El pintor que se apodera de los espacios

Javier Ria?o (Bilbao, 1959) dice que cuando lleva a la pintura un lugar que capta su atenci¨®n trata de crear una atm¨®sfera con la luz y los contrastes. Renuncia a contar en cuadros que reflejan su visi¨®n de la arquitectura, a veces como encuadres que se abren a un exterior en el que la luz vuelve a ser protagonista marcando el camino. "Son espacios que acaban siendo m¨ªos", dice en la sala Rekalde ante una exposici¨®n que re¨²ne trabajos realizados en los ¨²ltimos cinco a?os. La muestra se inaugura este viernes, con 41 pinturas de gran formato (sala Rekalde, hasta el 3 de mayo de 2015).

Las arquitecturas que pinta Ria?o son sobrias y silenciosas, formas geom¨¦tricas que componen el cuadro y no prestan atenci¨®n a los detalles. El recorrido de la exposici¨®n arranca con cuadros de colores austeros en los que se plasma el inter¨¦s por los interiores de edificios contempor¨¢neos, las escaleras, las barandillas, los patios vac¨ªos. En otra serie la arquitectura es el marco que permite ver los paisajes exteriores o las piscinas caracter¨ªsticas del autor.

En la po¨¦tica de los espacios representados por Ria?o no hay un inter¨¦s por identificarlos. "No se trata de reconocer el espacio, sino de hacerlo m¨ªo a trav¨¦s de la forma o del color", explica.?

Ria?o, con cuatro d¨¦cadas de trayectoria art¨ªstica, y director de Bilbaoarte desde su fundaci¨®n en 1996 hasta hace cuatro a?os, siempre ha dominado los recursos del oficio, como explica Javier Gonz¨¢lez de Durana en el cat¨¢logo de la exposici¨®n, "pero nunca se ha deleitado en demostrarlo". "El proceso de trabajo queda pudorosamente a resguardo y solo la imagen final, sobria y concisa, gu¨ªa las intenciones laborales y creativas".

Son siempre obras sin t¨ªtulo. "Te puedes volver muy filos¨®fico si empiezas a buscar referencias para los t¨ªtulos", bromea. "El cuadro lo tiene que decir todo". El autor confiesa sentirse m¨¢s a gusto en las pinturas de gran formato. "Me permiten introducirme en la imagen, y empezar a trabajar a partir de los fondos". El proceso es largo. Comienza por un simple boceto o una foto captada con el tel¨¦fono sobre la marcha, esquivando la presencia humana que nunca llegar¨¢ a su pintura. Dibuja y pinta hasta encontrar ese espacio que ya considera propio. Las pruebas con los tintes y las pinturas fueron muchas hasta encontrar el material que le permiti¨® llevar el color a las telas.

"El oficio de Ria?o es la visi¨®n", destaca Gonz¨¢lez de Durana. "?l vive con las im¨¢genes - las que encuentra y las que compone - y sabe que las im¨¢genes tienen una capacidad metaf¨®rica. En el primer impulso se encuentra m¨¢s c¨®modo con las im¨¢genes que gu¨ªan su mano que con las ideas e interpretaciones", a?ade. "Primero siente las im¨¢genes, despu¨¦s las va realizando, pero a medida que avanza en su ejecuci¨®n lo conceptual toma cuerpo hasta que, finalmente, piensa sobre lo realizado m¨¢s como idea que como representaci¨®n". ?

En las obras que cierran la exposici¨®n estalla el color. Son piezas monocromas en amarillo brillante, rojo o turquesa en toda su intensidad. En palabras de Gonz¨¢lez de Durana, "es el mismo pintor que era antes, pero como si repentinamente hubiera recuperado su perfil m¨¢s pop".