As¨ª perdieron los narcos 300 millones de euros en coca¨ªna

Una aver¨ªa en el velero Pixapo, con base en el puerto deportivo de Moa?a, cuando iba a recoger de un buque nodriza un alijo de casi 3.000 kilogramos de coca¨ªna, ech¨® al traste un cargamento valorado en m¨¢s de 300 millones de euros con el que un grupo de narcos gallegos arruinados planeaban retirarse por una buena temporada. A?o y medio despu¨¦s de que el grupo Greco antidroga frustrase la entrada de este cargamento, los 18 procesados -algunos con un antiguo historial en el narcotr¨¢fico- se enfrentan a condenas que suman 308 a?os de c¨¢rcel y multas que superan los 19.000 millones.

En su escrito de acusaci¨®n, el fiscal antidroga de Pontevedra, Luis Uriarte, se?ala a Juan Marcos Vigo Fern¨¢ndez, de Vilagarc¨ªa, de 38 a?os; Antonio Carballa Magdalena de Sanxenxo, de 59; y a Jos¨¦ Luis Vi?as Morgade, de Vilanova de Arousa, de 48; los tres con antecedentes policiales, como los receptores de la droga en Espa?a y los presuntos organizadores de la operaci¨®n.

Manten¨ªan comunicaci¨®n y contacto con la organizaci¨®n sudamericana exportadora de la droga, tanto con sus representantes en Sudam¨¦rica, como con su delegado en Madrid, Jos¨¦ Gregorio Hern¨¢ndez Rodr¨ªguez, de 39 a?os, con pasaporte venezolano y sin permiso de residencia en Espa?a. ?ste fue detenido en el aeropuerto de Vigo cuando iba a subirse a un avi¨®n escapando de la polic¨ªa.

Bajo la dependencia directa del triunvirato gallego, y como medida de seguridad, actuaba Francisco Javier Su¨¢rez, de 39 a?os, de Vilanova de Arousa, tambi¨¦n con antecedentes penales, cuya funci¨®n era hacer de intermediario entre ellos y los proveedores de la coca¨ªna, sostiene la fiscal¨ªa. Para evitar una eventual investigaci¨®n policial, la c¨²pula de la organizaci¨®n nunca se comunicaba directamente con los dem¨¢s integrantes, sino a trav¨¦s de Su¨¢rez, que transmit¨ªa las ¨®rdenes de los jefes a los eslabones inferiores de la organizaci¨®n encargados del transporte de la droga, se?ala el escrito de acusaci¨®n.

Seg¨²n la fiscal¨ªa, los procesados Jes¨²s Iglesias Cumplido y Jos¨¦ Manuel Rodr¨ªguez Camesella, de Gondomar -a los que le fueron intervenidas sendas pistolas- eran los encargados de proporcionar el barco que ten¨ªa que alijar la droga en alta mar. Primero intentaron utilizar el velero Pixapo pero la aver¨ªa que tuvo en el momento de la traves¨ªa les oblig¨® a desviarse hasta el puerto de la localidad portuguesa de Aveiro contactar con otros procesados para localizar otra embarcaci¨®n.

As¨ª entraron en escena Nelson Beltr¨¢n Cejuela y Luis Miguel Iglesias Vila, de Ponteareas. Ambos fueron los encargados de responder a la llamada de emergencia para buscar otro barco que ser¨ªa tripulado por Juan Domingo Covelo Fern¨¢ndez, de Nigr¨¢n; Rafael Couto Oubi?a, de Mea?o; e Ivan M¨¦ndez L¨®pez, de Vigo. Mientras tanto, relata la fiscal¨ªa, el buque nodriza ya llevaba varios d¨ªas dando giros sobre s¨ª mismo, esperando la llegada de la embarcaci¨®n prevista para el 26 de mayo. La desesperaci¨®n de los narcos gallegos fue recogida por la polic¨ªa a trav¨¦s del tel¨¦fono intervenido de Rodr¨ªguez Camesella que realiz¨® hasta 20 llamadas a una l¨ªnea de tarot para consultar a una vidente el resultado de la operaci¨®n. Una y otra vez, la adivina venezolana le asegur¨® que el desembarco iba a tener ¨¦xito.

Cuando los cinco tripulantes del narcobuque (un coreano y cuatro indonesios) se dispon¨ªan a regresar con la coca¨ªna al delta del Orinoco, de donde hab¨ªa partido un mes antes, el barco de operaciones Petrel de Vigilancia Aduanera lo alcanz¨® a las tres de la madrugada del 29 de mayo de 2013. Ni la nave de apoyo ni las planeadoras pudieron hacer su cometido.

El Riptide, sin pabell¨®n y due?o desconocido, llevaba en sus bodegas 113 fardos de fardos identificados con el nombre de Superman que conten¨ªan un total de 2.954 kilos de coca¨ªna, con una pureza del 71,22%, lo que supone un total de 2.103 kilos de coca¨ªna pura y que hubiera alcanzado en el mercado un precio superior a los 295 millones euros.

Los registros policiales fueron sintom¨¢ticos de la arruinada econom¨ªa de los jefes. Ni rastro de dinero. En los zulos de las casas de Manuel Carballa y Jos¨¦ Luis Vi?as se encontraron cajas de joyas vac¨ªas, mientras en la de Marcos Vigo se localizaron varios escondites donde solo quedaban gomas de atar los fajos de billetes.