La factura pendiente del consejero Blasco
La justicia ha condenado a la Generalitat a pagar 675.000 euros por marginar a dos ONG Cinco recursos pendientes elevar¨ªan el coste a 1,6 millones
La Generalitat valenciana ha sido condenada en dos semanas a pagar 675.000 euros por el trato discriminatorio que la Consejer¨ªa de Solidaridad y Ciudadan¨ªa dispens¨® a dos ONG, Solidaridad Internacional del Pa¨ªs Valenciano y Asamblea de Cooperaci¨®n por la Paz, en la etapa en que Rafael Blasco dirig¨ªa el departamento. Pero hay pendientes cinco recursos m¨¢s, basados en los mismos principios, que pueden elevar la cantidad total a pagar a 1,6 millones de euros. Las ONG valencianas celebran las sentencias, aunque advierten de que si los fallos firmes se ejecutan a costa del ¡°exiguo presupuesto¡± destinado este a?o a la ayuda al desarrollo, que suma 1,1 millones, la convocatoria se quedar¨¢ a cero.
Cuando Blasco ¡ªcondenado en mayo pasado a ocho a?os de c¨¢rcel por desviar ayudas¡ª era consejero (2007-2011), el ¨¢rea de cooperaci¨®n lleg¨® a manejar m¨¢s de 20 millones.
El ¨¦xito en la impugnaci¨®n del reparto de subvenciones que firmaba el exconsejero es atribuible en buena medida al abogado Ra¨²l Vidal. El letrado encontr¨® la v¨ªa que ha llevado al Tribunal Superior de Justicia (TSJ) valenciano a condenar reiteradamente a la Generalitat a pagar proyectos que deneg¨® en su d¨ªa. El argumento de las sentencias es el mismo: las decisiones se tomaron sin ¡°motivaci¨®n¡± y con ¡°arbitrariedad¡±. El primer recurso que present¨®, de la ONG Atelier, ser¨¢ resuelto por el TSJ en mayo. El tribunal tiene sobre la mesa tambi¨¦n recursos de Fiadelso y otro de Solidaridad Internacional del Pa¨ªs Valenciano.
La Coordinadora de ONG pide a la Generalitat que no agote el presupuesto de cooperaci¨®n con el pago de las sentencias
Vidal no hab¨ªa trabajado hasta 2011 en el campo de la cooperaci¨®n. Pero ten¨ªa experiencia en el ¨¢rea administrativa. ¡°Cuando me ense?aron las primeras resoluciones les dije enseguida que me parec¨ªan nulas o anulables de pleno derecho. No hac¨ªa falta entrar en la parte t¨¦cnica, que refuerza la tesis, simplemente no estaban motivadas. Se repart¨ªan 20 puntos en la convocatoria sin indicar qu¨¦ criterios o baremos se hab¨ªa utilizado¡±, explica.
Los 20 puntos se conced¨ªan en funci¨®n de la adecuaci¨®n de los proyectos presentados por las ONG ¡°a los objetivos y prioridades de la pol¨ªtica de la Generalitat¡±. Un criterio que la justicia no cuestiona en s¨ª mismo, sino en tanto que solo era una frase. Ni las bases de la convocatoria ni las resoluciones indicaban por qu¨¦ un proyecto era merecedor de 20 puntos y otro de cero.
En opini¨®n del abogado ese hecho denotaba que el de la cooperaci¨®n era un colectivo poco dado a recurrir. ¡°En tales casos la Administraci¨®n se relaja y puede llegar a extremos como este, donde se conced¨ªa y se denegaba sin fundamento¡±.
"Hab¨ªa que dar batalla. Blasco no hab¨ªa encontrado una respuesta a la altura", afirma la responsable de Atelier
Uno de los motivos que llevaron a Atelier a impugnar, seg¨²n su fundadora Consuelo Vidal, fue acabar con esa din¨¢mica. ¡°Pensamos que hab¨ªa que dar batalla porque el conseller Blasco no se hab¨ªa encontrado con una respuesta a la altura necesaria por parte de las ONGD, pese a que hab¨ªamos detectado ya algunas resoluciones arbitrarias¡±.
Cuando Atelier interpuso los recursos, en 2011, EL PA?S ya hab¨ªan publicado los primeros indicios sobre irregularidades en ayudas concedidas por Blasco a dos proyectos en Nicaragua por importe de 1,6 millones. Unos hechos por los que el exconsejero y cinco cargos del Consell han sido condenados a prisi¨®n, aunque el fallo ha sido recurrido al Tribunal Supremo.
La responsable de Atelier a?ade que en la convocatoria ¡°aparec¨ªan entidades que no conoc¨ªamos de nada, despu¨¦s de llevar 21 a?os en la cooperaci¨®n en Valencia, y s¨ª recib¨ªan ayudas¡±. Algunas de esas ONG est¨¢n inmersas hoy en las piezas dos y tres del caso Blasco.
El abogado Ra¨²l Vidal consigui¨® que el tribunal aceptase que un perito revisase esos expedientes sospechosos y los comparase con los denegados. El dictamen de la jefa del departamento de ONGD de la Agencia Espa?ola de Cooperaci¨®n Internacional (AECID) consider¨® irregulares los 20 puntos ligados a la adecuaci¨®n de los proyectos a las prioridades de la Generalitat. Y redujo la puntuaci¨®n t¨¦cnica obtenida por las entidades desconocidas mientras elevaba la de las recurrentes.
Fernando Contreras, responsable territorial de Oxfam y presidente de la Coordinadora Valenciana de ONG, hace una valoraci¨®n ¡°positiva¡± de las sentencias. ¡°Confirman que la coordinadora acert¨® cuando denunci¨® que aquellas resoluciones eran arbitrarias. Proyectos de ONG de largu¨ªsima trayectoria que se quedaban fuera, sin poder salvar vidas y generar progreso en los pa¨ªses del sur, porque los fondos iban a organizaciones, que no eran ONG, creadas espec¨ªficamente con ese objetivo¡±.
La coordinadora ha pedido a la Generalitat que no pague las condenas con los fondos de cooperaci¨®n porque ello consumir¨ªa el presupuesto de 2015. Una portavoz de la Consejer¨ªa de Bienestar Social afirma que se est¨¢ ¡°estudiando y valorando con prudencia¡± la petici¨®n.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.