Cuenta atr¨¢s para las dos desaladoras por estrenar de Castell¨®n

Las plantas desaladoras de Oropesa y Moncofa, en Castell¨®n, se han convertido en un verdadero problema econ¨®mico. Ambas se proyectaron con la previsi¨®n de que en 2009 estar¨ªan a pleno rendimiento para abastecer de agua a una poblaci¨®n futura prevista en 225.000 personas. Los municipios que iban a beneficiarse contaban entonces con unos 90.000 habitantes en verano, pero ninguno de los grandes proyectos urban¨ªsticos proyectados ha visto la luz y ahora ning¨²n Consistorio las ve necesarias. Aun as¨ª, el Gobierno va a ponerlas en marcha este a?o para no perder las ayudas europeas recibidas y que suman 35 millones de euros.

La comisaria europea de Pol¨ªtica Regional, Corina Cretu, ha manifestado que esperan que ambas plantas empiecen a funcionar en 2015 para que no haya ninguna repercusi¨®n econ¨®mica para los municipios afectados. La afirmaci¨®n la hizo el pasado mes de diciembre en respuesta a una pregunta de Jordi Sebasti¨¤ (Comprom¨ªs-Equo). En ella explicaba que las desaladoras est¨¢n a la espera de que la Generalitat valenciana otorgue la Autorizaci¨®n Ambiental Integrada (AAI).

Las obras de la de Moncofa ya han finalizado y Europa ha establecido que estar¨¢ operativa en el primer trimestre de 2015. La de Oropesa est¨¢ en fase de pruebas y se espera que est¨¦ en funcionamiento en el segundo trimestre del a?o. La misma previsi¨®n la hacen desde Acuamed, el organismo del Ministerio de Medio Ambiente responsable de estos proyectos. Seg¨²n indicaron, el plazo para activarlas y no tener que devolver los fondos europeos acaba a finales de a?o, por lo que no habr¨ªa ning¨²n riesgo.

Desde la Comisi¨®n Europea han indicado, por su parte, que el l¨ªmite es el 31 de marzo de 2017. Si en esa fecha no est¨¢n en uso, ¡°la Comisi¨®n proceder¨¢ a la recuperaci¨®n de los fondos¡±. Son dos a?os m¨¢s de margen para resolver el problema al que se enfrentan los cinco Ayuntamientos que en su d¨ªa firmaron el convenio para abastecerse con el agua desalada: Oropesa, Cabanes, Benic¨¤ssim, Moncofa y Xilxes. El ministerio desconoce esta fecha y trabaja con la de 2015. Todos los consistorios deben devolver en 25 a?os el coste de la obra (104,5 millones las dos plantas) excepto lo subvencionado por Europa, as¨ª como el coste de explotaci¨®n.

¡°?C¨®mo pagar¨¢ Moncofa? No lo s¨¦, es algo que se ten¨ªa que haber previsto¡±, dice el alcalde, Jaime Picher (PSPV). Este municipio es, junto con Oropesa y Cabanes, de los que ten¨ªan mayor proyecci¨®n urban¨ªstica. La desaladora garantizaba el abastecimiento para uso urbano. Ahora, con viviendas vac¨ªas y PAI sin construir, la planta es innecesaria pero Picher considera que no deja de ser una ¡°garant¨ªa¡± para el futuro.

Vicente Mart¨ªnez, alcalde popular de Xilxes, otro de los Ayuntamientos que en su d¨ªa firmaron el convenio, reconoce que la planta permit¨ªa el desarrollo urban¨ªstico. ¡°Pero desde 2007 (con el estallido de la burbuja) dej¨® de tener sentido¡±, dice. Mart¨ªnez asegura que los ayuntamientos afectados llevan meses negociando con Medio Ambiente para buscar una f¨®rmula ¡°sostenible¡± de pago porque las cifras son ¡°inasumibles¡±.

Por el momento, la f¨®rmula parece ser la de alargar su puesta en marcha. Acuamed anunci¨® en 2012 que estar¨ªan funcionando a mediados de ese a?o y han pasado tres sin avances visibles. La Generalitat tampoco ha emitido la Autorizaci¨®n Ambiental Integrada.