Los ¡®elefantes blancos¡¯ de Gallard¨®n
El Comit¨¦ Ol¨ªmpico compara con paquidermos albinos las inversiones in¨²tiles El exalcalde, que nunca logr¨® los Juegos, invirti¨® 10.500 millones durante su mandato para cambiar la piel de la ciudad. La campa?a electoral ha puesto en cuesti¨®n su legado
Retirado ya de la pol¨ªtica, a Alberto Ruiz-Gallard¨®n (PP), el alcalde que cambi¨® la fisonom¨ªa de Madrid y la anatom¨ªa de su Ayuntamiento, le ha llegado la hora del examen final a su gesti¨®n municipal (2003-2011). Ana Botella concluy¨® su ¨²ltimo mandato, al convertirse ¨¦l en ministro de Justicia, pero ser¨¢n las elecciones de mayo las que juzguen su legado.
Con una inversi¨®n de 10.457 millones en sus ocho a?os y medio de mandato, Gallard¨®n construy¨® edificios y enterr¨® autov¨ªas, peatonaliz¨® barrios y sembr¨® la ciudad de escuelas infantiles, instalaciones deportivas y centros sociales. Duplic¨®, casi triplic¨® el presupuesto municipal, desde los 2.300 millones del ¨²ltimo a?o de su predecesor, Jos¨¦ Mar¨ªa ?lvarez del Manzano (PP), hasta los 5.300 millones de 2008, antes de la gran recesi¨®n. Pero tambi¨¦n dispar¨® la deuda, desde los 1.366 millones heredados de ?lvarez del Manzano hasta los 6.453 millones que dej¨® a Botella cuando en diciembre de 2011 salt¨® al Gobierno central (dimiti¨® en 2014). Aunque en realidad la deuda fue mayor: sumando las empresas municipales y las facturas impagadas, rebas¨® los 9.000 millones, y oblig¨® a dos rescates consecutivos del Ministerio de Hacienda.
Botella, cuya pol¨ªtica ha sido deudora y continuaci¨®n de Gallard¨®n, presumi¨® el viernes de haber rebajado esa deuda a 5.936 millones. El ¨²nico halago que ha recibido hasta el momento de Esperanza Aguirre, candidata del PP para las elecciones de mayo, ha sido para ¡°su gesti¨®n extraordinaria en la ortodoxia financiera¡±.
Aguirre ha cuestionado, entre otros asuntos, la limpieza de la ciudad, hasta el punto de tachar varios barrios (incluido el suyo de Malasa?a) de ¡°guetos¡±. Pero su mayor andanada ha sido para Gallard¨®n por el aspecto m¨¢s espinoso de su gesti¨®n: las obras.
Aguirre carg¨® contra el palacio de Cibeles, pero ese edificio es s¨®lo el paradigma del gasto en obras, los sobrecostes de varias infraestructuras y la incapacidad para hallar utilidad a las finalizadas, agravado esto ¨²ltimo por las tres candidaturas ol¨ªmpicas fallidas. Usando la terminolog¨ªa del Comit¨¦ Ol¨ªmpico Internacional sobre edificios car¨ªsimos sin uso posible tras los Juegos, son los ¡°elefantes blancos¡± de Gallard¨®n.
Los precedentes. Antes que alcalde, Gallard¨®n presidi¨® la Comunidad (1995-2003). En sus primeros a?os, construy¨® un nuevo edificio para la Asamblea regional y reform¨® la sede del Gobierno auton¨®mico. El presupuesto anunciado para cada obra rond¨® los 17 millones de euros. Su predecesor, Joaqu¨ªn Leguina (PSOE), tambi¨¦n se hab¨ªa planteado remodelar el edificio de la puerta del Sol: no se atrevi¨® por su coste. Curiosamente, el traslado en 2007 del Ayuntamiento desde la Casa de la Villa al Palacio de Cibeles tambi¨¦n fue idea del PSOE, en este caso de la rival de Gallard¨®n en las municipales de 2003, Trinidad Jim¨¦nez. Gan¨® ¨¦l, y se sali¨® con la suya: el Estado le cedi¨® el Palacio de Telecomunicaciones a cambio de edificios valorados en 360 millones, y Gallard¨®n hizo una reforma tasada en 80 millones y que acab¨® costando 138. En total, 500 millones.
