El IVAM da la bienvenida al c¨®mic

Las 3.600 letras ¡®ese¡¯? que integran la instalaci¨®n que Francesc Ruiz? (Barcelona, 1971) ha creado espec¨ªficamente para la Galer¨ªa 5 del Institut Valenci¨¤ d'Art Modern (IVAM) esconden otras tantas historias que a su vez abren puertas a otros universos. Con ella, el IVAM abre una nueva etapa en la que "va a prestar especial atenci¨®n en su programaci¨®n a expresiones art¨ªsticas relacionadas con la ilustraci¨®n y el c¨®mic y a trabajos realizados espec¨ªficamente para las salas del museo".

Seleccionado este a?o para participar en el pabell¨®n espa?ol de la Bienal de Venecia, Francesc Ruiz se reconoce fan de la Nueva Escuela Valenciana de C¨®mic de los a?os 80. La instalaci¨®n surge, primero, de "una corazonada", tras quedar fascinado a la temprana edad de 12 a?os por Trit¨®n, una obra del dibujante m¨¢s c¨¦lebre de esa escuela, Daniel Torres. De hecho, entonces empez¨® a "dibujar c¨®mics".

A la instalaci¨®n preceden dos meses de concienzuda b¨²squeda, que van de hemerotecas para revisar la colecci¨®n de la Cartelera Turia u otras publicaciones a un viaje a X¨¤tiva, por ejemplo, para acceder a un ejemplar de la revista infantil Camacuc que pose¨ªa un coleccionista. De un coleccionista tambi¨¦n obtuvo las eses de un viejo bonob¨²s? de la EMT dedicado al c¨®mic valenciano de cuyo dibujo que era autor Micharmut.

En este proceso le ha impresionado especialmente el trabajo de Miguel Calatayud, considerado "el padre" de la generaci¨®n de referencia, porque une el dibujo a "la estilizaci¨®n a la hora de rotular". Es uno de los m¨¢s representados en esta instalaci¨®n mural.

"Me interesa el c¨®mic como materia cultural, pero tambi¨¦n las historias de los c¨®mics, c¨®mo en ellos se ve reflejada la sociedad", explica el artista. Como muestra apunta su novela gr¨¢fica Manga Mammoth, en la que investigaba los v¨ªnculos entre la capital japonesa y el c¨®mic homoer¨®tico. "Intento que el c¨®mic genere realidad", a?ade.

En un breve recorrido por parte de la exposici¨®n, el primer impulso es identificar algunas de las m¨²ltiples eses que a la vista del espectador se ofrecen en las paredes. Se trata de un juego estimulante que se puede abordar, para no caer en la frustraci¨®n en caso de no dar con la procedencia, con la ayuda de una revista en la que aparecen todas ellas numeradas con sus respectivas leyendas explicativas.

Para hacerse una idea, las eses del 1 al 8 vienen de uno de los Tebeus del cingle que dibuj¨® Manel Gimeno, que para Ruiz, ha sido una de las grandes sorpresas de los trabajos preparativos. Las ¨²ltimas, del 3.385 al 3.420 vienen de las entradas del metro con elementos tubulares en el tramo Alameda-Ayora.

La instalaci¨®n, que impregna las paredes de la sala 5 (en cierta forma, otra S) del IVAM, repasa los fanzines iniciales donde aparecieron las primeras obras de Miquel Beltr¨¢n, Daniel Torres, Sento, Mariscal, Micharmut o Manel Gimeno, los casos de editoriales como Arrebato y revistas editadas en Barcelona como Cairo, B¨¦same Mucho, El V¨ªbora, Los Tebeos del Rollo, Complot o Star, donde publicaban los dibujantes valencianos.?

?El segundo nivel de la instalaci¨®n sigue la evoluci¨®n estil¨ªstica de la escuela de los 80, la vinculaci¨®n de los bares y discotecas de la ¨¦poca (se puede encontrar un impensable estampado de la sala Chocolate) con el dise?o gr¨¢fico, la instituci¨®n de todo el movimiento y su capacidad de "acabar por construir la imagen de marca de la ciudad en una explosi¨®n de modernidad".? Yendo a¨²n m¨¢s lejos, Francesc Ruiz cree que autores como Mariscal, construyen algo m¨¢s que ciudad, "llega a construir un mundo a partir de sus trazos". A otra escala, Disney tambi¨¦n lo hizo, recuerda.?