La viuda de Joan Pon? reivindica al pintor a los 30 a?os de su muerte
Para realizar una gran antol¨®gica Mar Corominas est¨¢ dispuesta a colaborar con la Asociaci¨®n que impugn¨® el testamento
Han pasado 30 a?os desde que Joan Pon? (Barcelona, 1927- Saint Paul de Vence, 1984), uno de los fundadores del Dau al Set y su miembro m¨¢s relevante, falleciera por un infarto, tras haber superado un trasplante de ri?¨®n. A diferencia de lo que suele pasar, en estas tres d¨¦cadas la fama de la que disfrut¨® en vida se torn¨® si no en olvido, en algo muy parecido. Por ello su viuda Mar Corominas, que comparti¨® con Pon? los ¨²ltimos 15 a?os de su vida, ha hecho un llamamiento a las instituciones para que rindan al artista el tributo que se merece con una gran antol¨®gica. La muestra, que deber¨ªa reunir las obras m¨¢s selectas capaces de ofrecer una visi¨®n a 360? de su prol¨ªfica trayectoria, podr¨ªa celebrarse tanto en el Macba como en el MNAC, museos que atesoran obras de Pon? en sus colecciones. ¡°Este encuentro es mi particular homenaje a un artista que a¨²n no se conoce suficientemente en todas sus facetas¡±, indic¨® Mar Corominas a los periodistas convocados en su casa, donde ense?¨® parte del material in¨¦dito que conserva, esbozos, escritos, cuadernos de notas, fotograf¨ªas y cinco telas especialmente caracter¨ªsticas de su universo on¨ªrico y fantasmag¨®rico, poblado por diablos, figuras m¨ªticas y s¨ªmbolos esot¨¦ricos.
Corominas se ha declarado dispuesta incluso a colaborar con la Asociaci¨®n Joan Pon?, vinculada al hijo del primer matrimonio del pintor, que impugn¨® el testamento con el que Pon? legaba a su viuda toda la obra. Sin embargo, tras 10 a?os de pleitos, apelando a un vicio de forma, el juez fall¨® en favor del hijo. ¡°Joan era consciente de que me encontraba en un entorno hostil, por ello quiso casarse tras muchos a?os de convivencia¡±, explica Corominas. Se conocieron cuando ella ten¨ªa 20 a?os y ¨¦l hab¨ªa superado los 40, lo cual levant¨® ampollas en la hip¨®crita y puritana sociedad espa?ola. El fallo del juez, la hiri¨® a tal punto que Corominas quiso pasar de todo, pero al cabo de unos a?os al ver que la obra de Pon? no se expon¨ªa y su legado no se difund¨ªa, decidi¨® volver al ruedo. Su primer paso fue recoger sus vivencias en com¨²n en Sin Olvido, un libro ¨Cen busca de editor- lleno de an¨¦cdotas y personajes conocidos, empezando por Dal¨ª y sus amigos Joan Brossa, Baltasar Porcel, Modest Cuixart y el escritor Luis Goytisolo. Este cont¨® con las ilustraciones de Pon? para dos de sus libros, Ojos, c¨ªrculos y b¨²hos de 1970 y Devoraciones de 1976, que se publicar¨¢n la pr¨®xima primavera en una nueva edici¨®n conjunta, bajo el t¨ªtulo El atasco y dem¨¢s f¨¢bulas. ¡°Los dibujos no tienen nada que ver con el texto, aunque funcionan muy bien juntos¡±, asegur¨® Goytisolo que acompa?¨® Corominas en su encuentro con la prensa y relato varias an¨¦cdotas, incluido el encuentro entre Pon? y el propio Sat¨¢n en Sao Paolo de Brasil, donde vivi¨® muchos a?os
Tanto Corominas como Goytisolo est¨¢n convencidos de que el primer freno a la proyecci¨®n de la obra de Pon? fue Antoni T¨¤pies. ¡°Hay una foto que inmortaliza un d¨ªa en nuestra casa de Ceret cuando Pon?, Porcel y Cuixart decidieron denunciar p¨²blicamente T¨¤pies y sus intentos de frenar cualquier artista que pudiera oscurecerle, pero al final prefirieron invertir su energ¨ªa en el trabajo¡±, record¨® Corominas. Ahora, tras superar la amargura que supuso ver anular la voluntad testamentaria de su marido, lo ¨²nico que quiere es participar en la organizaci¨®n de ¡°una gran antol¨®gica con obras selectas que expliquen todas las etapas del pintor, algunas casi desconocidas, como las de su ¨¦poca geom¨¦trica. Corominas que tras la muerte de Pon? realiz¨® un libro con Pol¨ªgrafa en el cual se reproducen 600 piezas, ya ha clasificado m¨¢s de 3.000, entre papeles y telas. Por su parte la Asociaci¨®n, creada en 2007 y actualmente dirigida por Jordi Carulla, organiz¨® en 2010 la muestra Cajas Secretas (1975-1980) y anunci¨® la publicaci¨®n de un cat¨¢logo razonado que, aunque su primera actuaci¨®n fue la creaci¨®n de la editorial Edicions Poncianes, aun no ha visto la luz.
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