EiTB: el imposible ajuste de plantilla
Abrir una reflexi¨®n sobre la estrategia del ente, posible ant¨ªdoto frente al ERE
El Gobierno vasco cerrar¨¢ su particular mes horrible de febrero con el trago del consejo de administraci¨®n de EiTB del pr¨®ximo d¨ªa 24, donde la oposici¨®n ¡ªEH Bildu tiene pendiente su particular debate¡ª prolongar¨¢ la batalla pol¨ªtica contra la directora general del ente, Maite Iturbe, que inici¨® con una holgada victoria en el Parlamento. Aunque en este caso no prosperar¨¢ la moci¨®n del PSE-EE, los partidos cr¨ªticos con el ERE en la radio p¨²blica y la l¨ªnea informativa en la televisi¨®n buscan un pretendido desgaste que, sin embargo, no alterar¨¢ la voluntad del lehendakari de mantener a Iturbe en el cargo.
Derrota segura
1.La petici¨®n de dimisi¨®n de Iturbe, que plantea el PSE-EE, no prosperar¨¢ en el consejo de administraci¨®n de EiTB del pr¨®ximo d¨ªa 24.
2.Para que triunfara deber¨ªa reunir los dos tercios de los 20 representados en el consejo y donde se incluye el voto de la propia directora general.
3.El rechazo a la petici¨®n socialista vendr¨ªa de los 6 votos del PNV y de los representantes de Eusko Ikaskuntza y Euskaltzaindia. Adem¨¢s, el PSE no contar¨ªa con el apoyo de LAB y se mantiene la inc¨®gnita del voto de los cuatro consejeros de EH Bildu, que siguen debatiendo su definitiva posici¨®n.
4.Los tres consejeros socialistas unir¨ªan sus apoyos a los dos del PP. Incluso con el hipot¨¦tico voto abertzale no llegar¨ªan nunca a los 13 votos requeridos.
La direcci¨®n de EiTB quiere aligerar el volumen de plantilla para ser menos gravosos a los Presupuestos vascos, pero no acierta con las f¨®rmulas elegidas ni con la b¨²squeda de apoyos. Aquella OPE del pasado a?o para regularizar a 79 contratados indefinidos no fijos en sus emisoras tuvo el apoyo entusiasta de EH Bildu y LAB por un indisimulado respaldo al euskera, pero choc¨® contra la legalidad. Luego, la iniciativa ¡ª criticada porque escond¨ªa un recorte de 30 empleos¡ª se vio abocada a un inevitable ERE que ha indignado m¨¢s fuera del consejo que dentro. ?Soluci¨®n? Muy complicada y, desde luego, propensa a dilatarse en el tiempo. Para complicar m¨¢s a¨²n la viabilidad de su itinerario, el PNV se ha encontrado inesperadamente con el bofet¨®n de EH Bildu, confiados como estaban en que seguir¨ªan su l¨ªnea de apoyo como hab¨ªan hecho con la OPE.
El ERE ha creado un conflicto entre EH Bildu y sus consejeros del ente
Pero una evidente descortes¨ªa de la c¨²pula del ente al presentar el inevitable ERE como un hecho consumado en v¨ªsperas del consejo enfureci¨® de tal modo a la coalici¨®n soberanista que orden¨® a sus representantes no secundar el expediente y, sin querer, abri¨® una v¨ªa de agua en esta formaci¨®n. Los consejeros abertzales ¡ªsignificativa representaci¨®n de profesores universitarios¡ª no est¨¢n en contra del ERE, como le ocurre a LAB, sindicato que no secundar¨¢ ninguna de las protestas previstas contra estos previsibles despidos, entre ellas una huelga coincidiendo con la reuni¨®n del pr¨®ximo d¨ªa 24 de febrero. No obstante, EH Bildu puede sacar del atolladero a Iturbe. Mientras deciden su postura, en medio de un debate con la direcci¨®n pol¨ªtica, Karmelo Landa adelant¨® a este peri¨®dico que es ¡°imprescindible¡± acometer un ¡°doble debate¡±.
De un lado, la estrategia sobre cu¨¢l debe ser el modelo de comunicaci¨®n del ente en el conjunto de los medios informativos que aglutina; de otro, el debate social abierto a los agentes m¨¢s diversos. As¨ª las cosas, la direcci¨®n de EiTB dispondr¨ªa de un margen necesario para aplacar los ¨¢nimos y, sobre todo, evitar el desgaste pol¨ªtico que acarrear¨ªa al PNV la aplicaci¨®n del ERE en un sector de honda repercusi¨®n social como un medio de comunicaci¨®n, adem¨¢s p¨²blico. Esta posible alternativa engarzar¨ªa, incluso, con el prop¨®sito acordado por el ente con partidos y sindicatos de definir a finales de 2016 el modelo EiTB. De hecho, el anuncio del ERE fue entendido por EH Bildu como un incumplimiento de este proceso de reflexi¨®n. Por si fuera poco, la alternativa a la anulaci¨®n del ERE aprobado en el consejo de administraci¨®n ser¨ªa el inmediato regreso a la OPE que ya ha cubierto sus primeros pasos con la aprobaci¨®n de las 13 primeras plazas.
Ya hay 13 aprobados
L¨®gicamente, el primer paso obliga a plantear en el consejo la revocaci¨®n del ERE y en el supuesto de que prosperara afrontar sus repercusiones. Tampoco habr¨ªa que descartar en este tortuoso camino la variable envenenada que supondr¨ªa la victoria del recurso de la Abogac¨ªa del Estado contra la OPE y que aguar¨ªa definitivamente todos los planes. Como primera medida habr¨ªa que incorporar como fijos a las 13 personas que ya han aprobado la primera fase de la oposici¨®n. Y en el medio de esta situaci¨®n tan enmara?ada aparece una abierta pelea sindical donde LAB ha aumentado su ventaja respecto a ELA. En un mero an¨¢lisis laboralista, quienes apoyan el ERE ponen en valor que ¡°los trabajadores afectados por la regulaci¨®n ganar¨ªan tres veces m¨¢s de lo que les tendr¨ªan que pagar si no sacaran la plaza en la OPE y pierden su puesto¡±.
En cambio, EH Bildu no comparte esta tesis desde su convicci¨®n del mantenimiento del empleo, aunque parad¨®jicamente la OPE supon¨ªa un recorte de 30 puestos m¨¢s all¨¢ de que 49 plazas se convirtieran en fijas. Hay quien atribuye este cambio de criterio en la coalici¨®n al ¡°s¨ªndrome de los titulares de prensa¡±, que vincular¨ªan a los soberanistas con un ERE en pleno proceso electoral. Con todo, ah¨ª no acaba el v¨ªa crucis para la direcci¨®n de EiTB en su cruzada contra un ajuste progresivo de la plantilla que en su d¨ªa ya intent¨® el Gobierno de Patxi L¨®pez, pero que abandon¨® consciente de que ¡°saldr¨ªa escaldado¡±. Ahora mismo, todav¨ªa planea el futuro del servicio de Internet tras la condena a admitir a 25 trabajadores procedentes de una subcontrata. En el supuesto de que se plantearan nuevos recortes volver¨ªa a actualizarse la advertencia reiterada de LAB: que la direcci¨®n de EiTB empiece por el personal de confianza incorporado al ente durante la etapa de Andoni Ortuzar como director general. Por eso toma cuerpo la viabilidad de la reflexi¨®n de Landa.
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