?En qu¨¦ gast¨® 10.500 millones de euros?
Gallard¨®n invirti¨® 10.456 millones de euros en sus ocho a?os y medio de mandato. El 55,5% de las actuaciones se sufragaron con deuda. La notable gesti¨®n de su equipo econ¨®mico, encabezado por Juan Bravo, le permiti¨® llevar a cabo esas obras en tiempos de bonanza, y mantener a pleno rendimiento el gobierno local cuando la crisis recort¨® los ingresos y complic¨® el pago de la deuda pendiente. Pero ?qu¨¦ construy¨® con ese dinero? La principal inversi¨®n fue el soterramiento de la M-30, que cost¨® 4.142 millones, seg¨²n las cuentas del equipo de Gallard¨®n, a los que se sumaron 371 millones del parque de Madrid R¨ªo. Gallard¨®n gast¨® 376 millones en infraestructuras culturales, principalmente Matadero (61,3) y Conde Duque (32,7).
Las actuaciones urban¨ªsticas (sin contar la M-30) se llevaron 1.156 millones, con un coste aparejado de 640 para suelo. En v¨ªas ciclistas se gast¨® 59 millones; en mantenimiento urbano, 281; en centros deportivos municipales, 186; en instalaciones deportivas b¨¢sicas, 78; en bibliotecas, 53; en centros polivalentes, 71; en otros centros culturales, 141; en colegios p¨²blicos, 166; en escuelas infantiles, 96; en escuelas de m¨²sica, 13; en equipamientos para los servicios sociales, 212...
Aguirre ha prometido una consulta para ver qu¨¦ hacer con el inmueble una vez que devuelva su despacho a la Casa de la Villa. No ha aclarado qu¨¦ har¨ªa con los 2.000 funcionarios que trabajan en Cibeles ni con el centro cultural que ocupa el 65% del edificio.
El Madrid Ol¨ªmpico. Gallard¨®n impuls¨® las candidaturas fallidas para los Juegos Ol¨ªmpicos de 2012, 2016 y 2020. Esta ¨²ltima, gestionada por Botella, presum¨ªa de tener el 74% de las infraestructuras construidas y cifraba en 6.536 millones la inversi¨®n realizada ya para preparar los Juegos. Pero en realidad ese dinero se hab¨ªa dedicado a autov¨ªas, metro, aeropuerto... Infraestructuras ol¨ªmpicas como tales, tan s¨®lo se construy¨® la Caja M¨¢gica.
Inaugurada en 2009, se licit¨® por 139.749.625 euros. En 2011 ya hab¨ªa costado 294.045.576 euros (un 110% m¨¢s). EL PA?S ha desvelado esta semana un sobrecoste adicional de entre 33 millones (lo que exige en los tribunales la constructora FCC) y siete millones (lo que est¨¢ dispuesto a aceptar el Ayuntamiento), que subir¨ªa el coste a m¨¢s de 300 millones.
La Caja M¨¢gica apenas tiene uso y arrastra p¨¦rdidas debido a su alto coste de mantenimiento. Pero al menos est¨¢ terminada, no como el Centro Acu¨¢tico, la otra gran instalaci¨®n ol¨ªmpica, cuyas obras se iniciaron con un presupuesto de 137 millones y se paralizaron en 2011 tras un desembolso de 54,5 millones. El esqueleto ha sido tasado en 19 millones.
Al lado se encuentra La Peineta. Gallard¨®n convenci¨® al Atl¨¦tico de Madrid para convertir el estadio Vicente Calder¨®n en pisos y sufragar as¨ª los 200 millones que costar¨ªa reformar y mudarse luego a la Peineta. El cambio de campo, previsto para 2012, se ha retrasado ya a 2018. Las obras siguen su lento curso y, tras sortear su paralizaci¨®n judicial, est¨¢n pendientes de la negociaci¨®n entre FCC, el Ayuntamiento y el club. Las cuentas, tras el derrumbe de la burbuja inmobiliaria, no salen.
