Cartujos y defraudadores

La rectitud en la lucha contra el fraude se ha apoderado del coraz¨®n de los gobernantes. La proximidad de las citas electorales y el previsible correctivo ciudadano a la corrupci¨®n y a quienes la toleran ha hecho renacer el esp¨ªritu franciscano, mientras en la hoguera crepitan tarjetas black. La penitencia ha tomado el poder incluso iconogr¨¢ficamente, hasta el punto de permitir que una mano de polic¨ªa acompa?e el cogote de Rodrigo Rato a la hora de entrar en el coche tras ser detenido. La pena de telediario ha llegado hasta los referentes del PP.

Rajoy esgrime la actuaci¨®n contra Rato como un ejemplo de transparencia, mientras en Catalu?a es el propio Ejecutivo el que abre un buz¨®n para denunciar a los defraudadores. El calvinismo fiscal se ha apoderado del gobernante medio. Cualquiera dir¨ªa que, siete siglos despu¨¦s, los fraticelli se aprestan a triunfar sobre la corrupci¨®n del poder del dinero. Ha llegado la hora de la penitencia y el arrepentimiento. Y las cabezas de los Pujol y Rato, tras el pedag¨®gico auto de fe, huelen a hoguera en la plaza p¨²blica. Est¨¢ por ver, sin embargo, si todo este movimiento justiciero se limitar¨¢ a la punta visible del iceberg o se trata de un aut¨¦ntico prop¨®sito de enmienda.

Lo m¨¢s recomendable es desconfiar de las apariencias, como lo hac¨ªa Voltaire del pretendido rey fil¨®sofo Federico de Prusia, en cuya corte, dec¨ªa, hay un n¨²mero prodigioso de bayonetas y muy pocos libros. El profesor Jordi Matas Dalmases escrib¨ªa en este peri¨®dico que una quinta parte de los consejeros de Jordi Pujol estuvieron imputados en presuntos casos de corrupci¨®n, entre ellos m¨¢s de la mitad de los titulares de Econom¨ªa. Con estas credenciales bueno es ponerlo todo en cuarentena y por lo menos desconfiar de los sacrificios que se realizan desde los c¨ªrculos del poder en el altar de la anticorrupci¨®n.

Se trata de ir m¨¢s all¨¢ en el combate por la salud democr¨¢tica y horadar la superficie. Para comprender la magnitud de la empresa, las declaraciones del asesor fiscal de la familia Pujol desde 1983, Joan Anton S¨¢nchez Carret¨¦, ante la comisi¨®n parlamentaria que investiga el fraude en el Parlament son un aut¨¦ntico cursillo acelerado de c¨®mo la ingenier¨ªa legal y financiera act¨²a como salvavidas en el mar de la corrupci¨®n.

M¨¢s all¨¢ del chiste f¨¢cil sobre su viaje del mao¨ªsmo devoto al fervor business-friendly ¡ªun trayecto muy com¨²n entre los dirigentes comunistas chinos¡ª, el S¨¢nchez Carret¨¦ de los ¨²ltimos 30 a?os es un aut¨¦ntico cuaderno de bit¨¢cora de la Catalu?a del pelotazo con inevitables v¨ªnculos pol¨ªticos. Y es que, adem¨¢s de a los Pujol, ha sido asesor ¨¢ulico a modo medieval de buena parte del gotha financiero catal¨¢n: Casinos de Catalu?a, Tipel, Ibusa, Iberia de Seguros, empresas el¨¦ctricas ¡­ Su voz ha aconsejado durante decenios a Artur Suqu¨¦, propietario de Casinos. De hecho, lo hac¨ªa cuando la firma fue demandada por desviar unos 3.000 millones de pesetas a la financiaci¨®n de Converg¨¨ncia. El asunto fue, sin embargo, archivado porque, a tenor de lo fijado por el Tribunal Supremo en el caso Filesa, no pod¨ªa ser considerado delito. El juez asegur¨® que no investig¨® m¨¢s ¡°por prudencia¡± y por la falta de iniciativa de la fiscal¨ªa. Las balas silbaban sobre su cabeza, pero ni siquiera fue citado a declarar como testigo. Una exitosa conjunci¨®n astral.

S¨¢nchez Carret¨¦ tambi¨¦n auxili¨® a Isidor Prenafeta ¡ªprimo del secretario de presidencia Llu¨ªs Prenafeta¡ª y a su compa?¨ªa Tipel, de la que Artur Mas fue director financiero (1980-1984), y que acab¨® en quiebra.

El asesor fiscal de los Pujol fue en cambio condenado en 2003 a dos a?os de c¨¢rcel y 1,2 millones de euros de multa por un delito contra la Hacienda P¨²blica. En 1991, por una operaci¨®n de compraventa de dos centrales el¨¦ctricas cerrada en un d¨ªa se obtuvo una plusval¨ªa de 679 millones de las antiguas pesetas. El Gobierno colectivista de Rodr¨ªguez Zapatero lo indult¨® parcialmente en 2009 y le rebaj¨® de dos a?os a uno la condena.

En el curr¨ªculum de S¨¢nchez Carret¨¦ no pod¨ªa faltar el llamado caso Hacienda, otro jal¨®n de oro de la cultura del pelotazo. El asesor de los Pujol se sent¨® en el banquillo de los acusados por un turbio asunto en el que empresarios e inspectores de la Agencia Tributaria defraudaron al erario p¨²blico unos 13 millones de euros. Fue condenado a dos a?os de prisi¨®n por un delito continuado de falsedad en documento oficial y seis meses de inhabilitaci¨®n para cargos p¨²blicos por cohecho pasivo. El Tribunal Supremo le absolvi¨® de falsedad documental y se qued¨® con dos meses de arresto y dos a?os de suspensi¨®n. Suma y sigue en la suerte con la justicia.

Citado como testigo en la investigaci¨®n abierta a Jordi Pujol Ferrusola en la Audiencia Nacional, S¨¢nchez Carret¨¦ apareci¨® en la lista Falciani por mantener una cuenta en Suiza. El pasado 20 de abril y ante el Parlament, el asesor fiscal compar¨® a Falciani con el empresario Javier de la Rosa, otro amigo de los Pujol en anteriores encarnaciones. ¡°Ambos [Falciani y de la Rosa] robaron datos para venderlos¡±, asegur¨® con aplomo democr¨¢tico ante la comisi¨®n investigadora. Ah¨ª y en mostrar documentalmente su inocencia se extendi¨® S¨¢nchez Carret¨¦. Pero mantuvo su anunciado ¡°silencio cartujano¡± ante gran parte de las preguntas, incluyendo si hab¨ªa sido asesor del padre de Artur Mas. "Secreto profesional", respond¨ªa lac¨®nicamente.

La fiebre anticorrupci¨®n no ha contagiado a S¨¢nchez Carret¨¦, que no tiene entre sus proyectos inmediatos llevar el esp¨ªritu cartujano m¨¢s all¨¢ del c¨®modo voto de silencio. No vaya a ser que la suma austeridad de la orden acabe con el prestigio de uno de los or¨¢culos fiscales del pelotazo.