Atrapados en P¨¦rez Gim¨¦nez

Las primeras muestras claras de que algo no iba bien en los laboratorios cordobeses P¨¦rez Gim¨¦nez comenzaron a asomar en 2010. Sus empleados sufrieron los primeros retrasos en el pago de las n¨®minas. Al principio, llegaban con d¨ªas o semanas de retraso. Luego, tardaron meses en cobrar. Hace 27 meses, dejaron de hacerlo. Estos cuatro a?os est¨¢n siendo un verdadero calvario para los empleados. 111 se encuentran en medio de una especie de limbo jur¨ªdico, sometidos a un Expediente de Regulaci¨®n Temporal de Empleo (ERTE) que al menos garantiza que algunos cobren una prestaci¨®n social. Pero 40 trabajadores siguen vinculados a la empresa y ni reciben sueldo ni paga de desempleo.

¡°Su situaci¨®n es ag¨®nica¡±, reconoce Pilar Rela?o, trabajadora de P¨¦rez Gim¨¦nez, que finalmente pudo acogerse al ERTE y el mes pasado recibi¨® su primer ingreso por estar en el paro. ¡°Hasta ahora hemos funcionado sobre todo con la ayuda de la familia, en mi caso. Y porque mi marido tiene un negocio y eso ha ayudado algo. Pero algunos compa?eros, incluso del ERTE, ya no cobran y han tenido que acudir a C¨¢ritas para poder comer¡±, dice la trabajadora de 49 a?os, que pas¨® 28 de ellos en la farmac¨¦utica cordobesa y lleg¨® a ser responsable del departamento de planificaci¨®n de la f¨¢brica.

Tras una nefasta gesti¨®n empresarial por parte de la familia que da nombre a la firma, en 2010 la compa?¨ªa se vendi¨® por un simb¨®lico euro a un grupo inversor. Se qued¨® con la empresa, sus deudas (49 millones entonces) y su flamante y enorme f¨¢brica en Almod¨®var del R¨ªo (C¨®rdoba), que llevaba s¨®lo un a?o abierta. El l¨ªo que sigui¨® marc¨® la t¨®nica que estaba por venir. El grupo inversor, Tecris, se enfrent¨® al administrador ¨²nico, Sergio Mart¨ªnez, quien termin¨® haci¨¦ndose con el control de la empresa. Pero las cifras de producci¨®n ya ca¨ªan en picado en todos sus productos, entre ellos, el famoso Calmante Vitaminado por el que era conocido P¨¦rez Gim¨¦nez. La situaci¨®n deriv¨® en insostenible y, hace tres a?os, el juez de lo mercantil de C¨®rdoba orden¨® que los Laboratorios P¨¦rez Gim¨¦nez entrasen en concurso de acreedores. Y en esa situaci¨®n siguen desde entonces, para absoluta desesperaci¨®n de los trabajadores.

Los empleados acusan a los administradores de destruir la firma

La mara?a es ya infinita. Ninguna de las empresas interesadas en hacerse con la firma ¡ªprincipalmente, Global Aeronautics, de capital estadounidense, y la rusa Krasfarma¡ª ha logrado terminar el proceso de compra. Y el juez de lo mercantil, Fernando Caballero, tampoco se atreve a ordenar la liquidaci¨®n total de los laboratorios, incluyendo la venta de la f¨¢brica y sus componentes. Oficialmente, los 40 empleados de P¨¦rez Gim¨¦nez que siguen vinculados a la firma porque no han podido acogerse al ERTE prosiguen la actividad y mantienen el complejo. ¡°Pero la f¨¢brica est¨¢ parada¡±, afirma Rela?o. ¡°Hay una empresa de seguridad que vigila para que no se lleven material, pero poco m¨¢s. De vez en cuando, se pasa alguien para ver que todo sigue ah¨ª¡±.

La pantanosa situaci¨®n que arrastra P¨¦rez Gim¨¦nez ha puesto en el punto de mira de las cr¨ªticas a los administradores concursales. El representante de UGT en los laboratorios, Jos¨¦ Ruiz, ha llegado a llamar ¡°irresponsables¡± a los cinco administradores. ¡°Este es un proceso para destruir la empresa por parte de la administraci¨®n concursal¡±, insisti¨® Ruiz hace unos d¨ªas. ¡°Es una falta de respeto para las personas que est¨¢n trabajando y que est¨¢n dejando sin poder comer¡±, recalc¨®.

El ¨²ltimo cap¨ªtulo de esta historia se vivi¨® el viernes, cuando los inversores de Krasfarma anunciaron que pujar¨¢n en la pr¨®xima subastilla de P¨¦rez Gim¨¦nez para exportar medicamentos a Rusia, Am¨¦rica Latina y China. El presidente de la entidad, Ilya Shpurov, entreg¨® ante un notario 125.000 euros como fianza para poder participar en la subasta del 2 de octubre. Shpurov asegur¨® que el resto del dinero requerido, hasta el mill¨®n de euros, llegar¨¢ en los pr¨®ximos d¨ªas, por los problemas de transferencias entre Rusia y Espa?a. Mientras tanto, los trabajadores seguir¨¢n sin saber su futuro.