempre hasta ahora.