Parroquiano y nost¨¢lgico
El ilustrador todoterreno alaba la pluralidad del gremio como comisario de ¡®La ciudad en vi?etas¡¯
1. Bar Havana Blues. Desayuno all¨ª casi a diario un sandwich mixto, un zumo de naranja y un caf¨¦ solo. Me conocen tan bien que no tengo ni que pedirlo. Y entre otros c¨®cteles caribe?os a precio de esc¨¢ndalo, tienen aut¨¦nticos mojitos cubanos preparados con esmero por Rafael, el due?o, y Yaleidis, la camarera. Este a?o est¨¢n sirviendo el legendario Sandwich Cubano, una buena excusa para ir con hambre (Paseo de Santa Mar¨ªa de la Cabeza, 56).?
2. La Misa de Ocho. Nunca me he sentido parroquiano de un bar tanto como de este, situado en plena calle de Mes¨®n de Paredes y regentado por Edu, un tipo de gran coraz¨®n. Es f¨¢cil entrar solo y salir con un mont¨®n de nuevos amigos. (Mes¨®n de Paredes, 71).
3. Mercado de Santa Mar¨ªa de la Cabeza. All¨ª compraba mi familia hace m¨¢s de medio siglo y yo no iba a ser menos. Todo es de gran calidad gastron¨®mica y humana, pero dudo que se pueda encontrar mejor pescado en todo Madrid que en el puesto de Jos¨¦ e Isidoro.
4. Biblioteca Eugenio Tr¨ªas. La antigua Casa de Fieras del Retiro es ahora una biblioteca p¨²blica. No es especialmente abundante en libros, pero es una maravilla sentarse a leer tras una de sus cristaleras mientras la lluvia empapa el m¨ªtico parque.
5. Caf¨¦s La Mexicana. Si necesitara un caf¨¦ para llevar, nunca se me ocurrir¨ªa acudir a una cadena norteamericana de gigantescos caf¨¦s a precios desorbitados mientras exista esta tradicional casa madrile?a. El aroma que desprende su diminuta y c¨¦ntrica sucursal (Preciados, 24) me hace sentir como en casa.
Amigo y esteta
Conferenciante donde le llamen y profesor en el IED, David Pe?a (Madrid, 1978) ha publicado libros propios e ilustrado para publicidad y otros autores. Su ¨²ltima obra cuelga en las paredes de Miseria (Ver¨®nica 15) hasta septiembre.
6. Javier Mart¨ªn. Croquetas & Caf¨¦. Este local con nombre propio es famoso por sus treinta y dos variedades de croquetas, pero confieso que no he probado ni una. Tienen cocina abierta todo el d¨ªa y sus s¨¢ndwiches y hamburguesas son un eficaz remedio contra la resaca. (Toledo, 74).
7. Real Academia de Bellas Artes de San Fernando. A pesar de que Madrid es una ciudad de grandes museos, este modesto edificio barroco es mi favorito. La heterogeneidad de sus obras y lo c¨¦ntrico de su ubicaci¨®n ofrecen un lugar perfecto para llevar a mis alumnos a dibujar. A casi todos les llama la atenci¨®n lo mismo: el cuadro Las tentaciones de Buda de Eduardo Chicharro y el busto de escayola de Letizia Ortiz presentando un informativo (Alcal¨¢, 13).
8. Trattoria In Crescendo. No hay semana que me salte esta comida italiana elaborada por argentinos. Men¨² del d¨ªa abundante con ingredientes frescos y de primera y pizzas artesanales a precio de risa. (Jaime el Conquistador, 31).
9. Jardines de Cecilio Rodr¨ªguez. Con sus gatos, sus pavos reales, sus cipreses y columnas, sus fuentes y p¨¦rgolas... Son una c¨¢psula del tiempo del Madrid del siglo XX, ideales para pasear solo o acompa?ado. (En el interior del Retiro).
10. Cines desaparecidos. Antes sol¨ªa ir al cine un par de veces por semana. Ahora, un par de veces al a?o. Echo tanto de menos el medio centenar de cines que han desaparecido que suelo visitar las tiendas de ropa o restaurantes que han ocupado su lugar como un absurdo ejercicio nost¨¢lgico.
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