Segunda vida para el templo del arte

Les operaciones urban¨ªsticas, como el juego, est¨¢n llenas de carambolas inesperadas. Esto ha pasado con el proyecto de construir un hotel de lujo al edificio del Deustche Bank situado en la confluencia de Diagonal con paseo de Gr¨¤cia de Barcelona. El fondo de inversi¨®n que ha comprado este edificio para echarlo a tierra y construir uno m¨¢s grande, comprar¨¢ por diez millones de euros la construcci¨®n singular de la calle Bail¨¦n, 72, una especie de Parten¨®n barcelon¨¦s con enormes columnas a la fachada, front¨®n y t¨ªmpano triangular, para cederlo gratuitamente al Ajuntament a cambio de ganar metros de edificabilidad. El jueves la comisi¨®n de H¨¤bitat Urb¨¤ dio el visto bueno al cambio del Plan General Metropolitano para construir el nuevo hotel, por lo cual, bien pronto, este templo del arte que mandaron construir los hermanos Josep y Francesc Masriera el 1884 para que fuera su taller de pintura y joyer¨ªa, y que permanece cerrado desde el 2009, acabar¨¢ convertido en un equipamiento social o cultural para la ciudad.

La construcci¨®n historicista, pese al aspecto abandonado de los ¨²ltimos a?os, nunca ha pasado desapercibida. El edificio fue un encargo de los hermanos pintores al arquitecto premodernista Josep Vilaseca (un enamorado de la cultura cl¨¢sica que tambi¨¦n construy¨® el arco de triunfo y la casa de los paraguas de las Ramblas). El arquitecto lo concibi¨® como una representaci¨®n del templo de Augusto de la colonia romana de Barcino, cuyos restos hab¨ªan sido descubiertos no hac¨ªa mucho. Ahora lo vemos encajado entre edificios, pero en origen era una construcci¨®n aislada, visible y airosa, de planta rectangular, con seis enormes columnas en fachada (hex¨¢stilo) rematadas con capiteles corintios, que soportan un front¨®n triangular en los que permanecen, vigilantes, dos animales mitol¨®gocos, dos grifos. El edificio est¨¢ catalogado como Bien Cultural de Inter¨¦s Local (BCIL), por lo que se ha de mantener la volumetr¨ªa del edificio y la fachada, adem¨¢s de los espacios originales del interior.

En abril de 1884 abri¨® sus puertas como taller y nadie en la ciudad quiso perderse el acontecimiento, tal y como recogen las cr¨®nicas period¨ªsticas. Todos pudieron admirar las enormes esculturas que los Masriera hab¨ªan encargado a Josep Reyn¨¦s de dos de los pintores de referencia suyos, Mari¨¤ Fortuny y Eduardo Rosales (hoy desaparecidas), que presid¨ªan el atrio del nuevo templo. La puerta de acceso era una r¨¦plica exacta a la entrada del templo del Erecteion de Atenas. Su interior, de dos plantas e iluminado por una claraboya cenital, era ostentoso y estaba abigarrado de objetos ex¨®ticos y antig¨¹edades de varios estilos, ¨¦pocas y procedencias, mobiliario, alfombras persas y tapices, instrumentos musicales, armas y objetos raros, que los pintores utilizaban en sus pinturas. Era una especie de museo particular admirado por sus clientes y amigos, que participaban en las m¨²ltiples tertulias, conciertos y representaciones teatrales que los Masriera organizaban. No era de extra?ar que el edificio fuera conocido como ¡°templo del arte¡±.

Francesc Quilez, conservador jefe del Gabinete de Dibujos y Grabados del MNAC, conoce bien c¨®mo fue el edificio ya que fue comisario de una exposici¨®n en 1996 sobre los Masriera. ¡°La familia conservaba documentaci¨®n y los planos del estudio que crearon imitando el modelo del taller de Fortuny en Roma. El estudio era el escaparate publicitario en el que mostrar sus obras y obtener nuevos clientes¡±. Seg¨²n el especialista, pese a que lo intent¨® varias veces, incluso v¨ªa Ayuntamiento y llamando a la puerta, jam¨¢s le permitieron acceder al interior sus actuales due?os. ¡°En los ¨²ltimos a?os hab¨ªa un hermetismo absoluto alrededor de este edificio¡±.

En 1912 el gran joyero del modernismo Llu¨ªs Masriera, hijo de Josep, hered¨® el edificio y el estudio. Entre las reformas que realiz¨®, una fue construir un teatro al fondo de la construcci¨®n, que m¨¢s adelante, en 1933, lleg¨® a ser el teatro Studium con capacidad para 500 personas, sin duda uno de los activos del edificio de cara a su potencial uso. ¡°Es una muy buena noticia que el edificio se recupere para la ciudad y se le d¨¦ una nueva utilidad¡±, explica el ingeniero Llu¨ªs Masriera, nieto del joyero.

Confiscado por la Generalitat durante la Guerra Civil, tras el conflicto se convirti¨® en la sede estable de la sociedad teatral Club Helena hasta 1950. Al a?o siguiente el edificio fue adquirido por la congregaci¨®n Peque?a Compa?¨ªa del Coraz¨®n Eucar¨ªstico de Jes¨²s para convertirlo en residencia de religiosas. Desde este momento comenz¨® una gran transformaci¨®n del interior. Esta congregaci¨®n acab¨® integrada en la fundaci¨®n Pere Relats que es la que ha llegado a un preacuerdo para vender el inmueble.