L¨®pez se despide con un homenaje a la generaci¨®n que con ¨¦l logr¨® la paz
El exlehendakari dice que los ciudadanos ¡°tenemos una deuda impagable¡± con Jes¨²s Egiguren
Patxi L¨®pez carg¨® ayer de emociones la mochila de su pasado para afrontar el largo y duro camino que serpentea sobre su futuro a trav¨¦s de la pol¨ªtica en el resto de Espa?a. El primer lehendakari que ha tenido Euskadi fuera del per¨ªmetro del PNV sinti¨® el calor de sus compa?eros con el emotivo adi¨®s que le ofrecieron varias generaciones de cargos internos, p¨²blicos y de militantes que le han visto cosechar sus mayores ¨¦xitos, pero electoralmente, tambi¨¦n, en los ¨²ltimos dos a?os, estrepitosos fracasos. Las palabras de numerosos viajeros que le han acompa?ado por la traves¨ªa pol¨ªtica vasca, que confiaron y creyeron en ¨¦l durante la dif¨ªcil legislatura del cambio como lehendakari, y de quienes le tuvieron como apoyo en los arriesgados tiempos pol¨ªticos que propiciaron la declaraci¨®n de ETA del cese definitivo de su ¡°actividad armada¡± el 20 de octubre de 2011, le empa?aron la mirada en m¨¢s de una ocasi¨®n.
Entre unos y otros le complicaron un tanto su despedida. Sus ¨²ltimas palabras como secretario general fueron para todos los compa?eros que han sufrido con ¨¦l la violencia de ETA ¡ªpor el hecho de pensar diferente¡ª, y para quienes han sido perjudicados por una ¡°banda ciega¡± durante d¨¦cadas, ante el clamor de toda una sociedad que ped¨ªa su disoluci¨®n. L¨®pez dijo sentirse orgulloso de quienes ayer dejaban la primera l¨ªnea habiendo cumplido el objetivo de derrotar a esa banda y conseguir la libertad. Las ¨²ltimas letras, palabras y frases en el congreso extraordinario que se celebra en Bilbao y que a media tarde nombr¨® a Idoia Mendia como su sucesora, fueron para certificar el fin de un ciclo en el socialismo vasco, el que protagonizaron el propio L¨®pez, Rodolfo res y Jes¨²s Eguiguren, entre otros. Si la generaci¨®n de sus padres, que vivi¨® el destierro por ser socialistas, consigui¨® la democracia y la libertad tras el franquismo, la suya ha propiciado el fin de ETA. Pero a quien agradeci¨® el papel que ha jugado en que toda esa violencia quedara atr¨¢s fue a Jes¨²s Eguiguren.
ETA se ha acabado
Ausente por una enfermedad que le mantiene fuera de juego, L¨®pez le agradeci¨® su constancia y tenacidad, a veces incomprendida por muchos miembros del partido. ¡°Se vaci¨® hasta el fondo, dej¨¢ndose el alma para conseguir la paz. Tenemos una deuda impagable¡± con ¨¦l, a?adi¨®, mientras seguramente se le pasaban por la cabeza, los infinitos debates internos en los que el vasquismo que empuj¨® Gipuzkoa estiraba el argumento de la flexibilidad y el di¨¢logo ante un arraigado constitucionalismo que se agarraba a las estructuras del partido haci¨¦ndolo cada vez m¨¢s y m¨¢s inmovilista. A rengl¨®n seguido tuvo un emotivo recuerdo para los socialistas asesinados o heridos, victimizados por la banda terrorista para recalcar que ETA se ha acabado ¡°sobre todo por el coraje de los socialistas vascos, que resistimos, actuamos y ganamos¡±. L¨®pez puso en valor el ¨²nico gobierno del PSE que ¨¦l presidi¨® tras treinta a?os consecutivos de ejecutivos del PNV, y lo hizo delante de los consejeros que le acompa?aron en aquella aventura, para resaltar que ellos nunca gobernaron contra nadie. ¡°Nunca he gobernado contra el nacionalismo, he gobernado a favor de la libertad y de la concordia entre diferentes¡±, dijo, en contraposici¨®n a los nacionalismos que ¡°buscan la divisi¨®n¡±, la atomizaci¨®n y la creaci¨®n de nuevas fronteras por el mundo.
Antes que ¨¦l se despidi¨® Rodolfo Ares, el que durante 30 a?os ha estado al frente de los procesos electorales del partido, y ha ocupado desde la secretar¨ªa de organizaci¨®n hasta el departamento de Interior del Gobierno vasco. El hombre indispensable para entender la trayectoria no s¨®lo del PSE, sino las relaciones, aveces complicadas con el PSOE, ¡ªcomo durante el ¨²ltimo gobierno de un Jos¨¦ Luis Rodr¨ªguez Zapatero angustiado por su exigua mayor¨ªa¡ª, tambi¨¦n se emocion¨®. ?l lo hizo cuando agradeci¨® a su esposa, Rosa, fallecida hace unos meses, los dos hijos que le di¨® y su lealtad: ¡°Me ayud¨® a no olvidar nunca mis or¨ªgenes, de donde ven¨ªa¡±.
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