El turismo extranjero marca un nuevo r¨¦cord de visitas y gasto

Nuevo r¨¦cord tur¨ªstico. Pese al rublo y a la ca¨ªda de la llegada de visitantes rusos, que se contrajo un 14,4% y dej¨® casi 200 millones de euros menos que el a?o pasado. Pese a que la llegada de estadounidenses tambi¨¦n se redujo casi un 10%. Los hoteles catalanes recibieron el a?o pasado a 16,75 millones de turistas extranjeros, un 7,2% m¨¢s, seg¨²n los datos elaborados por la Generalitat sobre la base de las estad¨ªsticas de Frontur. Si se sumaran los turistas llegados del resto de Espa?a --de las que todav¨ªa no existen cifras oficiales--, Catalu?a habr¨ªa sumado en torno a 21 millones de personas. Ese c¨®mputo total no es oficial, pero lo dio ayer por bueno el consejero de Empresa y Empleo, Felip Puig. "Unos tres turistas por cada habitante", dijo, para subrayar la fuerza de unas cifras que certifican que el turismo se ha convertido en la mayor industria catalana. Y que sigue engrosando sus cifras pese a la crisis.

Los mercados tradicionales, los m¨¢s cercanos, son los que han marcado el a?o tur¨ªstico de 2014. Francia aport¨® 4,57 millones de turistas, un 9,7% m¨¢s, Reino Unido 1,78 millones (un 5,6% m¨¢s), y Alemania otros 1,43 (12,3%). Los italianos, que en 2013 perdieron inter¨¦s en Catalu?a, volvieron con fuerza: los 1,3 millones que llegaron el a?o pasado representan un 20% m¨¢s.

Ese fuerte protagonismo tiene dos lecturas. Una, la m¨¢s positiva, es que su crecimiento permiti¨® que los resultados del a?o se mantuvieran al alza aunque la llegada de rusos y estadounidenses cayera. La segunda, que desvirt¨²a la estrategia de las administraciones de anteponer calidad (captaci¨®n de visitantes con mayor poder adquisitivo) que cantidad, es que ha ca¨ªdo ligeramente el gasto por turista y estancia en Catalu?a: de los 907 euros de promedio se pasa a 897 euros, en el primer retroceso en al menos los ¨²ltimos cuatro a?os. Una mala noticia pese a que los ingresos vinculados a los turistas extranjeros alcanz¨® los 15.029,8 millones de euros, un 1,5% m¨¢s.

El aeropuerto de El Prat alcanza por primera vez los 37,5 millones de usuarios

La raz¨®n de ese punto negro del turismo catal¨¢n ¡ªsi es que se puede considerar punto negro¡ª es que justamente rusos y estadounidenses son, con mucha diferencia, quienes m¨¢s gastan. Los primeros tienen un presupuesto medio en cada viaje a Catalu?a de 1.360 euros por persona, con lo que al reducirse su n¨²mero de 978.300 a 837.400 la industria tur¨ªstica catalana dej¨® de ingresar 191 millones de euros. En el caso de los segundos, la p¨¦rdida es mayor, ya que se calcula que gastan una media de 1.995 euros. Por fortuna, en 2014 su n¨²mero de visitantes a Catalu?a cay¨® en 55.600 (hasta 513.100), pero est¨¢ previsto que vuelva a crecer en 2015.

Las previsiones de futuro no son las mismas para el mercado ruso, cuya crisis amenaza con ahondar todav¨ªa m¨¢s la ca¨ªda del a?o pasado. ¡°A corto plazo la econom¨ªa rusa ir¨¢ peor¡±, admiti¨® ayer Puig. El director de la Agencia Catalana de Turismo, Xavier Espasa, se?al¨® que se trabaja en mercados alternativos, que se centrar¨ªan en otros pa¨ªses de la ex Uni¨®n Sovi¨¦tica. El problema es que aportan cifras todav¨ªa muy bajas (llegaron 20.000 bielorusos el a?o pasado) y es imposible que compensen la sangr¨ªa rusa.

Puig hizo hincapi¨¦ en que el ¨¦xito tur¨ªstico catal¨¢n no es casual y que se ha trabajado desde hace lustros con, por ejemplo, la apertura de una oficina tur¨ªstica en Mosc¨² hace veinte a?os. De ah¨ª, insinu¨®, que Catalu?a vuelva a ser la comunidad que m¨¢s turistas extranjeros capta de toda Espa?a, el 25,8%.

Detr¨¢s de ese ¨¦xito est¨¢ la buena marcha del puerto de Barcelona en lo que se refiere a cruceristas. Y tambi¨¦n los buenos resultados del aeropuerto de El Prat que, seg¨²n anunci¨® ayer tambi¨¦n Aena, cerr¨® otro a?o hist¨®rico: 37,5 millones de pasajeros, un crecimiento del 6,7%. Consagrado a las aerol¨ªneas de bajo coste, intenta captar enlaces transoce¨¢nicos.

Preguntado sobre si el yihadismo podr¨ªa tener repercusi¨®n sobre el turismo en Catalu?a este 2015, Puig explic¨® la dificultad de hacer previsiones. ¡°No creo que haya ninguna alteraci¨®n a medio plazo desde una perspectiva de tendencia", se?al¨®, antes de lanzar una pregunta ret¨®rica: ¡°?Puede alterar la sensaci¨®n de seguridad de una parte de turistas? Puede, pero estamos en un mundo global. Hay que buscar el equilibrio entre libertad y seguridad¡±.