El PNV se la juega en Bizkaia

El PNV se dispone a afrontar una aut¨¦ntica catarsis en la apuesta electoral para su territorio m¨¢s decisivo, Bizkaia. La anunciada sustituci¨®n de Ibon Areso tras su per¨ªodo de tr¨¢nsito posterior a la sentida muerte de I?aki Azkuna se une ahora a la nada sorprendente despedida de Jos¨¦ Luis Bilbao como diputado general despu¨¦s de tres legislaturas.

Una semana antes de conocerse que no figuraba entre las apuestas de la direcci¨®n del PNV para continuar en el cargo, Bilbao prefiere decir que se marcha. Lo ha hecho con la solemnidad propia de una intervenci¨®n en la Casa de Juntas de Bizkaia que ha eclipsado, por supuesto, el debate sobre Pol¨ªtica General.

Los nacionalistas asumen un riesgo considerable al proyectar un doble ticket electoral in¨¦dito. La recordada ausencia de Azkuna obliga al EBB a contener el aliento en cuanto al margen de una victoria que siguen presuponiendo m¨¢s all¨¢ del perfil que acaben eligiendo la pr¨®xima semana y que, sin duda, tendr¨¢ un rostro conocido en el ¨¢mbito pol¨ªtico. Pero, adem¨¢s, conllevar¨¢ la previsible sustituci¨®n de concejales de referencia alineados con las anteriores etapas y que cerrar¨¢n un ciclo en el Ayuntamiento.

A su vez, en la apuesta por conservar la Diputaci¨®n, los nacionalistas se decantan por la renovaci¨®n que supondr¨ªa Unai Rementeria, llamado desde hace tres a?os a convertirse en una referencia desde su paso por la alcald¨ªa de Mundaka pero sin una mochila que presentar m¨¢s all¨¢ de sus comparecencias como portavoz foral.

El PNV renovar¨¢ su ticket electoral en plena pelea con EH Bildu

El PNV sabe que se la juega en un territorio decisivo, pero no estar¨¢ solo en el empe?o. Ante el fundado riesgo de que EH Bildu consiga ensanchar esta vez el campo electoral que se le resiste en Bizkaia, los nacionalistas siempre tendr¨¢n el cobijo del PSE-EE para apuntalar el apoyo necesario que les acerque a una mayor¨ªa suficiente.

M¨¢s all¨¢ de las peleas propias sobre el grado de incumplimiento del acuerdo de legislatura que nacionalistas y socialistas mantienen, es dif¨ªcil de entender desde la estabilidad institucional que ambos partidos defienden que sus diferencias dejen el camino libre a un gobierno de sello abertzale ni en Bilbao ni, por supuesto, en la Diputaci¨®n de Bizkaia.

Por tanto, el PNV arriesga, s¨ª, pero con el colch¨®n que le proporcionar¨ªa en un momento de necesidad el voto de los socialistas. ?Y si no fuera suficiente? Ah¨ª es donde se abrir¨ªa la puerta definitivamente a los pactos transversales que I?igo Urkullu siempre ha preconizado como s¨ªmbolo del entendimiento entre diferentes.

Ahora bien, sustanciados los candidatos de Bilbao y de Bizkaia, el PNV tiene la encomienda de buscar un acomodo a su actual diputado general, a quien los tiempos de renovaci¨®n introducidos por la crisis en la pol¨ªtica han acercado hasta la puerta sin pretenderlo.