Reveses judiciales. La mudanza del Atl¨¦tico la anul¨® el Tribunal Superior de Justicia al tumbar el plan urban¨ªstico de Gallard¨®n para construir pisos sobre el suelo del Calder¨®n. Ese mismo tribunal anul¨® tambi¨¦n el plan impulsado por el exalcalde (que acab¨® aprobando Botella) para ampliar el estadio Santiago Bernab¨¦u de acuerdo con los planes del presidente del Real Madrid, Florentino P¨¦rez. Y tambi¨¦n la Operaci¨®n Chamart¨ªn, aprobada en 2011 para alargar casi cuatro kil¨®metros el Paseo de la Castellana y construir 17.000 viviendas. Y tambi¨¦n el plan de ceder a la iglesia cat¨®lica 15.000 metros cuadrados de suelo municipal junto a la iglesia de San Francisco el Grande para que construyera all¨ª una nueva sede arzobispal (bautizada como minivaticano por su tama?o).
Aunque para anulaci¨®n, la del Tribunal Supremo, que en 2013 tumb¨® el Plan General de Ordenaci¨®n Urbana de 1997 en lo referido a todos los nuevos barrios de la capital (desde Vallecas a Valdebebas, pasando por el aeropuerto de Barajas), como castigo por una artima?a jur¨ªdica de Gallard¨®n. En ese varapalo muri¨® tambi¨¦n la Operaci¨®n Campamento, que ahora se pretende reanimar al hilo del inter¨¦s del inversor chino Wang Jianlin por los terrenos.
Pero la Justicia no s¨®lo ha actuado por lo que ha hecho Gallard¨®n, sino tambi¨¦n por lo que no ha hecho: la Fiscal¨ªa Provincial de Madrid abri¨® una investigaci¨®n al Ayuntamiento por abandono del patrimonio hist¨®rico al dejar caerse a pedazos el palacio de la duquesa de Sueca, y otra por derribar una casa blasonada del siglo XVII en el barrio de Embajadores.
Los fantasmas. El Centro de Convenciones de la Castellana se ha quedado en un agujero en el que se invirtieron 83 millones. Ahora se ha licitado para uso comercial con un alquiler de dos millones anuales. Har¨¢n falta 43 a?os para rentabilizarlo. No es la ¨²nica instalaci¨®n fantasma.
Algunas obras de Gallard¨®n siguen en obras a¨²n, como la reforma del paseo de la Direcci¨®n (encomendada hace casi una d¨¦cada a Dragados) o la nave Boetticher (bautizada como ¡°catedral de las nuevas tecnolog¨ªas¡± cuando al fin se iniciaron los trabajos, en 2009, tras a?os de preparaci¨®n). Otras nunca se realizar¨¢n, como la recuperaci¨®n del templete de la Red de San Luis o el coliseo de las Tres Culturas (encomendado por ?lvarez del Manzano al empresario Jos¨¦ Luis Moreno). Y otras est¨¢n a la espera de hacerse realidad desde hace a?os, como la reforma de los mercados de La Cebada y Mostenses, o la rehabilitaci¨®n de la plaza de Espa?a (prometida por Gallard¨®n, ideada por Botella, y a expensas del pr¨®ximo alcalde; un tercio del presupuesto correr¨ªa a cargo de Wang Jianlin, propietario del edificio Espa?a).
La lista de proyectos frustrados o a medias es interminable: las Escuelas P¨ªas funcionan a medio gas (falta la escuela infantil, por ejemplo); el centro Conde Duque tiene varias instalaciones pendientes; el antiguo mercado de Legazpi prev¨¦ renacer como centro deportivo; la Casa de la Carnicer¨ªa est¨¢ en v¨ªas de mudar en hotel; los salones hist¨®ricos de la Casa de la Villa siguen cerrados, como lo est¨¢n tambi¨¦n los teatros Madrid y Dao¨ªz y Velarde...
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