Los compases de una amistad

Wanda Landowska ten¨ªa garras en vez de manos cuando tocaba el clave. Encog¨ªa los dedos sobre el teclado y cuando deb¨ªa pulsar una nota la falange elegida se extend¨ªa como el cuello de una tortuga y se volv¨ªa a replegar hasta nuevo aviso. La peculiar forma de tocar de la pianista, de origen polaco, y su fuerte car¨¢cter fascinaron a Manuel de Falla y entre ambos m¨²sicos aflor¨® una amistad que dur¨® m¨¢s de una d¨¦cada. Uno de los ¨²ltimos disc¨ªpulos de Landowska, Rafael Puyana, tambi¨¦n mantuvo una relaci¨®n de amistad con la familia del compositor y por ella uno de sus claves volver¨¢ a sonar en C¨¢diz.?

Puyana naci¨® en Colombia y falleci¨® en Par¨ªs en marzo de 2013. Antes de morir expres¨® su voluntad de donar su archivo documental, obras de arte, tejidos antiguos y cinco instrumentos musicales a la Fundaci¨®n Archivo Manuel de Falla de Granada. Uno de ellos, un clave de doble teclado fabricado por Willard Martin en 1982, se escapa ahora a la ciudad que acun¨® al compositor gaditano, donde ser¨¢ el protagonista de dos conciertos en el marco de los 20? Encuentros Manuel de Falla. El primero de ellos, a cargo de la Orquesta Ciudad de Granada, ser¨¢ el domingo 23 de noviembre en el Gran Teatro Falla. Dos d¨ªas m¨¢s tarde, el martes 25 en el Claustro de la Diputaci¨®n Provincial de C¨¢diz, Mar¨ªa Teresa Chenlo, disc¨ªpula de Puyana, resucitar¨¢ el clave de su maestro en un homenaje al clavecinista.

Falla escribi¨® dos obras para clave: El retablo de maese P¨¦rez y Concerto (esta ¨²ltima se podr¨¢ escuchar en el acto del d¨ªa 23). Dos piezas que el gaditano cre¨® influido por su atracci¨®n hacia Landowska. Par¨ªs fue el escenario del primer encuentro, a la usanza de toda historia pasional que se precie, aunque esta relaci¨®n no fue m¨¢s all¨¢ de una buena amistad y de la colaboraci¨®n entre m¨²sicos. La clavecinista y pianista polaca empezaba entonces a dar conciertos y a Falla le impresion¨® tanto que guard¨® con celo los programas y carteles de sus actuaciones, seg¨²n cuenta Elena Torres, profesora del Departamento de Musicolog¨ªa de la Universidad Complutense de Madrid.

Al dejar Par¨ªs, la tinta conect¨® a Falla y a Landwoska en la distancia. Son numerosas las cartas que ambos se enviaron durante a?os. ¡°Es una correspondencia precios¨ªsima, muy emotiva. Ella era muy pasional y a ¨¦l le llamaban la atenci¨®n esas personalidades¡±, describe Torres. ¡°Cualquier proyecto que ella le propusiera lo acog¨ªa de buen grado. Y eso que Falla se encontraba en un momento en el que seleccionaba mucho¡±, a?ade.

Gracias a la int¨¦rprete, polaca Falla se empieza a interesar por componer para clave, lo que contribuy¨® a la recuperaci¨®n de este instrumento, que se hab¨ªa sumido en el olvido. ¡°Fue el primero en escribir para clave, pero despu¨¦s de ¨¦l vinieron muchos m¨¢s¡±, apunta Torres. Landowska se convirti¨® entonces en maestra de Falla y le dio al compositor muchos consejos sobre este instrumento. Al igual que ense?¨® fielmente su t¨¦cnica a Puyana. Por eso, cuando suene la primera nota del clave que en su d¨ªa perteneci¨® al m¨²sico colombiano, resucitar¨¢ con ella este pedacito de historia en C¨¢diz.