En los l¨ªmites de la ficci¨®n
Mu?oz Molina recibe el premio Liber y concluye una novela sobre Luther King
Quiz¨¢ hijo del impacto que le causo de peque?o la complejidad del capit¨¢n Nemo de las 20.000 leguas del viaje submarino ¡ª¡°son apenas retazos de su vida entrevistos, no sabes de ¨¦l y aun as¨ª m¨¢s se agranda a cada p¨¢gina¡±¡ª naci¨® el inter¨¦s de Antonio Mu?oz Molina por el asesino de Martin Luther King, que protagoniza su ¨²ltima novela Como la sombra que se va, que aparecer¨¢ en noviembre (Seix Barral). ¡°Se sabe tanto de ¨¦l por la apertura de archivos del FBI o los de la polic¨ªa de Phoenix como no se sabe nada: por qu¨¦ lo hizo, las conexiones si las hubo...¡±, recita el escritor en Barcelona, poco antes de recibir este jueves el premio Liber al autor hispanoamericano m¨¢s destacado, en una gala en la que tambi¨¦n fue homenajeado, entre otros, el presidente del grupo Planeta Jos¨¦ Manuel Lara.
¡°Es la fascinaci¨®n por la identidad, qu¨¦ hay detr¨¢s de un rosto, c¨®mo son los otros de un mundo tan alejado de ti y eso a?adido a la pura fascinaci¨®n de descubrir y contar con la textura de lo real¡±, reflexiona el acad¨¦mico sobre su libro, que desde el lejano Beatus ille (1986) ha evolucionado su narrativa desde la novel¨ªstica m¨¢s cl¨¢sica a una m¨¢s generosa en la mezcolanza de g¨¦neros: confesiones personales, indagaciones hist¨®ricas (Sefarad, de 2001); diarios de viajes (Ventanas de Manhattan, de 2004) ... El click tiene nombre y fecha: ¡°El cambio empez¨® a larvarse con Bruce Chatwin, al que me acerqu¨¦ en 1989: fue muy importante para m¨ª; la primera vez que le¨ª En la Patagonia, me dije: '?Y esto, qu¨¦ es?'; tambi¨¦n me ocurri¨® con Peter Handke y luego con En busca del tiempo perdido, que llevaba conmigo de antes pero del que tard¨¦ en aprender a ser influido por su libertad literaria¡±.
Las palabras no son gratis, pueden envenenar y a bastantes intelectuales de aqu¨ª les gusta echar le?a al fuego
Habla Mu?oz Molina de esas novelas (a las que a?ade Moby Dick y el Quijote), como de las que ¡°revientan por dentro¡± y que esa mezcolanza la empez¨® a experimentar en El jinete polaco y, sobre todo, en la que cree injustamente ¡°le¨ªda pero incomprendida¡± Ardor guerrero (1995): ¡°Estaba explorando la non-fiction, hasta d¨®nde se pod¨ªan contar hechos sin acudir a la ficci¨®n y entonces dijeron que si estaba en decadencia y que hab¨ªa elegido no escribir novelas¡±. Incomprensi¨®n que, cree, ha durado demasiado en las letras espa?olas: ¡°La idea del rigor de los hechos ha costado y cuesta que entre en la narrativa espa?ola; en la no ficci¨®n? no eres libre, tienes un contrato con el lector:? aqu¨ª no miento, no puedo, porque hay informaciones fehacientes que no pueden faltar¡±.
Ese rigor que reclama tambi¨¦n est¨¢ ausente entre los intelectuales que se dirigen, en estos tiempos convulsos, a la ciudadan¨ªa. ¡°El debate p¨²blico es pobre y binario en Espa?a por excesivamente marcado por la pol¨ªtica; hay mucha autoindulgencia entre los intelectuales, que defienden fr¨ªvolamente cosas que saben que van a pagar otros. Las palabras no son gratis, pueden envenenar y a bastantes intelectuales de aqu¨ª les gusta echar le?a al fuego; el debate p¨²blico no se corresponde con las mejores virtudes de nuestra sociedad".
Me niego vigorosamente a estar dominado por el nacionalismo, sea del signo que sea
Est¨¢ convencido Mu?oz Molina de que ¡°la vida de la gente com¨²n, lo que tiene de racional y templado, no se refleja en la vida pol¨ªtica¡±, de que esa clase pol¨ªtica espa?ola no se corresponde con la sociedad. Lo ha demostrado Ruiz Gallard¨®n con la ley del aborto y, sin duda, la mutua cerraz¨®n de Mas y Rajoy. ¡°Me niego vigorosamente a estar dominado por el nacionalismo, sea del signo que sea. Los antifranquistas de mi generaci¨®n llevaban la causa de Catalu?a entre sus reivindicaciones; lo sigo defendiendo hoy porque es la realidad pero hemos de saber hallar formas de convivencia colectiva: somos siameses y estamos condenados a ello¡±.
Es el del L¨ªber su 18? galard¨®n, al que precedi¨® el Pr¨ªncipe de Asturias de las Letras 2013. ?Inmune ya? ¡°No, los agradezco pero lo olvido; me reconfortan en un trabajo inseguro pero me gusta el proceso monacal de recortar y reescribir una p¨¢gina en soledad¡±, dice quien cree que es, como persona y como escritor, ¡°fruto del tr¨¢nsito de un pa¨ªs y de una generaci¨®n de un mundo rural a otro urbano¡± y que conserva en este trayecto vital desde los tiempos de la humilde buhardilla de alquiler de ?beda en la que naci¨® en 1956, ¡°la vocaci¨®n exploratoria de aquel ni?o que fui¡±.
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